(Desde Montevideo, Uruguay) - Los meses de diciembre y enero tuvieron en Uruguay una ausencia que terminó incidiendo en el número total de ingresos de turistas extranjeros a las playas del país. La caída del número de viajes desde Argentina –algo que era esperado por las autoridades del gobierno y el sector privado– significó que los arribos desde exterior sean un 6% menos en comparación a la temporada 2023.
A esa conclusión llegó un estudio del Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social (Ceres), que se basó en los datos de la Dirección Nacional de Migración del Ministerio del Interior.
El informe destaca que en 2023 volvieron a ingresar más de 3 millones de extranjeros a Uruguay (sin considerar a los uruguayos residentes, a quienes el Ministerio de Turismo suma como visitantes en sus estadísticas). Esta cifra muestra que se superaron los niveles de 2019, pero fue un 20% menor que los ingresos que hubo en 2017, la mejor temporada de la historia de Uruguay.
Si solo se consideran los datos de diciembre de 2023 y enero de 2024, el número de ingresos muestra que llegaron unas 49 mil personas menos que en el mismo período del año anterior (un 6% menos). Si estos valores se comparan con el año récord, en tanto, la caída fue de un 32%.
La baja interanual se explica por los arribos de 67 mil argentinos menos que en el período diciembre 2022-enero 2023. Esta disminución fue “contenida” –sostiene Ceres– por el crecimiento en la llegada de brasileños (fueron 22 mil más), de chilenos (2.000 más) y de paraguayos (1.800 más).
El análisis de Ceres también revela que el sector turístico atraviesa “desafíos significativos” para alcanzar los niveles de rentabilidad previos a la pandemia ya que el gasto de los turistas apenas supera la mitad de lo registrado en 2017.
La forma más precisa de analizar este factor es considerando los ingresos en términos reales (en pesos constantes), ya que los costos son en esta moneda y se ajustan por la inflación.
El nivel del dólar actual (la divisa estadounidense cotiza en torno a 39 pesos uruguayos) lleva a que los ingresos de los operadores turísticos “estén lejos de recuperarse con respecto a la prepandemia”, concluye el informe económico. Son apenas “algo más de la mitad” de lo facturado en 2017, lo que “afecta la rentabilidad” de las empresas.
Medido en dólares, el gasto de los turistas en 2023 fue un 4% menor en comparación a 2019 y un 31% inferior respecto a 2017. Pero si se analiza esta cifra en términos reales, el ingreso de divisas disminuye un 21% y 41%, respectivamente.
Los bajos niveles de gasto están justificados por un menor consumo por turista: en 2023 fue un 9% inferior en dólares respecto a 2019 y estuvo un 18% por debajo en términos reales.
“Si bien el número de visitantes supera la prepandemia, el desafío radica también en incentivar un gasto mayor por persona”, sugiere Ceres como conclusión de Monitor de Actividad Turística.
El centro de estudios desagrega el ingreso de los uruguayos no residentes que llegan al país. En 2023, el gasto de estos turistas creció con respecto a los años que el análisis toma como referencia, a diferencia de lo que sucede con otros extranjeros no residentes.
El gasto de este segmento fue un 14% superior comparado a 2022; un 21% mayor respecto a 2019; y un 70% sobre 2017.
El gasto per cápita de los uruguayos no residentes en Uruguay es un 46% menor al promedio de los extranjeros no residentes. Sin embargo, en 2023 ingresaron USD 252 millones por gasto de uruguayos no residentes, lo que representó un 14% del total de los ingresos por el turismo receptivo.