Para el economista nicaragüense Oscar René Vargas, Daniel Ortega está “vendiendo humo” al anunciar esta semana la intención de integrar a Nicaragua a los países BRICS+, el bloque que busca reconfigurar el orden mundial, principalmente en el área económica. “Es pura propaganda”, dice Vargas.
“Nosotros estamos tocando la puerta (de los BRICS), porque ese es el mundo multipolar donde se juntan los pueblos, desde los países más poderosos hasta los países más empobrecidos, para unir esfuerzos en la lucha por la paz, contra el hambre, en la lucha por la sobrevivencia de la humanidad, en la lucha por la defensa del medio ambiente”, expuso Ortega, el lunes durante los actos de celebración del 44 aniversario del Ejército de Nicaragua.
Vargas dice darle seguimiento a los BRICS desde el 2006 cuando Brasil, Rusia, India y China conformaron el grupo original. No cree que, por sus características, Nicaragua sea incorporada.
“Nicaragua no representa ningún punto importante que le pueda dar un plus a la fuerza de los BRICS a nivel internacional. Por lo tanto, es una ilusión lo que está vendiendo Ortega, está vendiendo humo otra vez, así como hizo Tumarín, con la refinería, etcétera. Todo eso ha sido puro humo”, dice.
El régimen de Daniel Ortega se ha caracterizado por anunciar proyectos faraónicos que no pasan de las maquetas con que se presentan. Entre estos proyectos están la construcción de una gran represa hidroeléctrica, en la zona de Tumarín; la más grande refinería de Centroamérica; la instalación de un satélite; y la construcción de un gran canal interoceánico que, según la propaganda oficial, sería “la obra de ingeniería más grande del mundo en todos los tiempos”.
Ortega ve a los BRICS+ como un instrumento de lucha contra “el imperialismo norteamericano”. “¡Es una lucha por la paz! Ese es el primer gran quiebre, el primer gran golpe que recibe la tiranía del Imperialismo a la que ha estado sometido el mundo”, dijo al describir cómo, según él, el imperialismo ha tratado de impedir la conformación de este bloque.
“Pero somos optimistas porque vemos que, por otro lado, desde los países que tienen sentido de humanidad, naciones que son potencias y que tienen sentido de humanidad se viene promoviendo la integración, y ya en los BRICS no son solamente cinco países, ahí fue incorporado Irán, fue incorporada Argentina, los Emiratos Árabes; es decir, ya los BRICS no son cinco, son ocho (en realidad son 10), y cuántos países, Etiopía también integrada a los BRICS, es decir, vienen creciendo”, añadió en su discurso ante los militares.
Desde meses antes de que Ortega hiciera pública su intención de integrarse a los BRICS+, el régimen nicaragüense buscó un acercamiento con este grupo de países. En julio pasado, una delegación del Frente Sandinista participó en el evento denominado “Diálogo de Partidos BRICS Plus” que se celebró durante tres días en África del Sur y otra delegación, encabezada por la alcaldesa de Managua, Reyna Rueda, participó en el Foro Internacional de Innovación BRICS, realizado entre el 27 al 29 de agosto en Moscú, Rusia.
Asimismo, el régimen de Ortega celebró a través de una nota de prensa la reciente aprobación de nuevos miembros a los BRICS+. “El Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional de la República de Nicaragua, saluda con reconocimiento y alegría la invitación que los presidentes fundadores del BRICS hicieran a sus homólogos de Argentina, Arabia Saudita, Egipto, Emiratos Árabes, Etiopía e Irán, para que en representación de sus pueblos y gobiernos se incorporen a este potente grupo de economías emergentes”.
“El Gobierno de Nicaragua reconoce en los BRICS una poderosa iniciativa y realidad que permitirá fortalecer el mundo multipolar que tanto necesitamos, e ir cambiando el modelo económico injusto, colonialista e imperialista, que continúa pretendiendo dominar a los pueblos y someter a los países y gobiernos a su hegemonía, que incluye la perversión de esas llamadas sanciones que sólo son agresiones contra las libertades y los derechos humanos de quienes no les son dóciles”, añade la nota.
