Denunciaron reiterados episodios de violencia entre dos estudiantes en escuela de Hotelería uruguaya. Al parecer se trataría de una estudiante menor que abusa constantemente de otra, que asegura no haber recibido apoyo por parte de las autoridades estudiantiles.
El caso ocurre en la escuela técnica de Hotelería N°2, ubicada en el departamento de Montevideo. Según la denunciante, los abusos comenzaron a mediados del año pasado, informó El País. Al comunicar a las autoridades del centro sobre la situación, no recibió ayuda.
Los hechos violentos habrían continuado por varios meses hasta que, durante un evento que la institución organizó en el mes de mayo, la menor de edad amenazó a la otra con atacarla luego de la actividad. Ante esa advertencia fue que la estudiante decidió realizar la primera denuncia.
El reclamo fue presentado primero en una seccional y se refería al hecho en cuestión. Sin embargo, tras recomendación de los abogados, fue extendido a la administración general de la Universidad del Trabajo del Uruguay (UTU) y a la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP).
Desde la UTU aseguran que el episodio fue abordado y que la agresora recibió sanciones. No obstante, la directora Paula Batalla niega que las agresiones hayan sido recurrentes como afirma la denunciante. “No se entiende por qué se hace la denuncia en la Justicia y no se habla con las autoridades primero”, dijo a El País.
La madre de la joven, por su parte, afirma que los hechos fueron comunicados y que, incluso en conocimiento de la amenaza, no se realizó nada al respecto. Fue recién cuando se realizó la denuncia que la directora llamó a la menor de edad, señaló la madre.
Según Batalla, el llamado fue porque los padres de la estudiante denunciada llamaron para entender qué había pasado. Luego, la directora conversó con la estudiante en persona y recibió malos tratos, motivo que llevó a sancionarla. Es decir, la sanción a la presunta agresora no fue por la denuncia, sino por la actitud que tuvo frente a Batalla.
En esta coyuntura se reunió un Consejo Asesor Pedagógico (CAP), en el que participaron estudiantes —entre ellos la denunciante—, docentes y Dirección. Según la joven, solo “se dedicaron a hostigarla y defender a la Dirección”.
La directora asegura que “no pasaron 48 horas hábiles desde la situación de conflicto y “así es muy difícil exigir respuestas”. Además, recalcó la importancia de proteger a la denunciada y escuchar ambas partes.
Según la denunciante, la comunicación entre la institución y su familia fue en malos términos y llevó a que se realizara otra denuncia: esta vez hacia los funcionarios de la escuela de hotelería. La madre de la joven denunciante espera que se destituyan a las autoridades en cuestión.
El panorama
Durante los últimos meses han sido reiterados los casos de violencia en centros educativos. En Junio un conflicto en una UTU terminó con 9 imputados —entre padres y alumnos— y una persecución policial terminó dentro de un centro educativo en el que los docentes intervinieron por la violencia ejecutada.
Este mes, la UTU del Cerro fue ocupada por los docentes luego de que un alumno golpeara a una docente mientras peleaba con otro. Según el director general de UTU, Juan Pereyra, “son casos importados, aunque se les están dando demasiada trascendencia” y “nada tienen que ver con carencias de la institución”, publicó El País.
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