El presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo de León, presentó este lunes a su gabinete de Gobierno, compuesto por siete hombres y siete mujeres, para iniciar a partir del próximo 14 de enero tras su investidura.
“Hemos elegido personas capacitadas y valientes que asumen este compromiso con la nación en medio de esta crisis política”, indicó Arévalo de León durante la presentación de su equipo de Gobierno en la capital guatemalteca.
El equipo de Arévalo de León está conformado por 14 funcionarios, entre los que destacan académicos, periodistas y otros que ya han laborado como ministros en el pasado.
Esta es la primera vez que existe un gabinete en Guatemala con paridad de género y Arévalo de León aseguró que buscarán integrar más personas de distintas culturas durante su mandato.
Para la Cancillería de Guatemala, el presidente electo nombró al experimentado diplomático Carlos Martínez para asumir este cargo a partir del próximo domingo.
Mientras que en otras carteras importantes como Salud fue asignado Oscar Cordón Cruz y Jonathan Menkos al frente de Finanzas.
“Recuperar las instituciones debilitadas por la corrupción” será el mayor reto del nuevo gabinete según el mandatario.
El presidente electo reconoció que quedó “en deuda con la pluralidad” del país, en alusión a que solo una indígena integra su equipo, Miriam Roquel (Trabajo). Las comunidades indígenas representan el 42% de los 17,6 millones de guatemaltecos.
Asimismo, anunció este lunes que creará una Comisión Nacional contra la Corrupción, que será un órgano asesor y vigilante, pero sin dar mayores detalles.
Arévalo aseguró que el domingo asumirá la presidencia pese a que el Ministerio Público (Fiscalía) ha llevado a cabo una ofensiva contra él y su partido Semilla, acusándolos de supuestas ilegalidades electorales.
“Desde el punto de vista legal, no hay ninguna posibilidad (de evitar que asuma). Por supuesto, siempre van a seguir haciendo intentos y van a seguir queriendo hacer, por medio de interpretaciones antojadizas, el juego de último minuto”, afirmó.
Durante el evento, Arévalo de León fue cuestionado por el nombramiento de Jazmín De la Vega como ministra de comunicaciones por sus vínculos con la Cámara Guatemalteca de la Construcción y las élites económicas del país.
El presidente electo aseguró que no recibió ningún tipo de presión para el nombramiento de los funcionarios presentados este día.
En diciembre, la Corte de Constitucionalidad (CC) ordenó garantizar “la toma de posesión” de todos los funcionarios electos, mientras que el Tribunal Supremo Electoral declaró los resultados de los comicios como “inalterables y definitivos”.
La fiscalía emprendió su ofensiva legal contra Arévalo desde que en las elecciones de junio pasó a la segunda vuelta presidencial. El ahora mandatario electo denunció entonces un intento de “golpe de Estado” ante su promesa de combatir la corrupción.
Entre esas acciones, la fiscalía trató de que Arévalo, quien sustituirá al derechista Alejandro Giammattei, fuera despojado de su inmunidad.
(Con información de EFE y AFP)