Varias decenas de personas han protestado este lunes en el Consejo Popular de Altamira, en Santiago de Cuba, contra los continuos apagones y la difícil situación económica que afronta la ciudad, según ha informado ‘14ymedio’.
La manifestación ha provocado rápidamente la presencia de las fuerzas represivas del régimen, que han intentado despejar la zona mientras los manifestantes protestaban contra la dictadura cubana.
“Es un abuso lo que tienen con nosotros. Toda la madrugada sin luz y se volvió a ir la corriente a las 11 de la mañana”, ha explicado al citado diario la activista Aurora Sancho. “Todo empezó con un vecino que comenzó a hacer ruido con un hierro y a quejarse. Poco a poco se le fueron sumando otros. Aquí la gente no pudo más hoy”, ha matizado.
Entre las consignas recitadas por los manifestantes, las más repetidas han sido críticas contra el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, y reclamos para que se reestableciera la corriente.
Mientras tanto, las autoridades cubanas tratan de solucionar los apagones eléctricos y han llamado a la calma a los ciudadanos.
“Sabemos del las consecuencias y del estado de disgusto que generan estos continuos y largos apagones eléctricos, pero se está trabajando sin descansar. Los circuitos que casi no sufren afectaciones están conectados a circuitos de prioridad como es el caso de hospitales, fábricas e industrias que garantizan la elaboración de alimentos y servicios de prioridad”, ha apuntado un trabajador del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), según ‘Ciber Cuba’.
En los últimos meses han sido frecuentes las protestas motivadas por prolongados apagones en localidades de toda la isla. Además, la capital cubana, La Habana, también comenzará a sufrir cortes de electricidad a partir de principios de agosto, a medida que se agudiza la crisis energética del país.
Las protestas llevadas a cabo por los continuos apagones generan preocupación en el seno del Gobierno cubano, pues el año pasado tuvieron lugar las protestas más grandes registradas desde la revolución cubana.
Las protestas contra la dictadura cubana continúan en aumento en la isla, pese a la represión de las fuerzas del régimen castrista. En julio se registraron 263 manifestaciones, dos de ella multitudinarias, donde la gente salió a las calles para exigir mejores condiciones de vida, en un país que atraviesa una grave crisis alimentario, de salud, energética e inflacionaria. En solo el primer semestre del año se contabilizaron más de 1.700 protestas.
“La movilización de las fuerzas de seguridad en toda Cuba para evitar demostraciones públicas contra el gobierno en el primer aniversario de aquella histórica revuelta no consiguió impedir que en julio se produjeran 263, incluyendo estos abiertos desafíos callejeros. De ellas, las motivadas por problemas económicos y sociales superaron el 71 % (188) mientras que las de origen civil o político alcanzaron el 28 % (75). El desequilibrio entre ambas refleja la crisis general que en Cuba ha convertido la llamada vida cotidiana en muerte cotidiana”, señala un nuevo informe del Observatorio Cubano de Conflictos (OCC).
Según el OCC, la protestas contra la dictadura cubana tienen un fuerte componente político. En solo un mes (de junio a julio) hubo un incremento significativo de manifestaciones, de 28 pasaron a 85.
(Con información de Europa Press)
SEGUIR LEYENDO: