Diego Echeverría lanzó su precandidatura a la Intendencia de Maldonado, el tercer departamento en importancia de Uruguay y el primero en crecimiento poblacional, según el último censo. Este abogado, diputado nacional y ex secretario general del Gobierno del actual intendente Enrique Antía, cuenta con una Maestría en España y ha sido docente universitario en varias instituciones uruguayas.
En diálogo con Infobae, narró qué lo motivó a postularse al cargo, repasó los logros de la actual gestión, los desafíos por delante y contó qué expectativas tiene respecto al cambio de gobierno en Argentina.
“El objetivo es seguir avanzando en el desarrollo de un departamento que no para de crecer”, expresó.
— ¿Qué lo motivó a postularse como precandidato a la Intendencia de Maldonado?
— La primera motivación es continuar las transformaciones que se vienen dando en Maldonado desde el 2015. Es un sentido de responsabilidad de entender que los cambios y el avance de Maldonado no puede parar. Es un compromiso para con Maldonado y su gente pero también con las próximas generaciones de gente que ha elegido este lugar para vivir, para desarrollarse y para crecer. Y eso nos da unas ganas bárbaras de seguir dando lo mejor de nosotros para que Maldonado siga siendo un polo de desarrollo del país.
— ¿Cuáles son sus objetivos principales en una eventual gestión? ¿Qué cosas se hicieron bien hasta aquí y en cuáles piensa que se debería trabajar más?
— Los objetivos, eventualmente si la gente me elige intendente de Maldonado, es seguir avanzando en el desarrollo de un departamento que no para de crecer. En un Uruguay con una tasa de crecimiento muy baja, Maldonado es la excepción con un crecimiento de un 10% de su población desde el 2015. Y ese crecimiento hay que acompañarlo con infraestructura, con obras, con desarrollo, con servicios de calidad para todos. Porque Maldonado tiene un gran potencial de recibir gente e inversión, pero también vecinos de Maldonado que necesitan el apoyo del Estado, porque la visión social de Maldonado también ha sido siempre muy profunda.
Entonces, esa es también la característica y la complejidad de este departamento, compatibilizar el gran desarrollo económico con las necesidades sociales que existen como en cualquier lugar. Encararlo con desafíos de responsabilidad, de innovación, de tecnología, con una planificación urbanística que vaya de la mano de una visión social, cultural, de infraestructura y de obra pública.
El gran desafío es acompañar el crecimiento de Maldonado con obra pública de calidad para que todos vivan en un departamento que los incluya.
— Muchísimos argentinos visitan Maldonado y puntualmente Punta del Este. ¿Qué expectativas tiene con el cambio de gobierno en el país vecino?
— Creo que Argentina es un gran país y esperamos que con el próximo gobierno se abra al mundo. Es un país maravilloso, que tiene todo para dar. Es un país que tiene un capital humano enorme, un capital natural enorme y espero que la visión del próximo gobierno sea de apertura al mundo con una visión de integración real.
Tenemos coincidencias con la visión internacional del próximo gobierno, así que ojalá nos encuentre trabajando juntos por un Mercosur realmente integrado desde el punto de vista comercial y que no sea un club de amigos desde el punto de vista ideológico.
— Lo escuché decir que la “unidad para los blancos (el Partido Nacional) es un faro” y que “los distintos sectores tienen un excelente vínculo”. ¿Cree que esto es fundamental para hacer una buena gestión?
— La unidad es un faro de todo gobierno. Solamente un partido unido puede cosechar la fortaleza que da la unidad y construir un partido digno de ser gobierno. La unión nos dará fuerza y estamos convencidos de que si todos, desde nuestra diversidad, desde nuestra pluralidad, aportamos nuestro mejor esfuerzo a la construcción de un Maldonado mejor, vamos a tener ese Maldonado de las oportunidades que soñamos y que siempre hemos querido.
— En el acto de presentación de su precandidatura dijo que Maldonado está teniendo desde 2015 una revolución impresionante, de transformaciones, de obras, de infraestructura. ¿El camino es seguir por la misma vía?
— Sí, el camino es seguir la vía del crecimiento y del desarrollo. Ese es el primer objetivo cuando uno viene con la vara alta en materia de gestión. Es continuar una gran gestión. Por eso entendemos que hay que continuar los cambios y seguir adaptándonos en un departamento que no para de crecer.
Un repaso por los últimos años de Maldonado
Hablar del Maldonado de hoy es ver cómo la construcción creció. El gobierno de Antía aprobó 3,5 millones de metros cuadrados en construcción, de los cuales 2,5 millones están con obra finalizada. Eso permitió cumplir su eslogan de campaña cuando planteó retornar y que plasmó en una frase: “Vuelve Antía, vuelve el trabajo”.
Caminar por las calles de Punta del Este permiten respirar espacios públicos que fueron recuperados, enjardinados, limpieza, bajadas a la playa con pasarelas nuevas, entre otros. Pero también ese destino es sinónimo de seguridad, y allí también está la mano de Antía con el Centro de Videovigilancia que hoy cuenta con 1.500 cámaras y que, sin ser obligación del gobierno departamental, sino del nacional, desvelaba al intendente que invirtió más de 25 millones de dólares para hacerlo posible.
Antes, el asentamiento en la zona de El Placer, que tenía 205 familias viviendo al costado del arroyo Maldonado era una postal que no hablaba bien de políticas sociales. Pero el gobierno de Antía logró realojar a las familias en viviendas dignas y recuperar un espacio público que hoy es disfrutado por todos y donde en verano se realizan eventos musicales gratuitos.
Informa el actual gobierno que hoy está en marcha el realojo de 530 familias del asentamiento más antiguo, el Kennedy, liberando una zona para Punta del Este y trasladando a su población a un barrio con todos los servicios y donde la inclusión social es el modelo. “En todo esto estuvo y está la mano de Antía, y de ese gobierno ha sido parte Diego Echeverría”, destacan.
Desde sus 18 años acompaña al intendente. Cara visible de la juventud, Echeverría lidera un sector donde la mayoría de los legisladores departamentales no superan los 30 años y logró volver a traer a la política a cientos de jóvenes que descreían de ella.
Con 34 años asumió como Secretario General, que en Argentina equivale a ser jefe de Gabinete. Antía apostó por él debido a que juntos transformaron Maldonado en pocos años.