Los peritajes para esclarecer las circunstancias del accidente en el que murió el ex presidente de Chile Sebastián Piñera se encargaron a la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) que, en coordinación con efectivos de Bomberos, de la Armada y de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), llevan adelante las tareas correspondientes.
En la mañana del miércoles, la fiscal regional de Los Ríos, Tatiana Esquivel, confirmó que la causa de muerte del ex mandatario fue “asfixia por sumersión”.
“Este dato forense nos permite ir elaborando una hipótesis más probable de cómo habría sido la dinámica de este accidente aéreo”, explicó.
De momento no se ofrecerán más detalles, por lo que no parece que se puedan esclarecer las dos principales hipótesis que se barajan: un problema técnico por las malas condiciones climáticas en la zona o algún inconveniente físico del ex mandatario, que le hubiese hecho perder el control y no poder quitarse el cinturón de seguridad.
Sin embargo, el comisario de la Brigada de Homicidios de Valdivia, Fernando Bustamante, brindó más datos y dijo que, a través de buzos tácticos, se realizan los primeros trabajos. “Se hace junto al Departamento de Operaciones Subacuáticas de la PDI. Ellos cuentan con todos los elementos tecnológicos para hacer la búsqueda en el agua”, indicó, según consignó el periódico local La Tercera.
De acuerdo a conocedores de dichas tareas, este miércoles fueron cuatro buzos tácticos de la Policía civil los que fijaron la aeronave, poniendo especial énfasis en los indicadores del panel de control al momento del accidente. Al mismo tiempo, evaluaron las condiciones en las que estaban los cinturones, las radios, y los demás elementos del interior y exterior del aparato.
Según pudo saber La Tercera, los trabajos se dividen en dos fases. En la primera, se encargó a los buzos de la PDI tomar fotografías y videos del sistema de control del helicóptero. La tecnología con la que cuentan posibilitó que los investigadores vieran en vivo lo que peritaron los efectivos bajo el agua.
Cuatro buzos tácticos, con tecnología de punta y los únicos en América Latina con certificación criminalística en la materia para realizar peritajes subacuáticos, hicieron los primeros trabajos al helicóptero siniestrado, detalló el medio citado.
Por su parte, la segunda fase corresponderá al reflote de la aeronave y diligencias que se realizarán en tierra por parte de profesionales de la Dirección General de Aeronáutica Civil. La aeronave aún se encuentra a 28 metros de profundidad y eso dificulta mucho las labores.
Al respecto, la fiscal Esquivel agregó: “Los equipos periciales especializados se encuentran trabajado. En esta primera etapa están trabajando en el sitio del suceso de manera submarina. Están revisando el perímetro de la aeronave para ver si existe evidencia de interés. Una vez que eso concluya, vamos a realizar las maniobras de reflotamiento de la aeronave para que sea periciada en seco por la DGAC”.
El accidente
El helicóptero que piloteaba el ex presidente de Chile Sebastián Piñera cayó el martes a los pocos minutos de despegar, sobre las aguas del Lago Ranco, con cuatro personas a bordo pero el único que perdió la vida fue el ex mandatario.
Piñera, de 74 años, había acudido a un almuerzo en la casa del empresario José Cox y piloteaba el helicóptero, que despegó cerca de las 15:30, hora local. Junto a él viajaban su hermana Magdalena, su amigo Ignacio Guerrero y el hijo de este último.
La Dirección General de Aeronáutica Civil de Chile informó que, tras apenas “unos minutos de vuelo”, el helicóptero —un Robinson R44, matrícula CC-PHP— se desplomó. De la aeronave lograron salir los tres pasajeros, quienes pudieron llegar por sus propios medios hasta la orilla.
Los tres supervivientes fueron trasladados a un centro médico pero el cuerpo de Piñera se hundió junto al helicóptero. Los buzos de los bomberos lograron recuperar el cadáver y el mismo fue trasladado hasta el Servicio Médico Legal de Valdivia para realizar la autopsia.
La Armada chilena indicó que las condiciones meteorológicas no eran especialmente buenas porque había chubascos en la zona, pero no concluyó que el siniestro haya sido causado por el mal tiempo.
Las características del helicóptero y la palabra de su instructor
El Robinson R44 de Piñera, propiedad del ex mandatario desde 2006, tenía una capacidad para cuatro personas (el piloto y tres pasajeros), una carga de poco más de 400 kilogramos, una longitud de 8,96 metros y el diámetro del rotor principal de 10 metros.
En altura, pasaba los tres metros; tenía un peso vacío de casi 658 kg y contaba con una velocidad crucero de 200 km/h. Su alcance era de 560 kilómetros y el techo de vuelo de 4.300 metros.
Sebastián Díaz, piloto e instructor de vuelo, contó a El Mercurio que tuvo “el honor de hacerle instrucción” a Piñera. “Pude hacerle varios chequeos al Presidente. De hecho, él me pedía constantemente que le hiciera chequeos, y si yo consideraba que un ejercicio está saliendo mal, se repite el ejercicio, se vuelve a hacer, se repasan los conceptos, se conversan los temas y se vuelven a ejecutar”, recordó.
Luego indicó que el ex presidente era “súper obediente, súper estudioso, súper preocupado y consciente de sus debilidades. Me pedía constantemente que lo acompañara y me pedía consejos respecto de su vuelo”, agregó.
Por último, manifestó: “Cuando él dejaba de volar por temas laborales, tenía la preocupación de hablar con un piloto, y yo tuve muchas oportunidades de volar con él para que le hiciéramos un chequeo. En ese sentido, él tenía su licencia al día y tenía lo que se llama una estandarización, que es un vuelo que se hace cada dos años, vigente”.