El libro prohibido del narco Oscar Caranqui que incomoda al ex presidente Rafael Correa

Lo escribió en prisión y denunciaba supuestos actos de corrupción y vínculos del correísmo con la guerrilla colombiana y el narcotráfico. Sus 10 mil ejemplares fueron decomisados entonces por orden de una jueza. Pero casi una década más tarde, el texto ha comenzado a develarse en las redes sociales

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Óscar Caranqui fue un narcotraficante ecuatoriano. Su fortuna estaba valorada en USD 4 millones. (Ecuavisa)
Óscar Caranqui fue un narcotraficante ecuatoriano. Su fortuna estaba valorada en USD 4 millones. (Ecuavisa)

Como si la numerología jugara un papel importante en las muertes sin resolver, a las 13 horas del 13 de junio de 2013, Óscar Caranqui, un narcotraficante ecuatoriano recluido en la prisión de máxima seguridad La Roca, en Guayaquil, fue asesinado con varios disparos en el patio de la cárcel. La muerte de Caranqui sucedió cinco meses después de que las autoridades decomisaran 10.000 ejemplares de un libro que Caranqui escribió en prisión y revelaba, entre otras cosas, la corrupción en las prisiones y supuestos nexos entre la guerrilla colombiana y el entonces presidente de Ecuador. Todo sucedió en el gobierno de Rafael Correa.

A nueve años de su muerte, una cuenta en Twitter, denominada como “Narcos Ecuador” empezó a difundir las fotografías de las páginas de uno de los libros de Caranqui que sobrevivió a la censura estatal correísta.

Pero ¿quién era Óscar Caranqui y por qué su libro incomodó al poder?

Caranqui era un famoso narcotraficante y estaba preso desde abril de 2005 por los delitos de tráfico de drogas, narcotráfico y asesinato.

Óscar Caranqui estaba condenado por tráfico de drogas, narcotráfico y asesinato. (El Diario)
Óscar Caranqui estaba condenado por tráfico de drogas, narcotráfico y asesinato. (El Diario)

Según recoge el especial Sobrevivientes de Plan V, el 22 de junio de 2004, la policía incautó 11 inmuebles entre haciendas y mansiones de testaferros de Caranqui, también 19 vehículos, una motocicleta, varias armas de fuego, teléfonos celulares y más de USD 131. 500. Las autoridades calcularon que la fortuna del capo era de USD 4 millones y se le acusaba de ser el autor intelectual de cuatro delitos.

Ese mismo año, en 2014, las autoridades colombianas detuvieron a Caranqui en un club de Bogotá, en Colombia. El ecuatoriano portaba un pasaporte venezolano y luego de su detención fue entregado a las autoridades de Ecuador. Por eso, en abril de 2005 fue llevado a prisión.

Caranqui fue condenado a 16 años de cárcel por tráfico de drogas y por el asesinato de la secretaria de una jueza, según indica Plan V. También fue sentenciado a 20 años de prisión por narcotráfico. A Caranqui lo recluyeron en el antiguo penal García Moreno de Quito y luego lo trasladaron a La Roca, una cárcel de máxima seguridad en Guayaquil.

Durante su condena en La Roca, Caranqui escribió un libro denominado La Roca, cementerio de hombres vivos. El texto que redactó Caranqui tendría denuncias sobre corrupción que involucraron a altos funcionarios gubernamentales.

Portada del libro que Óscar Caranqui escribió desde la cárcel de máxima seguridad La Roca y cuyos ejemplares luego fueron decomisados. (Narcos Ecuador)
Portada del libro que Óscar Caranqui escribió desde la cárcel de máxima seguridad La Roca y cuyos ejemplares luego fueron decomisados. (Narcos Ecuador)

De acuerdo con Plan V, el libro señalaba “la corrupción al interior de la cárcel, tráfico de drogas, asesinatos, torturas, dotación limitada de alimentos y artículos para la limpieza, situación que, supuestamente, era conocida por altos funcionarios de los ministerios del Interior y de Justicia”.

Caranqui imprimió 10.000 ejemplares de su libro, pero nunca se distribuyeron.

El 30 de enero de 2013, una jueza de la Unidad Judicial de Garantías Penales de Pichincha dispuso que los libros de Caranqui fueran decomisados.

La jueza justificó su decisión pues las autoridades presumían que el libro “contiene una serie de expresiones injuriosas, fotografías y afirmaciones que afectarían principalmente los derechos de ciudadanos (…) al mismo tiempo que a varias de las autoridades y demás funcionarios del gobierno nacional, entre ellos, el Presidente Constitucional de la República, Ministros de Estado y otros funcionarios públicos”, según recogió Plan V.

