Luego del intercambio de mensajes entre los presidentes de Ecuador, Guillermo Lasso, y de Argentina, Alberto Fernández, sobre la responsabilidad gubernamental de la fuga de la ex ministra ecuatoriana, María de los Ángeles Duarte, condenada por corrupción; Infobae ha confirmado que los dos mandatarios no tienen previsto ningún acercamiento en la Cumbre Iberoamericana que empezará la tarde de este viernes en República Dominicana.
Ante la consulta sobre una posible reunión entre los dos Jefes de Estado, la Presidencia de Ecuador sostuvo que busca mantener buenas relaciones con todos los socios de la región, pero aclaró: “No hemos recibido un pedido de reunión por parte de Argentina en el marco de la Cumbre Iberoamericana”.
El conflicto diplomático entre los dos países sucedió luego de que Duarte, alojada en la embajada de Argentina en Quito, escapara hacia Caracas. La huida de la ex ministra llevó a que Ecuador calificara como persona non grata al entonces embajador de Alberto Fernández en el país, Gabriel Fuks. Argentina hizo lo propio y también expulsó de su territorio al representante ecuatoriano, Xavier Monge.
A partir de entonces ambos gobiernos han expresado sus versiones sobre la salida de Duarte, que debe pagar una condena de ocho años en prisión, según sentenció la justicia ecuatoriana en el año 2020. Sin embargo, con María de Los Ángeles Duarte prófuga el impasse diplomático ha escalado entre los dos países.
Esta semana, luego de que Fernández se haya mostrado junto al expresidente de Ecuador, Rafael Correa, en un foro de Derechos Humanos celebrado en Buenos Aires, el presidente Lasso escribió un tuit, en el que lamentó que el mandatario argentino haya priorizado su amistad con el ex mandatario, también sentenciado por la justicia ecuatoriana a ocho años de prisión, sobre la relación entre ambas naciones.
A partir de la publicación de Lasso en redes sociales, Alberto Fernández respondió en una carta oficial, en la que aseguró que el gobierno de Argentina no tenía ninguna responsabilidad sobre María de Los Ángeles Duarte además sugirió que Lasso cometió un error al expulsar al embajador Fuks: “La reacción desmesurada del señor Presidente de expulsar al embajador argentino es lo que verdaderamente lastima el buen vínculo que argentinos y ecuatorianos mantendremos a pesar suyo. La gravedad y la injusticia de esa decisión demuestra que es su exceso lo que verdaderamente lastima la relación de nuestros pueblos”.
Lasso respondió, con otra misiva, en la que resaltó que el error fue de Fernández al interponer sus preferencias ideológicas sobre la relación bilateral históricamente buena entre Argentina y Ecuador: “Generar un incidente por poner la ideología de sus funcionarios por delante de lo que nuestros pueblos necesitan es el verdadero error”.
Además, el presidente de Ecuador fue duro al sugerir que la oposición que quiere a Lasso fuera del poder conspira desde Argentina: “Esté seguro de que aquí lo lograremos (en referencia a mantener la institucionalidad), a pesar de aquella oposición ligada a la corrupción, que solo busca el poder sin respetar los principios y valores democráticos, incluso conspirando, hoy, desde su país”.
También ha existido una serie de declaraciones emitidas por el canciller de Ecuador, Juan Carlos Holguín, y por el embajador argentino, Gabriel Fuks.
Según Holguín, Fuks entregó información inconsistente y falsa al gobierno ecuatoriano sobre el escape de Duarte de la Embajada. En cambio, Fuks ha calificado a Holguín como mentiroso y ha sostenido que el gobierno ecuatoriano intenta inculparlo por las deficiencias de las autoridades que debían estar a cargo de la ex ministra.
El Canciller de Ecuador también ha mencionado la posibilidad de que el escape de Duarte fuera concertado desde Venezuela con el apoyo del embajador argentino en Caracas, Óscar Laborde: “Creo que también está involucrado el embajador argentino en Caracas”, dijo a una radio local.
Incluso el expresidente Correa ha opinado sobre el conflicto diplomático y ha sostenido que el gobierno ecuatoriano debió otorgarle el salvoconducto a María de Los Ángeles Duarte para que pudiera salir a Argentina. En diciembre del 2020, el gobierno argentino decidió otorgar el asilo diplomático por razones humanitarias a la ex ministra. Sin embargo, Ecuador recordó que conceder asilo a una persona condenada por corrupción transgrede los tratados internacionales de los que ambos países son suscriptores.
En enero de este año en una entrevista con Infobae, el canciller Holguín daba por cerrado el caso de María de los Ángeles Duarte con la decisión de Ecuador de no entregar ningún salvoconducto a favor de la ex ministra.
La última vez que se vio a Duarte en Quito, según las versiones emitidas por las autoridades y la reconstrucción que ha realizado la prensa, fue el 10 de marzo de este año, durante un asado que se celebró en la sede diplomática. Para el lunes, 13 de marzo, la ex ministra ya estaba en Caracas. Se cree que salió de la Embajada de Argentina en un vehículo diplomático. Sin embargo, aún no se esclarecido la manera en la que Duarte cruzó las fronteras de Ecuador y Colombia para llegar a Venezuela.
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