(Desde Montevideo, Uruguay) - A poco más de 10 días del ataque de Hamas a Israel, la analista española y ex diputada por Barcelona Pilar Rahola reflexionó sobre algunas lecciones aprendidas en ese poco tiempo de conflicto. “Ahora sabemos que para determinada izquierda masacrar familias enteras, jóvenes, bebés, secuestrar a niños y convertir en objeto de caza a seres humanos no es condenable si las víctimas son israelíes”, escribió entonces en un hilo de Twitter.
Ahora, a un mes del ataque en Israel, la analista tiene nuevas conclusiones para aportar: todo está y será peor.
“Un mes después de la masacre, todo ha ido a peor. Todo lo que habíamos previsto que podía pasar ha pasado”, dijo Rahola, entrevistada por Infobae. La escritora es una de las principales personalidades del III Foro de Latinoamérica e Israel, que se desarrolla entre el 7 y el 10 de noviembre en Montevideo y Punta del Este.
Rahola consideró que la “masacre” del 7 de octubre fue incluso más “terrible de lo imaginable” y cuestionó la visión que existe sobre Israel luego de “iniciar un proceso para recuperar los secuestrados y defenderse”. “Se convirtió en el malo de todos los malos y no hay ningún balance ahí. Ya nadie se acuerda de los secuestrados y de los muertos en Israel. Todo es Palestina, Palestina...”, señaló la analista.
Los dirigentes de la izquierda europea y occidental han comenzado una “avalancha” para criminalizar a Israel que provocó que el país víctima de la masacre sea “aún más odiado”. Esto, además, dejó espacio para que exista un “antisemitismo nuevo y viejo”: el “de siempre” y una “forma nueva”, que ella denomina “antisemitismo 2.0″. “Es un vestido nuevo de odio a los judíos”, consideró.
Rahola diferenció estas dos formas de antisemitismo. La modalidad “clásica” es la que históricamente fue alimentada por la “extrema derecha”, y estuvo presente desde la expulsión de los judíos en Sefarad hasta con el nazismo. En el último tiempo, se sumó un discurso de izquierdas que se “disfraza de antisionismo”. “¿Qué es el anti sionismo? El sionismo no fue nada más que la voluntad de que los judíos tuviera un derecho internacional que los protegiera”, afirmó.
La escritora cuestionó a quienes afirman que no son antisemitas porque tienen amigos judíos pero sí se definen como antisionistas. “Me pregunto: ¿por qué les duele más el conflicto en Palestina de lo que ha dolido en Yemen? ¿Considera que el régimen de Assad en Siria es criminal? No he visto manifestaciones en las calles. ¿Le preocupa a alguien lo que ocurre con las mujeres en Irán? Hace poco hubo otra mujer muerta, y con un régimen terrorífico como es el iraní. No veo esas manifestaciones en las calles, no veo ese odio a los iraníes, a los sirios”, señaló.
Rahola también cuestionó que personas que hablan en nombre de la libertad justifican los crímenes de organizaciones islamistas radicales, que son terroristas.
“Esto no es una crítica a un gobierno. Es la voluntad de que desaparezca Israel, de lo que los judíos no tengan un derecho internacional y por, tanto , es abiertamente un antisemitismo 2.0. Diferente al de la extrema derecha, pero igualmente antisemita”, definió.
Rahola cree que el tiempo actual es peor que el previo al 7 de octubre y considera que, a futuro, el mundo continuará empeorando. La analista proyectó que Israel estará cada vez más criminalizado y abandonado –allí el dolor y las muertes “no cuenta”–, los pro-palestinos serán cada vez más incapaces de diferenciar entre el pueblo palestino y las organizaciones terroristas y Hamas estará “reforzado” por las opiniones anti israelíes.
El tiempo que se viene será “difícil” para los judíos del mundo, aseguró la analista española, y se mostró pesimista: “Va a ser lo peor que se ha vivido respecto al antisemitismo desde la Segunda Guerra Mundial. Para los israelíes va a ser muy duro y creo que, para el mundo en general, esta polarización anti israelí y a favor de Palestina acrítica, sin tener en cuenta lo que ocurre, es muy mala para la salud democrática de la sociedad”. La analista opinó que la humanidad se dirige hacia un mundo “dogmático”, “insolidario” y “anti israelí”.
Sobre este punto, Rahola dijo estar “alarmada” por lo que sucede en las universidades, en especial las americanas. “Me resulta incomprensible que quienes van a ser los dirigentes de Estados Unidos, que son los estudiantes de Hardvard o Columbia, hagan discursos tan ferozmente antijudíos”, cuestionó.
La analista criticó también la mirada geopolítica que existe del conflicto. “Al final no hablamos nunca de Irán, de la patita que tiene Rusia, no hablamos del eje con China”, indicó Rahola.
Para entender lo que ocurre en Medio Oriente es necesaria una “lupa grande” y no una chica porque, de esta forma, se reduce a un conflicto entre israelíes y palestinos. “Esta masacre fue coordinada. Sabemos perfectamente que se reunieron en Beirut la Guardia Revolucionaria, Hamas y Hezbolá; que se encontraron otra vez en Turquía y en Teherán; que terroristas de Hamas se entrenaron en campos de la Guardia Revolucionaria iraní”, enumeró.
La analista agregó que Irán es financiado “abiertamente” por China y tiene un acuerdo de miles de millones de dólares con Rusia –que no sorprende que afirme que Hamas “no es una organización terrorista”–. Estos tres países son los que “ganaron la guerra en Siria” y dominan la zona. “Estamos viendo como el mundo nuevamente está dividiéndose en dos partes nuevamente, y una de ellas es el triángulo Irán, China y Rusia. Y el otro son los países occidentales, aunque no todos porque luego tenemos la patita bolivariana. En realidad, estamos reproduciendo los bloques de Guerra Fría de otra manera”, afirmó.
Desde el inicio de los ataques a Israel a nivel global hubo un aumento del 330% de los eventos antisemitas violentos, un crecimiento del 128% de la profanación de los lugares judíos y una suba del 300% de las amenazas, según un informe realizado por el Ministerio de Asuntos de la Diáspora y la Lucha contra el Antisemitismo, la Organización Sionista Mundial y la Agencia Judía. Los datos fueron presentados en el marco del foro que, este miércoles 7, tuvo su cena de apertura en la capital Uruguaya.