El 2022 cerró con al menos 14 ataques violentos a candidatos, sus familiares y asesores camino a las elecciones locales de febrero, cuando los ecuatorianos acudirán a las urnas para elegir a 23 prefectos y viceprefectos, 221 alcaldes, 868 concejales urbanos y 437 rurales, 4.084 miembros de las juntas parroquiales. Además, votarán por 7 vocales para el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social y por las preguntas del referéndum que impulsa el presidente Guillermo Lasso.
Frente a la escalada de violencia en el país y luego de estos atentados, el Consejo Nacional Electoral aprobará un protocolo de seguridad en el que se incluyan atentados narcoterroristas, como los que aterrorizaron a Ecuador los tres primeros días de noviembre del año anterior.
La Dirección de Seguridad y Manejo del Riesgo del Consejo Electoral elaboró un plan que fue enviado a los despachos de los consejeros electorales, que han definido algunas observaciones. El protocolo pone énfasis en las seis provincias, de 24 a escala nacional, con mayores índices de inseguridad. Según reportó Primicias, el 60% de los casos de sicariato se concentran en el litoral ecuatoriano, por lo que el protocolo está enfocado en esas localidades.
El documento que se prepara en la institución nacional electoral será una guía para que cada delegación provincial elabore un protocolo más específico, de acuerdo a las especificidades de cada zona, incluyendo riesgos de seguridad y fenómenos naturales, según indicó el medio local. Asimismo, la seguridad y custodia de los candidatos estará a cargo de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas.
La primera prueba del dispositivo de seguridad, en materia electoral, sucederá los dos primeros fines de semana de enero, cuando se desarrollen los debates de los candidatos a autoridades locales. Estos debates se transmitirán por radio y televisión y no habrá acceso para simpatizantes en los recintos.
De acuerdo a lo publicado por Primicias, hay más de 843.900 votantes en zonas de riesgo. Las autoridades policiales y gubernamentales han identificado cuatro parroquias conflictivas en Guayaquil (2), Durán (1) y en Esmeraldas (1), donde hay 144 recintos electorales. Justamente en estos cantones se han incrementado los índices de violencia en comparación con el 2021, por ejemplo en Esmeraldas hubo un incremento del 500%.
Todos las agresiones y asesinatos relacionados con los candidatos a los siguientes comicios han sucedido en medio del discurso oficial que asegura que el narcotráfico ha penetrado el país y tiene vínculos con ciertos sectores políticos. Incluso Lasso, y algunos ministros, se ha referido en varias ocasiones a “narcopolíticos”, ha asegurado que el gobierno tiene evidencia para probar esos nexos y ha dicho que pronto publicará los nombres de esos políticos.
Según El Universo, que recopiló los atentados en el contexto electoral, solo el entre el 20 y 21 de diciembre hubo cuatro ataques violentos en Manabí, a 140 kilómetros de Guayaquil, y Esmeraldas, en la frontera norte del país. Esos ataques sucedieron en Manabí en contra del candidato Javier Pincay, quien quiere conseguir la Alcaldía de Portoviejo.
El 21 de diciembre, Jonás Intriago, otro candidato a la alcaldía de Junín, en Manabí, también fue víctima de una amenaza. Pues dispararon en contra de su vivienda. Esa misma mañana, el sobrino de Gisella Díaz, candidata al Concejo Municipal de Esmeraldas, fue asesinado por sicarios, según recogió El Universo.
Antes de estos recientes atentados el candidato a la Alcaldía de Esmeraldas, Frickson Erazo, fue atacado el 18 y el 26 de octubre de este año. Quienes atentaron en su contra quemaron uno de sus vehículos y dispararon contra su vivienda, a la altura de su dormitorio. También, un explosivo detonó frente a su domicilio. El pasado noviembre, un primo de Erazo fue asesinado en Esmeraldas.
Otro candidato a la Alcaldía de Esmeraldas, Miguel Ruiz, fue atacado en febrero y agosto.
Gerardo Delgado, que ejercía de periodista y era precandidato al Concejo Municipal de Manta, en Manabí, fue asesinado por sicarios que lo acribillaron cuando se movilizaba con su hija. Delgado murió al instante.
También, Edison Manjarrés, candidato a la Alcaldía de Atacames, en Esmeraldas, también sufrió un atentado cuando cuatro hombres intentaron asesinarlo. El candidato José Arroyo, candidato al Municipio de Pujilí, en Cotopaxi, a 113 kilómetros de Quito, fue atacado con un arma blanca.
En Durán, a 10 kilómetros de Guayaquil, el asesor jurídico de Rodrigo Aparicio, candidato a alcalde de esa ciudad, fue asesinado por sicarios.
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