El ex presidente brasileño Jair Bolsonaro usó una cartilla de vacunación falsa contra el COVID-19, según confirmó este jueves la Contraloría General de la Unión (CGU), que no pudo determinar quién fue el autor de la falsificación.
La CGU, órgano del Gobierno Federal encargado de proteger el patrimonio público, la transparencia y el combate a la corrupción, detectó “inconsistencias” en el certificado de vacunación de Bolsonaro, que mostraba una fecha y un lugar que no coincidían con su agenda.
“Por lo tanto, respecto a la vacunación que se habría realizado en Sao Paulo -el único registro que aún queda en la cartilla de vacunación del exjefe del Ejecutivo- (...) la conclusión fue que se trataba de un fraude contra el sistema estatal de registro de vacunación anti Covid-19″, afirmó la Contraloría en un comunicado.
No obstante, recomendó archivar el caso “por falta de elementos mínimos acerca de la autoría de los hechos”, tras constatar que muchos funcionarios y personal sanitario tenían acceso al sistema informático de vacunación y podían modificar datos.
De acuerdo con la CGU, el registro de vacunación de Bolsonaro, fechado en julio de 2019 en Sao Paulo, no se realizó a través del sistema oficial de la agencia federal de salud. Tampoco se encontró evidencia de la participación de ningún servidor público federal en el fraude.
La CGU también comprobó que la vacuna que supuestamente recibió Bolsonaro no estaba disponible en la zona donde se registró la dosis, y que la enfermera que figuraba en el carné de vacunación negó haberle vacunado y afirmó que no trabajaba en el centro de salud indicado.
Asimismo, los empleados del centro de salud entrevistados por la CGU dijeron no haber visto a Bolsonaro el día que se vacunó, según su cartilla, ni haber recibido ninguna solicitud para registrar su inmunización.
La falsificación de la cartilla de vacunación, que Bolsonaro siempre ha negado tener, le permitió viajar a Estados Unidos, donde se investiga si también se beneficiaron de este fraude otros familiares y asesores del ex presidente.
Entre los detenidos por la Policía Federal en mayo de 2023 por este caso se encuentra el ex asesor de Bolsonaro, el teniente coronel Mauro Cid Barbosa, cuya conexión con el plan fue confirmada por la CGU. Meses después fue puesto en libertad tras un acuerdo de delación premiada.
El ex presidente brasileño declaró ante la Policía Federal en Brasilia en mayo pasado por este caso. Su casa fue allanada en el marco de las pesquisas.
En esa declaración, Bolsonaro, de 68 años, negó los señalamientos y acusó a las autoridades de intentar “fabricar un caso” en su contra.
El objetivo habría sido burlar las restricciones sanitarias impuestas por Estados Unidos, a donde Bolsonaro viajó con una comitiva de familiares y asesores dos días antes de terminar su mandato en diciembre de 2022, y donde permaneció por tres meses.
Durante la pandemia de coronavirus, que dejó más de 700.000 muertos en Brasil bajo la presidencia de Bolsonaro (2019-2022), el ultraderechista cuestionó reiteradas veces la eficacia y conveniencia de las vacunas. Posteriormente reconoció que no se inmunizó.
(Con información de Europa Press y AFP)