El Gobierno de Haití prorrogó hasta el miércoles, el toque de queda impuesto para restablecer el orden y recuperar el control del departamento Oeste del país, que incluye la capital, Puerto Príncipe, mientras UNICEF advirtió que la caótica situación en la isla era “casi como una escena sacada de ‘Mad Max’”, que describía un futuro post-apocalíptico violento y sin ley.
El toque de queda estará en vigor desde este domingo hasta el próximo miércoles, entre las 19:00 y las 05:00 hora local (de 23:00 a 09:00 GMT) y a él no estarán sujetos los agentes de la fuerza pública de servicio, los bomberos, el personal de las ambulancias, los trabajadores sanitarios y los periodistas debidamente identificados, informó el Ejecutivo.
“Las fuerzas del orden han recibido el mandato de usar todos los medios legales a su disposición para hacer respetar el toque de queda y detener a los infractores”, según la comunicación firmada por el titular de Finanzas Michel Patrick Boisvert que actúa como primer ministro en funciones en ausencia de Ariel Henry, quien se encuentra en Puerto Rico y que dimitirá cuando se implemente en Haití un consejo presidencial de transición.
En la nota se recuerda que durante el estado de emergencia, en vigor del 7 de marzo al 3 de abril, está prohibida cualquier manifestación en la vía pública, tanto de día como de noche, en el departamento del Oeste.
Con estas medidas, el Gobierno busca “restablecer el orden y tomar las medidas apropiadas para recuperar el control de la situación”.
Desde finales de febrero, la violencia se ha incrementado aún más en Haití, en especial en la zona metropolitana de Puerto Príncipe, en su mayor parte bajo el control de las poderosas bandas armadas que imponen el terror entre la población.
Estos días los ataques se han multiplicado contra instituciones, empresas públicas y privadas o cárceles, lo que permitió la huida hace dos semanas de más de 3.000 presos.
También fueron objetivo de las bandas, aunque sin éxito, el Palacio Nacional y el Ministerio de Interior.
Este clima de terror ha llevado a miles de personas a abandonar sus hogares y convertirse en desplazados internos que viven en campamentos improvisados sin los servicios básicos necesarios.
“La peor situación que se ha visto en décadas”
Esta situación llegó a la directora de la agencia de la ONU para la infancia a ofrecer una terrible evaluación de la caótica situación en Haití.
“Haití es una situación horrible”, dijo la directora ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell, al programa de entrevistas de la CBS “Face the Nation”.
“Hay muchísimas personas que padecen hambre y desnutrición graves y no somos capaces de hacerles llegar suficiente ayuda”, y las bandas controlan amplias zonas de la capital, Puerto Príncipe, así como las principales carreteras que conducen a otros lugares.
La situación es “la peor que se ha visto en décadas”, afirmó.
“Es casi como una escena sacada de ‘Mad Max’. Eso es lo que parece”, dijo Russell refiriéndose a la película de 1979.
Haití, ya afectado por la sequía, las catástrofes naturales y un gobierno débil, ha visto “el colapso casi total de los servicios básicos”, advertía un reciente informe de Naciones Unidas.
Esto ha dejado a millones de personas en una situación vulnerable mientras esperan la formación de un consejo de gobierno de transición que asuma el poder después de que el impopular Primer Ministro Ariel Henry anunciara su dimisión el lunes bajo presión.
Los problemas a los que se enfrentan los trabajadores humanitarios extranjeros -algunos de los cuales han sido atacados o secuestrados para pedir rescate- se pusieron de manifiesto el sábado, cuando varias bandas saquearon un cargamento de Unicef destinado a socorrer a madres y niños afectados.
“Hoy, el contenedor de Unicef, que contenía suministros cruciales para la salud materna, neonatal e infantil, fue saqueado en el puerto principal de Puerto Príncipe”, publicó el sábado en X la cuenta haitiana de la agencia.
“Este incidente ocurrió en un momento crítico, cuando los niños más los necesitaban”.
Mientras la vida se hace más difícil para haitianos y extranjeros, un portavoz del Departamento de Estado de EE.UU. dijo el domingo que un vuelo fletado con más de 30 ciudadanos estadounidenses a bordo había aterrizado en Florida después de salir de Cabo Haitiano a primera hora del día.
“Seguiremos prestando asistencia a los ciudadanos estadounidenses mientras no haya opciones comerciales disponibles y el entorno de seguridad nos lo permita”, declaró el portavoz.
El personal no esencial de la embajada estadounidense fue evacuado la semana pasada.
Mientras tanto, prosiguen los esfuerzos para organizar una misión de seguridad dirigida por Kenia que respalde a las desbordadas fuerzas policiales de la isla caribeña.