La misión de la OEA en Ecuador elogió el proceso electoral pero criticó el sistema de votación a través de Internet

(Washington, Estados Unidos) Ecuador llegó a las elecciones anticipadas del pasado fin de semana en un clima de violencia política inédito para el país, pero la jornada de votación se desarrolló en un “ambiente cívico y pacífico”, destacó el informe preliminar de la Misión de Observación Electoral (MOE) de la Organización de Estados Americanos (OEA).

De todas maneras, el informe sobre las elecciones del pasado 20 de agosto destacó serias fallas en el sistema de voto telemático para los ecuatorianos en el exterior, así como problemas para garantizar el voto secreto en algunos recintos. La MOE le sugiere al país realizar algunos cambios para evitar que se repitan los mismos problemas para la segunda vuelta, a desarrollarse el 15 de octubre. Ese día, se enfrentarán en un balotaje Luisa González, delfín del expresidente Rafael Correa, y el empresario de 35 años Daniel Noboa, los dos candidatos más votados en las elecciones presidenciales del domingo.

Ecuador el fin de semana eligió también a una nueva Asamblea Nacional, que será la que complete el período que va hasta 2025, luego de que el actual presidente Guillermo Lasso decretara la denominada “muerte cruzada”, mediante la cuál disolvió el Parlamento y convocó a estas elecciones anticipadas, a horas de que el Parlamento lo destituyera en el marco de un juicio político.

La MOE de Ecuador, que fue encabezada por la ex vicepresidenta panameña Isabel de Saint Malo, destacó la alta participación ciudadana, que superó el 80% y celebró que todos los candidatos presidenciales reconocieran los resultados y llamaron al respeto de las instituciones electorales. “Este es un gesto valioso y necesario para la convivencia democrática, especialmente en una región donde es cada vez más frecuente el desconocimiento de los resultados electorales incluso ante comicios realizados bajo condiciones de integridad y transparencia”, asegura el informe.

El informe de la MOE dedica al menos siete de sus 20 páginas a reseñar los episodios de violencia electoral en Ecuador y evaluar sus consecuencias y califica esta violencia como “uno de los aspectos más serios y preocupantes en este proceso electoral”. La misión de la OEA destaca que el país se encuentra en “un contexto generalizado de inseguridad y temor”.

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Según el informe de la MOE, “los actos de violencia política y electoral continuaron agravándose e impactaron profundamente el proceso electoral”.

Entre los hechos más graves ocurridos en la etapa preelectoral condenó “el brutal asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio a 11 días de celebrarse los comicios”. Asimismo, destacó el asesinato de otros candidatos y autoridades como “una pérdida irreparable” que representa “un retroceso democrático para Ecuador y para la región”.

La misión observó que “el miedo fue el común denominador durante la campaña electoral. Todos los candidatos presidenciales o representantes de los binomios con los que se reunió la MOE/OEA manifestaron haber recibido amenazas y admitieron temer por su vida”.

Los observadores de la OEA, pese a que tenían sus propios equipos de seguridad que fueron apoyados por las fuerzas estatales y cuentan con inmunidad, sintieron en carne propia esa inseguridad. Según el reporte, los observadores desplegados en la provincia de Esmeraldas, la zona de mayor violencia, debieron usar chaleco antibalas durante toda la jornada electoral.

El informe recomienda “no normalizar la violencia político-electoral” e “insta a las autoridades competentes a investigar los hechos de violencia política, de cualquier índole, para que no queden impunes”.

Según la misión de observación, la violencia política y en especial el asesinato de Villavicencio generó “consecuencias para el desarrollo del proceso electoral bajo condiciones de libertad, seguridad y equidad”.

Además, asegura que pese a que todos los candidatos tuvieron que reforzar sus equipos de seguridad privada, también solicitaron apoyo a las fuerzas policiales. “La demanda actual supera las capacidades de la Policía Nacional en términos de recursos materiales, humanos, técnicos y financieros”, dice el informe. Asegura además que algunas fuerzas políticas le manifestaron que “los recursos partidarios eran insuficientes para ofrecer protección a todas las personas inscritas en las lista”.

La MOE plantea algunas medidas para garantizar la protección de candidatos hacia la segunda vuelta, tales como capacitar a las fuerzas de seguridad de los líderes para prevenir ataques en su contra y considerar que se solicite cooperación a organismos internacionales expertos en seguridad electoral.

Por primera vez en Ecuador se habilitó el denominado “voto telemático” para 101 zonas electorales del exterior. ¿De que se trata? Se permitió que los ecuatorianos que viven en el exterior se registraran para votar a través de una plataforma electoral a la que podían conectarse desde teléfonos celulares, tablets o computadoras con conexión a internet.

Según informó el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Ecuador, se buscaba “garantizar que todos los ecuatorianos, sin importar su ubicación geográfica”, tuviesen “la oportunidad de participar en este proceso electoral”.

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El país tiene empadronados fuera del país a 409.250 ciudadanos. Quienes querían votar debían registrarse previamente y lo hizo el 30,26% (unos 124.000 electores).

Sin embargo el sistema electoral elegido sufrió serios problemas, entre ellos algunos ataques informaticos. Finalmente votaron solo 51.600 ecuatorianos en el exterior (un 41% de los que se habían inscripto para hacerlo).

“La baja participación de ciudadanos en el exterior pudo tener relación con los problema que experimentó el sistema de voto telemático a lo largo de la jornada y que en muchos casos impidió a las personas ejercer el sufragio”, señaló la OEA.

La MOE informó que recibió numerosas quejas sobre dificultades técnicas en la plataforma de voto telemático y recomienda realizar una investigación para determinar el origen y causas de los ataques informáticos al sistema. Asimismo, pidió reforzar la seguridad y reflexionar sobre la idoneidad de esta modalidad de votación para garantizar el derecho de los migrantes a participar en los comicios.

“Si bien las causas específicas de la falla del sistema aún se desconocen, la misión constató que el uso del voto telemático implica distintos riesgos, entre ellos que la aplicación esté bajo el control de una empresa, inseguridades relacionadas al entorno del votante y la posibilidad de emitir múltiples votos desde un mismo dispositivo”, señala el informe.

En el territorio de Ecuador también se habilitó una modalidad de sufragio para personas mayores de 50 años o con problemas de discapacidad, conocida como “voto en casa”, para el que se implementó 166 juntas receptoras móviles en todo el territorio nacional.

También se estableció la denominada votación “de atención preferente”, mediante la cual se les permite a personas que tienen problemas de movilidad ir a lugares con mayor accesibilidad o incluso llevarles las hojas de votación hasta el auto para que allí emitan su sufragio.

Según detectó la misión de la OEA, en algunos lugares no se respetó el voto secreto de las personas que sufragaron en mesas de atención preferente y en el programa de voto en casa.

“En ambos casos se identificó que los biombos se ubicaron en lugares y de manera que permiten que otras personas puedan ver por quién votó”, dice el informe.

Por so la misión recomienda “reforzar la capacitación” e “iInstruir a los coordinadores de recinto a realizar rondas de supervisión durante la instalación y a lo largo de la jornada para corregir la ubicación de los biombos a modo de garantizar la secrecía del voto”.

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