“Estoy con detención domiciliaria y si tengo que ir a la cárcel lo haré con orgullo”, afirma el médico cirujano coloproctólogo Rómulo Calvo Bravo (de 50 años), uno de los líderes de Santa Cruz que comanda desde el encierro en su casa lo que ya es el paro más largo de la historia de la región boliviana que encabezó en 2019 la movilización ciudadana de 21 días, con el resultado de la renuncia de Evo Morales a la Presidencia de Bolivia, tras casi 14 años en el poder. La nueva protesta cruceña cumple 23 días y reclama que el Gobierno de Luis Arce Catacora realice el Censo Nacional de Población y Vivienda en 2023 y no en marzo de 2024, como lo acaba de anunciar el Presidente de Bolivia en el inicio de la madrugada del último sábado.
Con una vigilia de sus seguidores en su casa, tras recibir hace unos días amenazas incluso de muerte de un dirigente campesino cercano al gobierno de Arce, Calvo alista el segundo Cabildo consecutivo, en poco más de un mes, que definirá en las próximas horas si Santa Cruz suspende el paro o si radicaliza sus medidas de protesta. El médico guarda detención domiciliaria desde el 13 de octubre, una semana antes del inicio del paro, como consecuencia de uno de los 23 juicios que le han abierto, 15 de ellos por demandas de dos diputados del partido de Gobierno.
Es la primera vez en la historia de 72 años del Comité pro Santa Cruz, la institución regional ciudadana señalada de opositora por el Gobierno de Luis Arce, en que su principal dirigente guarda una detención en su domicilio las 24 horas del día, con restricciones incluso a su actividad profesional. Calvo, que preside la organización cívica desde 2020, ha tenido que cerrar su consultorio médico y cancelar tratamientos y cirugías a sus pacientes en dos clínicas privadas por la resolución judicial. También fue desvinculado de un hospital y cuestiona el “ahogo económico” y el acoso del Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) a la que dice estar sometido solo por ser opositor al Gobierno.
Junto a Luis Fernando Camacho, Gobernador de Santa Cruz y antecesor de Calvo en el Comité pro Santa Cruz, el dirigente cívico es señalado por algunos ministros de Arce como responsable de lo que estos consideran un intento de derrocamiento del Presidente boliviano. Tras estallidos de violencia en algunos días del paro, el Gobierno ha adelantado que demandará penalmente a ambos, en medio de pedidos de organizaciones sociales cercanas al oficialismo de que sean encarcelados. El líder cívico ha respondido varias veces que solo busca el censo en 2023 y no interrumpir el mandato de Arce.
En un momento de alta tensión social y política, por la prolongación del paro de 23 días y por el decisivo Cabildo previsto para la tarde de este domingo, Rómulo Calvo habló en exclusiva con Infobae.
-Santa Cruz lleva 23 días de paro por el censo. ¿Por qué ha durado tanto esta medida, esperaba que durara tanto, más que la de 2019?
-Este paro cívico indefinido ha durado y durará lo que el presidente Arce quiera que dure, porque no quiere escuchar al pueblo que desde las calles, avenidas y carreteras clama por la realización de un censo justo, oportuno y transparente. Llevamos meses exigiendo información, realizando mesas técnicas y diálogos que no han llevado a ningún puerto. El Censo Nacional de Población y Vivienda debió haberse realizado el 16 de noviembre de este año, y de la noche a la mañana decidieron postergarlo. Por eso se conformó el Comité Interinstitucional en Defensa del Censo. Antes de esta medida indefinida, realizamos cumbres departamentales, marchas, dos paros y ni así el Gobierno escuchó el pedido de Santa Cruz. Ahora estamos en el día 23 de un paro cívico acatando el mandato de un Cabildo, que le dio antes de empezarlo un plazo de 21 días al Gobierno para recapacitar. Sin embargo, la tozudez e intransigencia de Luis Arce nos mantiene en esta protesta pacífica, y el pueblo cada día está más firme y no renunciará a su derecho de lograr un censo justo y oportuno, que beneficie a toda Bolivia”.
-Evo Morales renunció y se fue en el día 21 de paro. Arce ha encarado 23 días de paro y no ha cedido a la demanda cruceña. ¿Por qué cree usted que ha ocurrido esto?
-Por su soberbia, su negligencia, y la de sus funcionarios del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y de los ministerios. El pueblo que ya lleva en las calles 23 días, solo exige ser contado, ser tomado en cuenta, tener una distribución de recursos y escaños justa. El último Censo fue hace más de 10 años y no es posible que los gobiernos departamentales, municipales, universidades y entidades territoriales autónomas sigan manejándose con esos mismos recursos de una década atrás. Debemos tener una actualización urgente y eso es con el Censo. El presidente Arce debe deponer su actitud de soberbia y atender a su pueblo”.
