El vicepresidente de Paraguay, Hugo Velázquez, habló del caso del avión venezolano-iraní en su paso por Paraguay en mayo pasado, 20 días antes de ser retenido en Buenos Aires. En diálogo con Infobae, acusó al ex mandatario Horacio Cartes de hacer negocios con supuestos terroristas y se refirió a las fotos que lo vinculan con militantes de Hezbollah.
“Hay varias hipótesis (sobre el arribo del avión) y eso ya está en manos de los organismos de seguridad e investigación que deben descubrir lo que pasó realmente. Lo cierto y concreto es que este avión con tripulación de supuestos terroristas, ingresó al Paraguay para llevar cigarrillos de Tabesa, propiedad de Horacio Cartes”, manifestó.
Velázquez también dijo que si la Comisión de Lavado que investiga el caso lo llama a declarar, asistirá a la cita. “Como una persona que cree firmemente en la democracia y, como vicepresidente de la República que soy, debo concurrir ante un órgano o un Poder del Estado como lo es el Congreso, si es que me convocan”.
Sin embargo, cuestionó: “Pero aquí va la pregunta: ¿Soy la persona indicada para ese llamado? Y la respuesta es sencilla: no. Aquí deben ser llamados los involucrados directos que hicieron negocios con estos supuestos terroristas, empezando por Horacio Cartes. Ellos deben dar explicaciones respecto a lo ocurrido con el avión iraní”.
Consultado sobre los presuntos vínculos con Hezbollah y un viaje a El Líbano que realizó hace unos años, antes de ser vicepresidente, el compañero de Mario Abdo respondió: “No tuve, no tengo, ni nunca tendré vínculo alguno con grupos o facciones que no respeten los derechos humanos. El motivo del viaje a El Líbano fue una visita oficial en el año 2015, a raíz de una invitación del gobierno y el parlamento libanés a la Cámara de Diputados. En ese entonces, era presidente de dicha cámara y me acompañaron ocho legisladores de diversos partidos”.
Y siguió: “Tratan los medios de Cartes endilgarme nexos y conexiones inexistentes mediante fotos casuales, con personas a quienes siquiera conozco. Al margen de ello, siempre he colaborado, desde mi posición, con las agencias de seguridad del gobierno americano, y voy a poner un solo caso como ejemplo: el de este ciudadano Kassen Hijazi, respecto a quien el senador Enrique Riera mintió, diciendo que nosotros archivamos el caso y, muy por el contrario, en mi época de fiscal hemos investigado, acusado y llevado a juicio oral y público a Hijazi con pruebas abrumadoras sobre su participación en hechos punibles diversos. Pero llamativamente fue absuelto por el Poder Judicial -incluso se llevó el caso a la Corte Suprema-, y estos extremos son comprobables con mucha facilidad, con el simple acto de revisar el expediente judicial. Incluso tengo copias de la acusación que hicimos en su momento, que puedo exhibirlas. Pero se hizo justicia al fin porque este ciudadano ahora ya fue extraditado a los Estados Unidos. El tiempo siempre nos da la razón”.
Velázquez luego se refirió al tiempo que estuvo el avión en territorio paraguayo. En diálogo con este medio, el senador Riera había asegurado que la nave tenía autorización para estar ocho horas y se quedó tres días en el país. Al respecto, el vicepresidente manifestó: “Tengo esa misma información respecto al tiempo solicitado por la aerolínea para la operación de la carga de los cigarrillos de Tabesa, y el que finalmente permaneció en el Paraguay. ¿Por qué quedaron más?. Esa pregunta se la deben hacer a los que contrataron el avión. Al margen de eso, lo acontecido con este avión está siendo objeto de investigación por los órganos de seguridad del Gobierno; y dio como consecuencia que la Secretaría Nacional Anticorrupción, por instrucciones del presidente Mario Abdo Benítez, formulara una denuncia ante el Ministerio Público, y espero que los resultados sean alcanzados lo más rápido posible porque se perdió un tiempo valioso ya que la Fiscalía lo debió investigar de oficio al tomar estado público este tema”.
“Otro punto no menos importante fue que la Secretaría Nacional de Inteligencia del Paraguay (SNI), a cargo del Doctor Esteban Aquino, luego de realizar un análisis de lo ocurrido e intercambio de datos con otras agencias continentales, tomó la iniciativa de formular las alertas respectivas a los países de la región, conjuntamente con el ministro del Interior, Federico González, lo que les valió incluso un comunicado de la Embajada de Irán en términos no muy amistosos, solo por hacer bien su trabajo”, subrayó.
Por último, Velázquez se defendió de los sectores que, según él, buscan vincularlo con grupos que no respetan los derechos humanos: “No lo van a lograr porque no los tengo (esos vínculos). El hecho de haber salido en fotos con personas a quienes ni siquiera conozco, en el marco de una visita oficial a un país con quienes tenemos relaciones diplomáticas y comerciales, no me hace parte de nada. Esto no resiste luego el menor análisis serio y sirve para el morbo político, y más que nada, para tratar de desviar la atención de la responsabilidad que tiene la empresa ligada al grupo Cartes con los supuestos terroristas, nexo comprobado por las agencias de seguridad nacional e internacional que están investigando el hecho, que es muy grave para la seguridad nacional y del continente”.
El jueves pasado, Paraguay confirmó que un piloto iraní del avión retenido en Argentina está vinculado con terroristas e investiga al resto de la tripulación. En conversación con Infobae, el ministro de la Secretaría Nacional Anticorrupción, René Fernández, narró que “las sospechas nacen a partir de la investigación de inteligencia que se hizo sobre las nacionalidades y vinculaciones de la tripulación del avión”.
Se trata del piloto del avión retenido en Ezeiza, el iraní Gholamreza Ghasemi, quien tiene relación con la Fuerza Quds, una división de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán. La secretaría de inteligencia de Paraguay alertó que los demás iraníes seguirían siendo empleados de la aerolínea Qeshm Fars Air, sobre la cual pesan sanciones del Departamento del Tesoro de Estados Unidos por ser propiedad de Mahan Air, también sancionada por Washington.
El jefe anticorrupción paraguayo indicó que los 18 tripulantes del avión -11 venezolanos y 7 iraníes- “estuvieron durante tres días calendario en Paraguay” y “se alojaron en el hotel Dazzler de Ciudad del Este” el pasado mes de mayo.
En esa línea, la Embajada de Israel en Paraguay aseguró que los tripulantes del avión trafican armas para Hezbollah. “En el avión que aterrizó en Argentina, se encontraban iraníes involucrados de forma directa en el tráfico de armas a Siria y a la organización terrorista Hezbollah de El Líbano. Incluso, el capitán del avión es un alto ejecutivo de la empresa aérea iraní Qeshm Fars Air”, denunció la sede diplomática la semana pasada a través de un comunicado.
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