La Corte Suprema de Justicia de Nicaragua, controlada por el régimen de Daniel Ortega, inhabilitó de forma permanente al abogado José Manuel Urbina Lara, preso político de la dictadura por denunciar un presunto vínculo de la magistrada Alba Luz Ramos, que preside el Poder Judicial, con un narcotraficante.
Así, Urbina Lara se convierte en el vigésimo séptimo jurista privado de ejercer el Derecho en Nicaragua en lo que va de mayo.
En su resolución, la Justicia nicaragüense explicó que dieron lugar “a los informativos seguidos en contra” de Urbina Lara, relacionados con presuntos cobros de honorarios y luego no cumplir con las funciones para las que había sido contratado.
Urbina Lara, encarcelado desde enero de 2021, publicó en Facebook antes de su arresto por un accidente de tráfico, que el empresario nicaragüense Henry Fariña, condenado en 2012 a 30 años de prisión por narcotráfico y otros delitos, es yerno de la presidenta de la Suprema, Alba Luz Ramos.
Según Urbina Lara, Fariña le regaló un anillo con diamantes valorado en 50.000 dólares a Ramos. También aseguró que el narcotraficante está libre en Guatemala, aunque en su escrito no ofreció pruebas.
Fariña, condenado por narcotráfico, crimen organizado y lavado de dinero, sobrevivió a un ataque armado en el que murió el cantautor argentino Facundo Cabral en Guatemala, a quien promovía sus espectáculos en la región.
Cabral había presentado un recital en Guatemala y era conducido por Fariña hacia el aeropuerto que sirve a la capital del país cuando se produjo el incidente, supuestamente ordenado por el costarricense Alejandro Jiménez, alias “El Palidejo”, en venganza por el robo de un cargamento de drogas.
Según la Fiscalía nicaragüense, Fariña y “El Palidejo” lideraban una red internacional de narcotráfico que se encargaba de llevar de Costa Rica a Guatemala droga del grupo colombiano de Los Fresas, que tendría como destino final a la banda mexicana de Los Charros, ligada a la Familia Michoacana.
Fariña fue detenido el 30 de marzo de 2012 en el Aeropuerto Internacional de Managua, y fue hallado culpable por narcotráfico y otros delitos el 27 de septiembre de ese año.
En abril de 2014, la Sala Penal Dos del Tribunal de Apelaciones de Managua redujo de 30 a 18 años la pena a Fariña y otras 22 personas, entre ellos dos de sus hermanos y un ex magistrado del Consejo Supremo Electoral de Nicaragua, acusados de pertenecer a esa banda criminal.
En su decisión, la Corte sandinista decidió sancionar a Urbina Lara “con suspensión definitiva del ejercicio de las profesiones de abogado y notario público, a partir de la notificación de la presente sentencia”.
Además, declaró nulo su título de abogado y notario público registrado ante el Supremo Tribunal.
Asimismo, advirtió a Urbina Lara, pese a que está preso, “que debe enviar ante Secretaría de la Corte Suprema de Justicia, en el término de 24 horas, bajo apercibimiento de ley, si no lo hiciere, los títulos de abogado y notario público, los protocolos que llevó durante los quinquenios que estuvo autorizado para cartular, sello y carné”.
El abogado se encuentra en prisión por la muerte accidental de José Antonio Ruiz Rizo, un nicaragüense a quien ofreció viaje gratuito en su camioneta, que se precipitó en un abismo.
Con esta nueva sanción, suman 27 los abogados a los que han privado de forma definitiva a ejercer la abogacía, entre ellos el escritor Sergio Ramírez, la veterana defensora de los derechos humanos Vilma Núñez, y el ex magistrado Rafael Solís, quien es padrino de bodas del dictador Daniel Ortega.
Nicaragua atraviesa una crisis política y social desde abril de 2018, que se ha acentuado tras las controvertidas elecciones generales del 7 de noviembre de 2021, en las que Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto a su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión o en el exilio.
(Con información de EFE)
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