Lucía Bentancur tenía 35 años cuando fue asesinada en su casa el 4 de setiembre de 2019 en un pueblo del departamento de Canelones. Su cuerpo fue encontrado por una vecina en el fondo de la vivienda con 49 puñaladas. Dos de los imputados fueron condenados como cómplices y en agosto vence el tiempo para la audiencia acusatoria del presunto autor del homicidio y un cómplice o coautor.
Según la investigación, el homicidio fue provocado por “un arma blanca corto punzante” entre las 20:30 y las 21:30 de ese día. Tres de los cuatro implicados entraron a su casa y la encontraron en la cocina; a pesar de que no ofreció resistencia, la habrían ultimado de varias puñaladas y dejado el cuerpo en su consultorio. Luego, tomaron el dinero y se retiraron. Como solo fueron a robarle el monto de dinero, dejaron su celular y una laptop porque “esos artefactos serían fácilmente localizables”, dijo uno de los imputados.
Al no conseguir comunicarse con su hija, la madre de Bentancur llamó a una vecina del pueblo para que fuera a la casa y viera si estaba todo bien. Esta vecina llegó y vio que la puerta lateral estaba abierta, pero nadie contestaba. Entonces, junto a un amigo, ingresó a la vivienda y se encontró con el cuerpo de la víctima.
Tras el homicidio hubo distintas movilizaciones que se mantienen hasta el día de hoy, desde un alerta feminista en el Centro de Montevideo hasta una concentración reclamando justicia en su pueblo.
Un hombre que había dejado el pueblo el día del asesinato fue detenido seis meses después. Un año más tarde se detuvo a otras personas. Se presume que uno es el autor y otros tres son cómplices. Además, otro aspecto llamativo fue que tres de los cuatro imputados vivían en el pueblo y uno de ellos había sido paciente de Betancur, que era odontóloga y atendía en su casa.
Se pudo confirmar que la asesinaron para robarle 30.000 pesos (unos 760 dolares) que ella tenía en el consultorio, ubicado en su propia casa.
Dos años y tres meses después de su homicidio, a través de un proceso simplificado, dos de los imputados fueron condenados como cómplices de homicidio especialmente agravado a diez años de prisión. Las otras dos personas aguardan el juicio oral y para el autor se espera que Fiscalía pida la pena máxima prevista en el Código Penal uruguayo: 30 años, según informó La Diaria.
La fiscal Andrea Mastroianni, que asumió el caso en diciembre, dijo a El País que la audiencia acusatoria para los otros dos imputados vencerá el 28 de agosto. “Serían el presunto autor material y un cómplice o coautor”, explicó. Uno de ellos está en prisión preventiva y el otro se encuentra internado en el Hospital Vilardebó (hospital psiquiátrico) por considerarse “inimputable”.
Uno de los aspectos que agrega complejidad al caso es que los imputados sean del mismo pueblo de sólo 600 habitantes. “Cuando fueron a hacer la reconstrucción del caso, los criminales le dijeron a la fiscal que les daba vergüenza hacer la reconstrucción porque era en el pueblo y había gente mirándolos”, dijo el padre de la víctima a El País. Según se pudo saber, el presunto autor vivía a una cuadra de Bentancur y el resto a cuatro.
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