(Desde Montevideo, Uruguay) La divulgación de audios con conversaciones entre el canciller de Uruguay Francisco Bustillo y la vicecanciller Carolina Ache evidenciaron que el gobierno uruguayo intentó ocultar información en una investigación sobre la entrega del pasaporte al narcotraficante Sebastián Marset. La conversación, ocurrida en noviembre de 2022, provocó que un año después el ministro tenga que renunciar a su cargo.
El diálogo –grabado por Ache– revela que Bustillo la quería convencer de que no entregara una conversación con otro integrante del gabinete, el subsecretario de Interior, Guillermo Maciel, en la que era advertida de que Marset era un “narcotraficante peligroso y pesado”. “Vos perdé el celular”, le sugería el canciller a su segunda, según los audios difundidos por Búsqueda.
La nota de la revista uruguaya también informaba que Roberto Lafluf, asesor y mano derecha del presidente Luis Lacalle Pou, dijo que destruyó un acta notarial incorporada en el expediente de la Cancillería que contenía los mensajes entre Ache y Maciel.
Una vez conocida la información, comenzaron las repercusiones políticas. El Frente Amplio, principal partido de oposición, convocó a una reunión urgente luego de la que pidieron las renuncias del ministro del Interior, Luis Alberto Heber, el subsecretario Maciel y el canciller Bustillo.
En la mañana del jueves, el primero en opinar fue el líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos. En declaraciones a canal 12 y radio Carve, el senador dijo que está “convencido” de que Lacalle Pou estaba al tanto de la situación, que espera “explicaciones” de parte del presidente, y pidió la renuncia del ministro Heber.
“Claramente el señor Lafluf no actuó por cuenta propia. Quiero saber por qué actuó como actuó”, agregó.
“Esto es un tema tan grave que el presidente ya debería estar en Uruguay, pero tendrá sus razones para no estar acá”, dijo el líder de Cabildo Abierto, el partido de la coalición gobernante que más diferencias ha mostrado con el presidente. “Esperé una llamada del presidente y no la he recibido”, lamentó, en declaraciones recogidas por Telemundo.
Manini Ríos agregó que, como integrante de la coalición de gobierno, se merece “explicaciones claras”. “Si este caso no se aclara bien, da para que todos pensemos que el narcotráfico está permeando el sistema político”, indicó.
El dirigente del Partido Colorado (otro socio de la coalición de gobierno) Tabaré Viera consideró en su cuenta de Twitter que la información divulgada “es muy grave” y que “hay responsabilidades políticas que deben ser asumidas”.
Pablo Mieres, líder del socio minoritario Partido Independiente, también definió a los hechos como “muy graves” y opinó que se necesitan “medidas inmediatas”.
En el Partido Nacional, el socio mayoritario del gobierno y al que pertenece el presidente Lacalle Pou, entienden que la salida del ministro Heber es la mejor solución, según informó El País. Aunque en su sector consideran que no estuvo relacionado a la emisión del pasaporte, su renuncia es analizada como necesaria por ser la cabeza de esa cartera.
Lacalle Pou participó este viernes de la cumbre de APEP en Washington, desde donde coordinó cambios en su gabinete. Al regreso a Montevideo, mantendrá reuniones con Heber, Maciel y Lafluf y tiene previsto brindar una conferencia de prensa durante el fin de semana para explicar el caso Marset y los nuevos posibles cambios en el gabinete, como publicó Infobae.
Hasta que no llegue a Uruguay, Lacalle Pou no tomará ninguna decisión aunque está al tanto que en su partido le exigen la renuncia de los tres jerarcas vinculados a este caso, informó El País.