(Desde Montevideo, Uruguay) - Un contenedor que llegó al Puerto de Amberes, en Bélgica, con budines y alfajores y que había pasado por el de Montevideo llevaba dos toneladas de cocaína. La incautación fue informada por la Aduana de Bélgica, que en un operativo incautó en total 3.400 kilos de la sustancia blanca, en cargamentos que llegaron desde la capital uruguaya y desde Guayaquil.
Las incautaciones se dieron en los últimos días del 2023. El viernes 22 al puerto de Bélgica llegó el barco desde la ciudad de Ecuador, con 1,24 toneladas de la droga. Una semana después, el 28 de diciembre, los funcionarios de la terminal portuaria encontraron que otro barco tenía 2,16 toneladas.
Las imágenes difundidas por la Aduana belga muestran que la droga estaba camuflada en esos alimentos, una modalidad utilizada de forma frecuente por los narcotraficantes para hacer pasar las sustancias. En este caso estaban debajo de budines y alfajores de la marca Portezuelo.
La investigación es aún muy primaria y se están comenzando a recabar las primeras informaciones, por lo que todavía no hay ningún funcionario que esté siendo investigado, informó El País. También se desconoce si el destino final de la mercadería era Bélgica, aunque una de las hipótesis es que buscaban su distribución hacia otros países de la región.
El contenedor en el que viajaba la droga fue escaneado en el puerto de Montevideo en noviembre y los funcionarios aseguran que no supieron que se trataba de un cargamento de cocaína. “El protocolo se cumplió”, declaró al diario uruguayo el presidente del sindicato de funcionarios aduaneros, Roberto Valdivieso. Aunque admitió: “Con el escáner que se sigue usando es imposible darse cuenta de lo que hay adentro”.
Según este funcionario, en el puerto uruguayo es necesaria “más tecnología y personal para aumentar la efectividad de los controles”.
El funcionario dijo que ve “buenas intenciones” por parte de las autoridades y destacó que hace pocos meses haya sido anunciada la compra de tres nuevos escáneres que aumentarán la capacidad de controles de contenedores.
En el gobierno uruguayo creen que estas nuevas adquisiciones llevarán a que la tasa de revisión de los contenedores ronde el 75% y así se aumente considerablemente el porcentaje actual, que es “demasiado bajo”. Sin embargo, faltan algunos meses para que estos artefactos queden operativos.
La Policía Judicial de Amberes, en tanto, inició una investigación “a gran escala” sobre el tráfico de drogas, algo que fue replicado en Uruguay, según informó La Diaria.
No es la primera vez que se incauta droga en Europa en un barco que tuvo su paso por el puerto de Montevideo. En julio, en el puerto de Hamburgo (Alemania), fueron encontradas 10 toneladas de cocaína escondidas en contenedores que salieron del puerto de Paraguay y pasaron por Montevideo.
En este caso, los contenedores de cocaína partieron de Paraguay a mediados de mayo en barcazas que supuestamente transportaban sésamo. Los contenedores llegaron a Uruguay a mediados de mes y estuvieron en la terminal hasta el 2 de junio. Después, pasaron por seis puertos brasileños, uno africano y dos europeos, antes de llegar al destino final.
Tras esta incautación, Uruguay y Paraguay acordaron compartir las imágenes de los escáneres para aumentar los controles. Inicialmente, el entonces ministro del Interior, Luis Alberto Heber, anunció que los tres nuevos escáneres iban a estar en funcionamiento antes de fin de año, un plazo que finalmente no se cumplió.
El director de la Aduana uruguaya, Jaime Borgiani, dijo que con esta compra se aumentará la capacidad de escaneo hasta el 75% del movimiento de los contenedores que hay en el puerto.
Uruguay, destacó, ha incautado “cifras récord” de toneladas de cocaína que estaban en tránsito en el puerto de Montevideo. La Aduana ha modificado los procedimientos de exportaciones e importaciones, tránsitos y transbordos en Uruguay.