La policía de Ecuador anunció el jueves la detención en Guayaquil del narcotraficante colombiano Henry Loaiza Montoya, conocido como “Alacrán”. Loaiza, requerido por la justicia estadounidense y considerado uno de los criminales más buscados en Colombia, es señalado como el heredero de un antiguo líder del Cartel de Cali en el país vecino. En una operación policial y militar en el puente de Rumichaca, frontera entre Ecuador y Colombia, Loaiza Montoya fue deportado a Colombia con chaleco y casco antibalas. Las autoridades colombianas indicaron que lo más probable es que sea extraditado a Estados Unidos, siguiendo el destino de otros narcotraficantes.
Identificado como un “objetivo de alto valor” por las autoridades ecuatorianas, Loaiza Montoya ostentaba el título de “líder actual del Cartel del Norte del Valle” y mantenía conexiones con grupos armados como Oliver Sinisterra en Colombia y Los Tiguerones en Ecuador, este último activo en las regiones de Manabí y Esmeraldas, según una explicación de una fuente policial confirmada a los medios.
La captura de Loaiza provocó la reacción del presidente colombiano, Gustavo Petro, quien confirmó a través de X (antes Twitter) que el capo fue aprehendido gracias a la colaboración entre las fuerzas policiales de Ecuador y Colombia.
El comandante de la policía ecuatoriana, César Zapata, ratificó que la operación contó con la coordinación de la Administración de Control de Drogas (DEA), la agencia estadounidense especializada en la lucha contra el narcotráfico.
Según informó la policía ecuatoriana en un comunicado a los periodistas, el detenido es hijo de Henry Loaiza Ceballos, ex miembro del Cartel de Cali, quien fue arrestado en 1995, 2019 y 2023. En la última detención del padre, la Fiscalía colombiana lo acusó de concierto para delinquir y extorsión agravada, con mayor incidencia en los territorios colombianos de Putumayo, Cundinamarca y el Valle del Cauca.
La captura de Loaiza Montoya en Ecuador se produce en medio de un “conflicto armado interno” declarado por el presidente Daniel Noboa el 9 de enero, debido a un aumento de la criminalidad vinculada a al menos 22 bandas catalogadas como “terroristas”.
Noboa admitió que Ecuador sirve como centro logístico para bandas de narcotráfico aliadas con grandes organizaciones transnacionales, aprovechando condiciones como puertos estratégicos y el uso del dólar estadounidense como moneda local.
El país andino ha enfrentado un incremento en la violencia y la criminalidad, cerrando el año 2023 con el decomiso de 211 toneladas de droga, superando las 201 toneladas de 2022. Ecuador se encuentra ubicado entre los dos principales productores de droga, Perú y Colombia.
Loaiza Montoya, también conocido como “Junior” por heredar el negocio de cocaína de su padre, residía en Guayaquil desde su ingreso al país, aunque la fecha exacta no se conoce. La Policía Nacional detalló en una rueda de prensa que el narcotraficante colombiano dirigía sus operaciones desde Esmeraldas y Manabí.
En cuanto a las actividades de “El Alacrán” en Ecuador, la Policía informó que era buscado por Colombia desde 2018, liderando el Cartel del Valle del Cauca y enfrentando cargos por tráfico de drogas. Se estima que enviaba alrededor de 5 toneladas métricas de cocaína anualmente desde Ecuador, con un valor de USD 2.000 millones, utilizando lanchas rápidas y semisumergibles en colaboración con carteles mexicanos.
“El Alacrán” adquiría la cocaína del grupo rebelde Oliver Sinisterra, vinculado a Ecuador y responsable de actos terroristas. En Ecuador, el narcotraficante colombiano era aliado de Los Tiguerones, una banda narcoterrorista que le proporcionaba apoyo y logística para el transporte de drogas. Debido al tráfico de drogas hacia Estados Unidos, este país emitió una orden de extradición contra Loaiza Montoya en octubre de 2023, y en noviembre del mismo año, Interpol emitió una alerta roja para buscarlo en 196 países.