-El Gobierno señala al Gobernador de Santa Cruz Luis Fernando Camacho y a usted como los responsables de un nuevo intento de derrocamiento. ¿Qué responde a esa afirmación, es así o no lo es?
-El Gobierno del MAS tiene una psicosis con ese tema. En el 2019 el pueblo boliviano unido y de forma pacífica salió a las calles en defensa de la democracia que estaba siendo robada por Evo Morales y sus cómplices, en el comprobado fraude electoral. Cada vez que el pueblo boliviano reclama por sus derechos, el Gobierno del MAS sale con esta mentirosa retórica. Lo que exige Santa Cruz es Censo; un Censo justo, transparente, inclusivo y oportuno para el 2023. Es fundamental que el Gobierno deje de mentir y se ponga a trabajar para que esta encuesta técnica ciudadana se haga de una vez”.
-El Gobierno advierte con iniciarle a usted y al Gobernador Luis Fernando Camacho demandas penales por las consecuencias del paro, entre ellas cuatro muertes y daños económicos, ¿qué opina de eso?
-El Gobierno del MAS al mejor estilo castrista y chavista es campeón en la persecución política-judicial y además es implacable a la hora de reprimir al pueblo que pacíficamente protesta. Las evidencias están ahí, en los medios de comunicación. Quienes han intervenido con violencia han sido los seguidores del MAS comandados por funcionarios públicos y coadyuvados por la Policía Nacional. Los Ministros de Gobierno y de Obras Públicas han estado al frente de la represión contra los ciudadanos que ejercen su derecho constitucional a la protesta pacífica. El que le hace daño económico a Bolivia es el Gobierno de Arce, que restringió las exportaciones, mientras los sectores afines al MAS cercaron Santa Cruz para impedir el ingreso y salida de alimentos a los otros departamentos, los que nos dejaron a la población sin gasolina y sin gas a las industrias fueron los masistas. A mí me tienen sin cuidado sus amenazas de más procesos, porque ya llevo más de 20 en mi contra y con esta injusta detención domiciliaria solo por defender los derechos y libertades de los ciudadanos. Y si tengo que ir a la cárcel por estar al lado de mi pueblo defendiendo lo que por derecho nos corresponde, lo haré con orgullo.
-Es posible que después del conflicto busquen enviarlo a la cárcel, ¿lo lograría el Gobierno? Usted afrontaría ese riesgo?
-Como le digo, no tengo temor, porque nuestra lucha es justa, es pacífica, es legal y es lo que corresponde. Si por estar al lado de mi pueblo liderando la defensa de sus derechos y libertades me tienen que meter preso, que lo hagan Estoy aquí, con detención domiciliaria y custodia policial las 24 horas al día; y no pienso escapar. Pero exijo que el Gobierno deje de amedrentar a la ciudadanía y de detener a los jóvenes y mujeres que con valentía y de manera pacífica están las calles luchando por mejores días para sus familias, y por un futuro con esperanza para Bolivia”.
-¿Usted se considera un preso político del gobierno de Luis Arce?
-Soy un preso político más, uno más de las decenas del gobierno de Luis Arce. Contra mí, se han inventado un montón de absurdas patrañas. Hasta pusieron en duda mi profesión de médico. Me persiguen sin cesar; me quitaron mi empleo, tuve que cerrar mi consultorio por la persecución irracional de Impuestos Internos; amedrentaron a las clínicas privadas donde trabajaba; hasta que me encerraron en mi casa. Pero hay algo que nunca me van a quitar ni lograrán encerrar y es mi espíritu libre e indomable, mi espíritu cruceño. Porque nacimos libres y moriremos así. Me podrán encerrar, pero no me callarán jamás ni nunca dejaré de luchar por los derechos del pueblo boliviano”.
-Se ha convocado a un Cabildo para hoy domingo. ¿Se considerará la suspensión del paro? ¿Qué decisión o acciones cree usted que se puede proponer al Cabildo?
-El paro sigue firme porque ese es el mandato del pueblo cruceño, de ese pueblo que está en las calles, de sol a sol, con lluvia o frío. La gente ya va 23 días de lucha y no renunciará a sus derechos. En el Cabildo será el pueblo quien defina las nuevas medidas a seguir. El pueblo es sabio y estoy seguro que tomará las determinaciones correctas para nuestra lucha pacífica.
