(Desde Montevideo, Uruguay) - Durante la pandemia de covid-19, el gobierno de Luis Lacalle Pou decidió impulsar la creación de un Grupo Asesor Científico Honorario (GACH). El médico y científico Rafael Radi fue el coordinador de ese equipo que elaboró varios informes técnicos durante la emergencia sanitaria. Radi fue una voz que llevó calma a la población en conferencias de prensa en la Casa de Gobierno y también fue crítico de algunas decisiones, cuando la información sugería que las políticas debían ser más restrictivas.
El científico reapareció públicamente esta semana luego de ser nombrado por el papa Francisco, junto a otros cinco profesionales, como miembro de la Academia Pontificia de Ciencias del Vaticano, según informó la Universidad de la República de Uruguay (Udelar).
Radi es además el presidente de la Academia Nacional de Ciencias del Uruguay y es el director del Centro de Investigaciones Biomédicas de la Udelar. Fue el primer uruguayo nombrado por la National Academy of Sciences de Estados Unidos como científico extranjero asociado a la organización, un lugar que ocupa desde 2015 junto a otros 20 científicos que dirigen grupos de investigación fuera de ese país.
Además del uruguayo, también fueron nombrados como miembros ordinarios dos astrofísicos, un matemático, un experto en neurociencias e informática (que trabaja en inteligencia artificial en Google) y un químico experto en Ciencias Ambientales.
La Pontificia Academia de las Ciencias cuenta, por estatutos, con 80 académicos nombrados por el papa, de cualquier país y religión, que son elegidos entre los “más eminentes científicos de ciencias naturales, matemáticas y experimentales”, dice el comunicado de Udelar. Luego se organizan en grupos para publicar artículos científicos y análisis.
La Udelar destaca que esta academia está posicionada de forma “independiente al poder religioso” y “no condiciona ni discrimina entre sus integrantes por consideraciones religiosas, étnicas o políticas”. La integración de este selecto grupo se fundamenta en el “reconocimiento a los aportes científicos sobresalientes de impacto mundial y atributos personales notables”.
La academia fue fundada en 1603 con el nombre “Academia de los Linces” y fue la primera academia exclusivamente científica del mundo. El líder en los primeros años fue el científico Galileo Galilei.
“Estoy conmovido por la designación y también por la reacción que hubo de múltiples personas e instituciones que me conocen e hicieron llegar su saludo. La Academia Pontificia tiene una historia muy rica de más de cuatro siglos. Fue liderada nada más ni nada menos que por Galileo Galilei. Solamente esa conexión, para quienes hacemos ciencia, es muy significativa”, destacó Radi, entrevistado en el programa En Perspectiva.
El científico uruguayo comentó que las reuniones en la academia se producen cada dos años y recordó que estuvo invitado a los eventos en 2017 y 2022, instancias que fueron “muy ricas”. Radi destacó que esta designación también es relevante para la Udelar, que quedó en la misma lista de seis instituciones: la Universidad de Estocolmo, California, Cambridge, del Cabo y Google.
Para aceptar la designación, Radi recibió los estatutos de la Academia Pontificia y hubo dos artículos que fueron claves en su decisión. “Es una academia exclusivamente dedicada a la promoción de la ciencia en su más amplia acepción. Y, en segundo lugar, esta academia elige a sus miembros por sus condiciones en términos de su producción científica, sus características personales y que no discrimina por sesgos religiosos, étnicos e ideológicos”, dijo y comentó que él se define como agnóstico.
Radi también evaluó que son los científicos los que ponen los temas en la agenda en esa academia.
A mediados del siglo 20, el decano de la Facultad de Medicina Julio García Otero, había sido parte de la academia. Radi es, por tanto, el segundo uruguayo en integrarla.