(Desde Montevideo, Uruguay) - Un mensaje de Twitter de Romina Celeste Papasso, una mujer trans militante del Partido Nacional uruguayo, desencadenó el inicio de la investigación contra el senador Gustavo Penadés, histórico dirigente de esa misma colectividad política. “Voy a hablar del pedófilo que tenemos metido en la política hace 30 años”, escribió el 26 de marzo en la red social y ese mensaje fue el inicio de múltiples denuncias de abuso y explotación sexual de menores de parte del legislador.
La investigación judicial contra Penadés, un destacado senador del partido de Luis Lacalle Pou, tendrá un nuevo avance el próximo 10 de octubre, cuando la fiscal de Delitos Sexuales Alicia Ghione pedirá la imputación del denunciado por 10 delitos de promesa de retribución o retribución a menores de edad para que ejecuten actos eróticos, según informaron El Observador y El País. El delito conlleva una pena de dos a 12 años de penitenciaría.
Después de su mensaje en Twitter, Celeste Papasso dio el nombre del legislador en el programa Hacemos lo que podemos. Detalló que cuando era menor de edad y no había hecho su transición de género, el senador la levantó dos veces en un parque de Montevideo y tuvieron relaciones sexuales.
Al relato de Celeste Papasso se le sumó la declaración ante la Fiscalía de 10 víctimas y un testigo.
La Fiscalía reunió un volumen importante de evidencias en las declaraciones de las víctimas, además de filmaciones y pericias. Se presume que la solicitud de formalización de la investigación será apelada por la defensa de Penadés y, por tanto, la fiscal pretendía contar con la mayor cantidad de pruebas suficientes en esta instancia.
Para hacer la solicitud de imputación, Ghione esperaba que la Policía Científica terminara con los análisis de los contenidos de los celulares de Penadés.
La fiscal también pedirá la imputación de Sebastián Mauvezín, un profesor de historia que oficiaba como el reclutador de los menores que tenían encuentros íntimos con Penadés.
A mitad de agosto, la jueza Marcela Vargas dispuso que tanto Penadés como Mauvezín tendrían prohibida la salida del país durante seis meses y aceptó el pedido de la fiscal para incautarles los celulares. Ghione ahora solicitará también la prisión preventiva de estos dos denunciados como una medida cautelar mientras avanza la investigación, informó La Diaria.
En junio, el Senado de Uruguay decidió suspender los fueros parlamentarios de Penadés. El desafuero fue solicitado a la vicepresidenta Beatriz Argimón por la Justicia y a pedido de la Fiscalía. Ghione envió a los parlamentarios un documento en el que daba detalles de las denuncias.
La mayoría de los que presentaron declaración “tenían corta edad” (13 y 14 años) en el momento del abuso y explotación sexual. Los hechos ocurrieron a lo largo de varios años e incluso hay testimonio de 2020.
El documento entregado por la Fiscalía al pedir el desafuero detalla que uno de los testimonios se trata de un caso antiguo. “La víctima era apenas un niño en un cuadro de fútbol que el propio Penadés organizaba cuando era un adolescente”, dice el texto.
El senador pidió licencia a su puesto mientras avanza la investigación así como también a la Presidencia del Parlasur, que ejercía desde hace un año. Además, renunció al Partido Nacional.
Después de la denuncia pública de Celeste Papasso, Penadés negó “rotundamente” las acusaciones en una conferencia en la que dijo que era homosexual pero no pedófilo. En una de sus asistencias al juzgado, el senador reiteró ante la prensa su “absoluta inocencia”. “El tiempo va a ir dando la posibilidad de conocer la trama que hay detrás de todo esto”, agregó en una rueda de medios.
En julio, en declaraciones a Búsqueda, aseguró que está convencido que detrás de las acusaciones en su contra hay una compleja trama de estafas, extorsiones, proxenetismo, influencers de redes sociales y hasta posibles conexiones con el narcotráfico. “Tengo la tranquilidad de que después voy a escribir algo para Netflix y me voy a hacer millonario”, dijo esa vez.