Una ley aprobada por la Cámara de Diputados permitirá que las personas se ausenten del trabajo para asistir a controles médicos de rutina durante embarazos. Dichas horas -máximo cuatro mensuales, salvo excepciones- no serán descontadas del salario y contabilizaran como tiempo trabajado.
El proyecto fue presentado por el diputado del Partido Colorado Sebastián Sanguinetti y establece que “todo trabajador o trabajadora, tanto en la actividad privada como en la pública, cualquiera fuere la naturaleza jurídica de su relación laboral o funcional, tendrá derecho a ausentarse de su lugar de trabajo, hasta cuatro horas al mes, a los efectos de acompañar a su cónyuge, concubino/a o pareja a los controles de embarazo y rutinas correspondientes”.
Es decir que el mismo beneficio aplicará para los cónyuges, concubinos o parejas de las personas embarazadas: “Cualquiera de las personas mencionadas en los artículos anteriores podrá acceder a dicho beneficio presentando certificado, el cual deberá lucir firma y sello del médico tratante y en el que se deberá establecer el tipo de control, semana de embarazo y fecha y hora del examen”.
Además, quien vaya a percibir el beneficio deberá avisarle al empleador con al menos dos días de anticipación. Sin embargo, esta persona no podrá “por ninguna circunstancia” negarle la posibilidad de ausentarse.
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Si el médico lo considera “necesario o recomendable”, las cuatro horas mensuales permitidas podrán ser elevdadas para la correcta realización de estudios y controles adicionales. De todas formas, no tendrán que ser específicadas “directa ni indirectamente las causas y/o patologías que ameriten la valoración”.
Según declaró Sanguinetti a Subrayado, “no todos los empleadores dan ese permiso y se dan un sin fin de situaciones que afectan a la trabajadora, como es el descuento de horas, la negativa a salir. Entonces esas trabajadores tienen que aplazar esos controles, con toda la gravedad que eso conlleva, o si no agendarse con especialistas que no son de su confianza, que no son con quienes se atendieron”.
El proyecto de ley busca continuar en la lucha contra la penalización de la maternidad en el trabajo que, en parte, ensancha la brecha de género. Aún resta que sea votado en la Cámara de Senadores para que termine de ser aprobado.
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