Para el sociólogo y economista Oscar Rene Vargas, los BRICS+ tienen tres propósitos estratégicos. El primero, reconfigurar el mapa geopolítico mundial, al hacer que su peso político y económico sea reconocido. “Por ejemplo”, dice, “la India tiene más peso político que Inglaterra, pero no tiene un asiento permanente en el Consejo de Seguridad de naciones Unidas”.
El segundo propósito es terminar con la hegemonía del dólar como moneda de cambio internacional. “El dólar es uno de los instrumentos de dominación de los Estados Unidos. Todo pasa por el dólar. Esto no significa que el dólar va a desaparecer. Es el gran error de Ortega y de su hijo (Laureano) decir que el dólar ya estaba caduco. No, el dólar todavía es la mayor moneda de comercialización internacional, pero la tendencia es que vaya disminuyendo poco a poco”.
El tercer objetivo estratégico de los BRICS+, a criterio del economista, es controlar los intercambios de petróleo y gas, “que durante al menos los próximos diez años van a seguir siendo importantes”. Por ello, dice, hay un evidente interés de integrar a países productores de petróleo.
“Lo de Ortega es pura propaganda. No tiene un efecto real. La próxima reunión de los BRICS es en octubre del 2024. ¿Quiénes son los países que pueden entrar en los BRICS en el 24? Los que se mencionan son los países de Asia Central, es decir, todos los países que están entre Rusia y ex países soviéticos que son productores de petróleo. Otro que puede entrar en Venezuela por la cuestión de su petróleo. Bolivia, por el litio. Es decir, son países que tienen algo que dar y que algo para reforzar a la estrategia de los BRICS, que es reconfigurar el poder político”.
Otro economista nicaragüense consultado por Infobae, que por su seguridad pide anonimato, dice que los BRICS+, “en el corto y mediano plazo, no parece ser un mecanismo muy prometedor para Nicaragua”.
“Aparte de reuniones más de carácter político y de discusión sobre el mundo multipolar que pretenden apoyar, lo concreto que producen es el Banco de Desarrollo con sede en Shanghái en el 2015. La propuesta del banco es mucho más ambiciosa de lo que se ha logrado. Pretendía poder prestar 35 mil millones de dólares anuales, pero en todos estos años, ese es el acumulado, y el capital permanece pequeño. El Banco Mundial por otro lado, solo en el último año colocó 78 mil millones y China a través de sus propias políticas ha prestado medio billón mostrando más que cada quien al final vela, pero por sus intereses”, dice.
Afirma que el grupo funciona sin consenso sobre sus propósitos. “Cada uno lo usa de la forma que más le conviene al final a sus intereses individuales. Así que, si para China y Rusia a veces se piensa que ellos quieren suplantar el orden establecido, India lo que abiertamente dice es que lo que busca es mejorar su posición negociadora y que se le dé más espacio en las decisiones de las instituciones de Bretton Woods. China y Rusia especialmente, están buscando formas prácticas de no sentirse dependientes del dólar por lo que alegan es una politización del orden financiero”.
La intención de Ortega, añade, es hacer una movida política para ubicarse del lado de los que están cuestionando el orden mundial liderado por los Estados Unidos, participar en las discusiones sobre el orden mundial a ese nivel y procurarse financiamiento alterno, pero recordó que el Banco del grupo dijo el año pasado que no admitiría nuevos miembros más allá de los que ya tenía.
“Su capacidad de financiamiento y de absorber a nuevos miembros en ese sentido tiene sus problemas por el bajo ritmo de crecimiento que el banco ha tenido en términos relativos. Ahora se han incorporado nuevos y diferentes miembros al grupo BRICS. Habrá que ver qué deciden en términos de los criterios para abrirse, pero hay interés de los países de sumarse para contrariar a los Estados Unidos, o lograr mejores márgenes de maniobra en las negociaciones con el orden dominante”, señala.