La hija de Xuxa perdió 230 mil dólares en una estafa con criptomonedas. Sasha Meneghel, de 23 años; y su esposo, el cantante de gospel João Figueiredo, sufrieron la pérdida de 1,2 millones de reales (unos 230 mil dólares) al invertir en una empresa llamada “Monedas de Alquiler”, de Francis da Silva, en Curitiba.
El empresario alquiló criptomonedas a inversores y prometió pagar intereses del 0,5% al 5% mensual. También garantizaba la devolución de los activos del cliente al final de un año de contrato.
Según informó el periódico O Globo, la hija de Xuxa y su marido conocieron a Francis da Silva en una iglesia evangélica de San Pablo. Además de la pareja, otros pastores y fieles fueron víctimas del “Jeque” -así lo apodaron los medios brasileños- de las criptomonedas.
El empresario es sospechoso de un delito contra el sistema financiero nacional y está en la mira de la Policía Federal.
La inversión inicial de la hija de Xuxa y su esposo fue de 50 mil reales (unos 9.600 dólares). Sin embargo, la pareja firmó dos contratos más que superaron el valor de 1 millón de reales (192.000 dólares) y se calcula que en total invirtieron USD 230.000.
En abril, ambos presentaron una demanda contra Francis ante el Tribunal de Curitiba por daños morales y materiales.
O Globo dio a conocer este jueves un video en el que se veía a la hija de Xuxa, su marido y el “Jeque” de las criptomonedas bailando en un lujoso yate.
En las imágenes, grabadas por uno de los invitados en la costa de Santa Catarina, Francis da Silva, propietario de la embarcación, aparece con sus anteojos colgando de su remera de malla. Mientras la cámara recorre la escena, capta a Sasha Meneghel, con una blusa blanca, agitando los brazos frente a su esposo, el cantante João Figueiredo.
El periódico consigna que el video, en que se observa dos cubos con botellas de vino, fue filmado en el momento en que la amistad entre la pareja y Francis “llegaba a su punto máximo”.
Meses antes, el cantante había grabado el video musical “Nasce o Sol” en el estudio de Sounder Records, sello entonces vinculado al grupo InterAG, propiedad de Franscisley Valdevino da Silva, conocido como Francis da Silva, cuya suntuosa vida le valió él el apodo de “Jeque”, detalló el medio.
La cantidad de inversionistas en el esquema de Francis es incierta al día de hoy. Hay estimaciones de alrededor de 40.000 y la hija de Xuxa, junto a su marido, están entre ellos.
En la denuncia ante la justicia, la pareja alegó que se montó una “sofisticada cadena de subterfugios para constituir una pirámide financiera”.
En el abanico de empresas abiertas por Francis, Rental Coins fue la punta de lanza del negocio de las criptomonedas. La Policía Federal brasileña sospecha que, detrás de la renta de las criptomonedas que llegaron a pagar un interés del 13,5% mensual, el empresario montó efectivamente una pirámide financiera.
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