Cinco meses después de esa decisión judicial, Caranqui fue baleado dentro de la prisión de máxima seguridad. Las autoridades aseguraron que el reo que mató a Caranqui habría recibido amenazas en contra de su familia por parte del narcotraficante.

El asesino de Caranqui apareció ahorcado en su celda, en la Penitenciaría del Litoral, en septiembre del 2022. (REUTERS/Vicente Gaibor del Pino)
El asesino de Caranqui apareció ahorcado en su celda, en la Penitenciaría del Litoral, en septiembre del 2022. (REUTERS/Vicente Gaibor del Pino)

El hombre que mató a Caranqui apareció ahorcado en su celda, en septiembre de 2022, en la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil.

La muerte de Caranqui disparó varias hipótesis sobre el hecho. Algunos aseguraban que era una forma de justificar una posible fuga y otros argumentaban que el narcotraficante fue sentenciado por “órdenes gubernamentales”.

El libro prohibido

Aunque los 10.000 ejemplares fueron decomisados, existen un par que han sido rescatados y que han circulado por pocas manos.

Recientemente una cuenta denominada Narcos Ecuador difunde algunos de los extractos del libro.

El libro menciona a los hermanos Ostaiza que, según se lee en los extractos, habría sido el nexo entre Rafael Correa y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que, según varias denuncias, habrían financiado la campaña del exmandatario ecuatoriano.

Página 265 del libro de Óscar Caranqui donde se detalla la conversación entre el narcotraficante y los hermanos Ostaiza sobre el caso Angostura. (Narcos Ecuador)
Página 265 del libro de Óscar Caranqui donde se detalla la conversación entre el narcotraficante y los hermanos Ostaiza sobre el caso Angostura. (Narcos Ecuador)

Según se ve en una de las fotografía compartidas por la cuenta de Twitter, en una conversación entre Caranqui y los hermanos Ostaiza, los hombres hablan sobre un video de lo sucedido en Angostura, cuando las fuerzas colombianas ingresaron al territorio ecuatoriano y bombardearon, en 2008, un campamento de las FARC.

La última semana de octubre de este año, Francisco Santos, ex vicepresidente de Colombia, en una entrevista televisada, justificó la medida y aseguró que tuvo que cumplirse de esa forma, incluso vulnerando el espacio territorial de un país soberano porque quien gobernaba era Rafael Correa, presidente que se negó a calificar a las FARC como organización terrorista. Santos aseguró que era imposible solicitar la participación del gobierno del Ecuador porque “las FARC estaban ya bajo la autorización de (Rafael) Correa. Correa sabía que las FARC estaban allá (en Angostura). Si nosotros le decíamos a Correa que íbamos a bombardear, pues Correa les avisaba antes. Entonces no existía esa posibilidad”.

En el extracto del libro, uno de los hermanos Ostaiza asegura que el video puede hacer “rodar cabezas del gobierno y Correa (puede) dejar el poder”.

Página 111 del libro de Óscar Caranqui donde revela que el ministro de Justicia no decía la verdad sobre las condiciones de los presos en la cárcel La Roca. (Narcos Ecuador).
Página 111 del libro de Óscar Caranqui donde revela que el ministro de Justicia no decía la verdad sobre las condiciones de los presos en la cárcel La Roca. (Narcos Ecuador).

También, en una de las páginas que ha sido difundida, Caranqui describe las condiciones precarias en las que vivían los presos, mientras que el entonces ministro de Justicia hacía entrevistas en distintos medios de comunicación presentando otra realidad: “Aparece en todos los medios como “salvador del país”, diciendo que esta es una cárcel súper moderna, donde no nos falta nada. Según él aquí tenemos piscina, sala de televisión, biblioteca, departamento médico de punta… y una cantidad de locuras que no sé de dónde sacó”.

La ex directora de Rehabilitación Social, Alexandra Zumárraga, que conoció a Óscar Caranqui mientras ella estaba en funciones, publicó en su cuenta de Twitter que el narcotraficante “no era una persona mentalmente estable y menos en sus últimos años de vida”. De acuerdo con Zumárraga, “muchas de las aseveraciones que están en su libro no son más que parte de su imaginación. Revisen su prontuario. Asesinato, narcotráfico, fugas, etc.”.

Lo indudable es que, a casi 10 años de su asesinato, la muerte de Caranqui sigue levantando suspicacias sobre todo considerando que la justicia impidió que su libro, que involucraba a los ministros y otros funcionarios del correísmo, circule.

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