(Washington, Estados Unidos) Presidentes de América Latina que esta semana desembarcaron en Washington para una cumbre organizada por el presidente Joe Biden para mejorar las relaciones del continente con Estados Unidos celebraron que el gobierno norteamericano mire a la región y se muestre dispuesto a dar pasos más fuertes de integración.
“Recuperé el optimismo en la relación con EEUU. Nos sentíamos quizás dejados un poco dejado de lado y esta esta iniciativa del presidente Biden y esta presencia con nuestros colegas abre una puerta interesante”, dijo el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou este jueves en un evento organizado por el gobierno de Estados Unidos y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en la previa a la cumbre denominada Alianza de las Américas para la Prosperidad Económica (APEP).
El presidente chileno, Gabriel Boric, fue en el mismo sentido. “EEUU ha perdido influencia en America Latina durante estos años. La manera de recuperarla no es con hegemonía sino con cooperación. La APEP puede ser un espacio de cooperación económica y derechos de medioambientes”.
Esas visiones fueron compartidas por el presidente de Costa Rica, Rodrigo Cháves, en un panel que integró también el presidente de Republica Dominicana, Luis Abinader y el anfitrión, el presidente del BID, Ilan Goldfajn.
En un segundo panel de presidentes con la presencia de Boric, Dina Boluarte de Perú y Guillermo Lasso de Ecuador también hubo referencias a cómo EEUU tuvo un gesto con este evento.
“Era hora que entre países latinoamericanos tengamos una cumbre para conversar entre nosotros y Estados Unidos”, dijo Lasso.
En el primer diálogo de la mañana entre presidentes hubo tiempo para las bromas y la competencia por cuál de los tres países tiene las mejores playas. Abinader, que disertó luego que Lacalle hablara de las ventajas de Uruguay para invertir, dijo que su país tal vez no tiene materias primas pero sí mejores playas.
Apelando a la aficción de Lacalle por el surf, Chaves le preguntó en qué país prefería practicar el deporte y el uruguayo confesó que en Costa Rica. “Cuando era libre y feliz, andaba por el mundo surfeando”, les dijo mientras se sacaban una foto los cuatro oradores pero con micrófono abierto. Antes, en el panel, les dijo que con esta discusión tenía un motivo para invitar a los presidentes a su país para que conozcan las playas uruguayas.
Pedidos de “hechos concretos”
La APEP fue presentada por Biden durante la Cumbre de las Américas del año pasado y a comienzo de 2023, 11 países más Estados Unidos adhirieron a este mecanismo. Para Abinader, “es momento de pasar a hechos concretos”. Lo mismo planteó Boric.
“La gran oportunidad que tenemos es pasar de este diagnóstico, muy correcto que hemos hecho de lo que necesita América Latina y de su relación con Estados Unidos, a hechos”, dijo el presidente dominicano.
“Que América Latina haya desembarcado en Washington es una muy buena noticia”, dijo Lacalle.
Boric se mostró optimista por la apuesta de la APEP, pero pidió que ahora muestre avances: “Que tenga resultados concretos para nuestros pueblos”, dijo el presidente chileno, que también señaló que le gustaría ver a otros países de la región en este acuerdo y señaló a Argentina. Brasil, Paraguay y por qué no más adelante Venezuela.
El mandatario aclaró que estos países no están en la APEP porque no tienen el nivel de comercio con Estados Unidos que los 11 países que sí lo integran: “Pero tenemos que encontrar la forma de integrarnos”, consideró.
Rusia, Israel y Hamas
Las dos guerras que concentran mayor atención en la actualidad estuvieron presentes en los foros. Varios presidentes destacaron los impactos que está generando la invasión rusa en Ucrania.
Todos los que se refierieron al tema (Boric, Boluarte, Lasso) condenaron la invasión rusa. Sobre la guerra en Medio Oriente hubo posturas diferentes.
“La invasión inaceptable de Rusia a Ucrania, que se ha sostenido en el tiempo, nos pegó muy duro a las cadenas de suministro agrícolas”, dijo Boric.
Sobre la guerra en Gaza calificó como “inaceptable agresión” la cometida por Hamas contra Israel, pero aseguró que luego hubo una “desmedida y desproporcionada respuesta de Israel”, algo que también afecta los países de la región.
Ecuador quiere hablar más de seguridad y Perú se muestra estable
El presidente Lasso señaló que uno de los puntos que más le importa de esta cumbre es lograr que se hable de seguridad, dado que es uno de los aspectos que más preocupa en la región.
“Me gustaría que en esta cumbre habláramos de un tema importante para nuestro país: la seguridad”, dijo Lasso. “Hoy no hay conflicto de un país con otro. En América Latina lo que hay es un enemigo común de todos los países: el narcotráfico, la trata de personas, la violencia general en la calle como lo hemos sentido nosotros en el Ecuador en los últimos tiempos”, agregó el presidente.
Lasso le planteó al BID que el organismo debería trabajar más en este asunto. “Es fundamental hablar de la seguridad como un problema que afecta al igual a todos los países”, insistió.
La presidenta de Perú dedicó buena parte de su tiempo a hablar sobre cómo su país ahora es “estable” y abierto a las inversiones, luego de los turbulentos episodios que derivaron del golpe de Estado que intentó realizar su antecesor Pedro Castillo y las violentas manifestaciones que la administración. de Boluarte reprimió.