El Presidente de Chile, Gabriel Boric, advirtió que en caso que no se resuelva el proceso constitucional, esto podría ser “una bomba de tiempo”.
Fue el 4 de septiembre pasado cuando Chile rechazó el texto propuesto por la Convención Constitucional que buscaba reemplazar la actual constitución vigente escrita en la dictadura militar de Augusto Pinochet.
Desde ese momento el eventual proceso constitucional se encuentra bajo debate en los pasillos del Congreso pues la política chilena aún no acuerda totalmente cómo resolver este dilema.
Por esto es que el presidente de Chile, Gabriel Boric, advirtió en el programa Mesa Central los riesgos que este posible acuerdo siga en suspenso. “No podemos dejar pasar el tema constitucional. El momento constituyente sigue plenamente vigente; si no lo resolvemos, es una bomba de tiempo”.
El mandatario agregó que “si no logramos darle una solución al problema constitucional, en la próxima crisis, que de seguro va a haber, va a ser muy difícil decirle y convencer a la ciudadanía que la política se va a poner de acuerdo y vamos a cambiar la Constitución. Entonces hagámonos cargo ahora de este tema”.
Sobre las causas que llevaron al Apruebo a fracasar en el plebiscito del 4 de diciembre el presidente reconoció que la derrota fue “multicausal”, y que “hemos aprendido de la historia larga de Chile, pero también de la historia reciente, que no podemos guiarnos solamente por estados de ánimo acotados en el tiempo para tratar de dar soluciones permanentes en el tiempo”.
La autoridad continuó con una crítica a su sector. “En ese sentido, creo que desde la izquierda y los sectores progresistas cometimos un error al embriagarnos con el resultado del plebiscito de entrada y el resultado de la elección de convencionales”, y que espera “que la derecha y los sectores que defendieron la opción legítima del Rechazo no cometan el mismo error respecto al resultado del plebiscito”.
Nueva Constitución
A pesar que la propuesta constitucional de la Convención Constitucional fue rechazada, las encuestas nacionales siguen revelando que la sociedad demanda una nueva Carta Magna para el país.
Según la última encuesta Cadem, el 64% de los consultados está de acuerdo con que Chile necesita una nueva Constitución.
El sondeo reveló también que existiría un empate entre quienes demandan cambiar la actual constitución y escribir una nueva con un 43%, y quienes se inclinan por realizar reformas pero manteniendo como base el actual texto constitucional con un 44%.
Sobre cómo debiera ser el eventual futuro órgano redactor, el 66% de los encuestados prefieren una convención mixta, es decir, una mitad de sus integrantes sería elegida por la personas y la otra mitad sería de expertos seleccionados por el Congreso.
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