Aarón Lindao Basurto, de nacionalidad ecuatoriana, intentó abordar La Bestia, también conocido como El tren de la muerte. Ese transporte es utilizado por miles de migrantes que pretenden llegar a los Estados Unidos cruzando México. El ecuatoriano perdió un brazo y murió el pasado 25 de noviembre, pero su identidad recién fue revelada por las autoridades mexicanas esta semana luego de la necropsia legal correspondiente.
Como otros miles de ecuatorianos, Lindao Basurto emprendió un trayecto riesgoso en busca de nuevas oportunidades. Según se ha informado, al tratar de subir a La Bestia, perdió el equilibrio y cayó. Una de las ruedas del ferrocarril lo golpeó y le cercenó el brazo. La herida fue tan grave que poco después murió. Su cuerpo fue encontrado entre las rieles del tren.
Junto al cadáver del ecuatoriano, los agentes mexicanos encontraron una bolsa con sus pertenencias, fue así como lograron identificarlo.
Este es el segundo caso conocido de un ecuatoriano que sufre graves heridas en La Bestia. En marzo de este año, un hombre perdió su pie mientras trataba de abordar el tren.
Según se ha conocido, los funcionarios consulares ecuatoriano en México han empezado a realizar los trámites para repatriar el cuerpo de Lindao Basurto y entregárselo a sus familiares.
Miles de ecuatorianos migran a diario
El último reporte de la organización Human Rights Watch (HRW) mostró lo riesgoso que es el tránsito por el Tapón del Darién, la selva pantanosa entre Colombia y Panamá que se ha convertido en un paso obligatorio para los migrantes de Sudamérica que buscan llegar a los Estados Unidos. Desde 2022, más de 80.000 ecuatorianos han cruzado esta selva y están entre las tres principales nacionalidades que recorren ese trayecto junto a los venezolanos y haitianos.
Según informó la ONG, las restricciones impuestas por México y otros países de Sudamérica, promovidas por los Estados Unidos, “han contribuido a aumentar el número de personas que cruzan el Tapón del Darién, lo cual los expone a abusos, incluyendo violencia sexual, y fortalece el crimen organizado”.
De acuerdo con HRW, más de 440.000 venezolanos han cruzado el Tapón del Darién desde enero de 2022. Los venezolanos son quienes más han cruzado en relación con otras nacionalidades. En su caso, dice HRW, “huyen de una grave emergencia humanitaria, que ha limitado el acceso a alimento y medicinas, y de abusos y la persecución por parte de las fuerzas de seguridad, grupos armados y pandillas”. Además de ello, un gran número de ecuatorianos y haitianos también ha cruzado el Tapón del Darién: “Muchos de los más de 80.000 ecuatorianos que han cruzado el Tapón desde enero de 2022 escapan del aumento de la violencia en el país, marcada por tasas de homicidio y extorsión sin precedentes”, se explica en el informe de la ONG.
Los migrantes que cruzan por el Darién aseguran que el viaje irregular es su única opción, pues obtener la visa estadounidense es difícil. Un carpintero ecuatoriano de 48 años, que habló con HRW bajo el seudónimo de Javier Prieto, contó su travesía por la selva del Darién junto a su hija de 25 años y su nieto de 7. El hombre tomó la decisión de migrar luego de que, en noviembre de 2022, unos delincuentes asesinaran a su hermano para robarle el teléfono. Aunque la Policía los detuvo, Javier luego fue amenazado. En su trayecto por el Darién, Javier llevó a su nieto en los hombros cuando debían cruzar los ríos: “Es triste dejar a la familia y ver tanto muerto en la selva. Había muchos cuerpos”, dijo a la ONG. También admitió que “es difícil obtener visa en Estados Unidos, a los ecuatorianos no nos dan”.