(Desde Santiago, Chile) Dos hermanos de nacionalidad mexicana, miembros del Cartel de Sinaloa, fueron condenados este lunes por el Tribunal Oral en lo Penal de Iquique (1.800 kms al norte de Santiago), como autores de los delitos de tráfico ilícito de estupefacientes y asociación ilícita para el tráfico de drogas, según consigna un reportaje de radio Cooperativa.
La captura de los criminales se logró gracias a antecedentes entregados por la DEA de EEUU, que confirmaron que los hermanos - un hombre y una mujer -, pertenecían al Cartel de Sinaloa y que tenían “la intención de establecer un estructura en nuestro país, con el objeto de abrir una ‘línea de salida’” de cocaína importada desde Bolivia, las que se acopiarán en la comuna de Alto Hospicio para finalmente, “haciendo uso de las plataformas portuarias y aeroportuarias, lograr su envío hasta diversos puertos y aeropuertos de Europa”.
Todo partió el 4 de septiembre de 2020, cuando el sujeto identificado con las iniciales R.S.T. cruzó a Chile a través del sector fronterizo de Colchane, y comenzó a reclutar a una serie de personas para que cumpliera las funciones que la organización necesitaba para lograr sus objetivos.
Esto implicaba adquirir la cocaína que posteriormente sería remesada a Chile para su posterior acopio. Además debían hacer reservas hoteleras, conocer la situación portuaria y aeroportuaria de nuestro país, recibir remesas de dinero desde el extranjero, recibir las remesas de drogas enviadas desde Bolivia, acopiarlas y trasladarla cuando RST lo dispusiera, detalla la nota.
Así conociendo ya la línea, capacidad logística y operativa con la cual contaban los sujetos reclutados, informó a los líderes de esta célula del Cartel de Sinaloa en el extranjero y financistas que efectivamente nuestro país y las personas contactadas y reclutadas, reunían las condiciones y capacidades requeridas para las operaciones que pretende realizar la organización.
El objeto inicial de la organización operada en Chile por R.S.T. era internar desde Bolivia, para su posterior acopio en la comuna de Alto Hospicio, 6.000 kg de clorhidrato de cocaína, que luego sería enviada en seis remesas en distintos contenedores cargados con productos agropecuarios de exportación a diversos puertos europeos y, al mismo tiempo, traer a Chile diez millones de dólares para operar toda la logística necesaria.
Los jefes
Las operaciones que R.S.T. debía ejecutar en Chile le eran instruidas por su sobrino, miembro activo del cartel de Sinaloa, identificado como Morris O’Shea, ciudadano irlandés-mexicano, quien reside habitualmente en Barcelona, España.
Todas estas operaciones fueron financiadas por quien fue identificado como Patrick Joseph Daly, ciudadano británico, quien actuaba además bajo una identidad falsa, que corresponde a Garry James Steele.
Así, el 28 de octubre de 2020, internaron por el sector fronterizo de Colchane dos paquetes de clorhidrato de cocaína con un peso neto de 1.910 gramos, la que el día siguiente fue examinada por R.S.T.
Luego de que verificara la calidad de la sustancia e informara de esto a miembros “superiores” de la organización, esta otorgó su aprobación para la compra de dos remesas más.
La segunda implicada
Sin embargo, R.S.T. comenzó a sufrir una serie de enfermedades que lo obligaron a internarse en diferentes centros médicos de Iquique. Debido a esta situación, su hermana -identificada como Y.S.T.- y madre de O’Shea, llegó a Chile para apoyar a su hermano.
Desde su arribo a Chile, Y.S.T. tomó parte en las decisiones que correspondía a su hermano en relación a las operaciones ilícitas en curso, recibiendo requerimientos e instrucciones de su propio hijo Morris.
Carga ficticia
La droga fue trasladada el 28 de enero de 2021 desde Iquique hasta el puerto de Valparaíso, donde un agente encubierto realizaría su ocultamiento en contenedores que fueron posteriormente cargados en diversos buques, con destino a distintos puertos de Europa.
El destino final del container sería el puerto de Antwerp, Amberes, Bélgica, lugar determinado por R.S.T. para el arribo de la sustancia, toda vez que este es uno de los sitios de los puertos europeos que se encuentra “bajo control” del cartel de Sinaloa en Europa.
Tras reuniones para inspeccionar la droga y su calidad, la carga ficticia de la sustancia ilícita se realizó el 4 de febrero de 2021 y zarpó al día siguiente, materializando un envío ficticio de 665 kilos de droga tipo clorhidrato de cocaína, de los cuales 350 eran de propiedad de la organización integrada por los hermanos y los restantes, pertenecerían “ficticiamente” a otra organización.
El agente encubierto
Paralelamente, previa coordinación entre las fiscalías de España y Chile, se designó en marzo de 2021 un agente encubierto, que actuaría en dicho territorio, quien sería un contacto que operaría en el aeropuerto de Barajas, Madrid, y estaría en condiciones de recibir la droga que sería remesada vía aérea, teniendo la posibilidad y capacidad logística de extraer la droga de manera segura y, una vez con la droga en su poder, haría entrega de ella a quien determinarán los hermanos y Morris O’Shea.
Finalmente, los hermanos fueron detenidos el 10 de marzo 2021 en el aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago, cuando intentaban abandonar Chile. La audiencia de comunicación de la sentencia quedó programada para las 12:40 horas del martes 5 de diciembre próximo.