-El anuncio del Presidente Luis Arce de Censo el 23 de marzo de 2024 cambia el rumbo del paro y de las movilizaciones de Santa Cruz?
-No cambia nada. Un discurso no garantiza nada. Todo lo contrario, fortalece nuestra medida. Es necesario un decreto, en el que se establezcan fechas y los plazos, no solo para la realización de la gran encuesta sino también para la redistribución de recursos económicos a las regiones y escaños parlamentarios. Quién puede garantizar que Arce vaya a cumplir. Por el contrario, su mensaje de la medianoche del viernes fortaleció más a este pueblo pacífico y luchador, que no va a aceptar una mentira más, que se quiera una vez más llevar a la población boliviana a un sacrificio electoral en los próximos comicios, sin un Censo oportuno y transparente lo único que se garantiza es un nuevo fraude”.
-¿Si se levanta el paro sin conseguir censo en 2023, se considerará una victoria de Arce y una derrota del movimiento cruceño? ¿Qué habría ganado o perdido Santa Cruz?
-Estoy convencido que la victoria será nuestra, es más, ya lo es. Santa Cruz ya ganó, porque el Gobierno ahora habla de acortar los plazos, y el pueblo cruceño no aceptará otra situación.
-Hay quienes dicen que si se levanta el paro sin conseguir Censo en 2023, será difícil en el futuro recurrir a un paro. ¿Qué piensa?
-Santa Cruz a lo largo de su historia ha logrado todo su desarrollo en base a luchas pacíficas y a su esfuerzo y trabajo. El centralismo nunca le regaló nada a nuestro departamento. Conseguimos el 11% de las regalías petroleras que beneficiaron a toda Bolivia gracias a nuestras luchas cívicas de los años 50. Logramos que los alcaldes y gobernadores sean electos por voto popular. Recuperamos la democracia, conseguimos la autonomía y todo fue gracias al trabajo y sacrificio de éste noble pueblo. Esa es nuestra forma de ser y nunca renunciaremos a nuestro modelo cruceño”.
-¿Ha incidido esta vez en la efectividad del paro que otras regiones no se hayan sumado con la fuerza que se esperaba?
-Bolivia está unida; los demás departamentos están apoyando este pedido porque comprenden que es para el beneficio de todos. Sin embargo el Gobierno nacional ha presionado e incidido utilizando todo el aparato estatal para intentar aplacar las movilizaciones, con represión y mentiras. Pero el país está firme exigiendo un Censo oportuno”.
-Hay voces que en este conflicto han pedido federalismo o independencia. ¿Qué piensa?
-Nuestra lucha es por un Censo justo, oportuno y transparente. Solo queremos que nos cuenten. De forma técnica, científica, sin trampas ni engaños. Que el Censo sea transparente, justo y oportuno; y que además podamos tener los resultados oficiales con prontitud para su inmediata aplicación.
-Se dijo que el Gobierno ha tenido en este conflicto la intención de tomar o controlar Santa Cruz, por ser el mayor bastión opositor. ¿Qué piensa?
-El MAS nunca podrá doblegar a Santa Cruz, porque los cruceños somos hombres y mujeres libres que luchamos por nuestros derechos y por los de todos los bolivianos. Hay algo que tenemos claro, ningún Gobierno, ningún tirano logrará doblegar a Santa Cruz.
-¿Ha reflotado o no este conflicto la confrontación regional o racial en Bolivia?
-Eso no existe en Santa Cruz. Este es el departamento más inclusivo del país. Acá llegan hermanos bolivianos en busca de mejores días y de trabajo y son recibidos con los brazos abiertos. Esa es una mentira del masismo para intentar dividirnos y crear una polarización inexistente por sus afanes e intereses políticos.
-¿Cuál ha sido el momento más difícil de este conflicto para usted?
-Ver a mi pueblo reprimido, ver a mi gente siendo golpeada y gasificada sin misericordia. Este Gobierno es uno de los más crueles e insensibles de la historia.
-¿Cómo ha cambiado la detención domiciliaria su rutina, su vida laboral y familiar, institucional?
”Llevo más de un mes con detención domiciliaria. Me quitaron el derecho al trabajo, pero me mantengo firme con mis principios. Mi fe, mi familia y mi pueblo son mi soporte. Las reuniones ahora las tengo que hacer de manera virtual y cuando se puede en mi domicilio. Pudieron haberme quitado el derecho al trabajo digno y a locomoción, pero no de pensamiento ni de luchar por los derechos de mi pueblo. Continúo firme.
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