Ecuador cumple cinco días con protestas en contra del gobierno de Guillermo Lasso. Las manifestaciones son lideradas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) que demanda una agenda de 10 peticiones que contempla la reducción de los precios de la gasolina, la seguridad ciudadana, entre otros. Al sector indígena también se han unido otras organizaciones de estudiantes, trabajadores, transportistas y feministas que han plegado también al paro.
Las jornadas de movilización iniciaron con cierres de ruta en varias carreteras del país. Sin embargo, la ciudad más afectada por las vías deshabilitadas es Quito. Incluso el ministro del Interior, Patricio Carrillo, aseguró que la capital ecuatoriana está sitiada por los manifestantes.
El último jueves, el presidente Lasso apareció en un video de 2 minutos donde llamó al diálogo a los sectores que se han sumado a las manifestaciones. Además dijo que la ONU, la iglesia católica y las universidades del país han mostrado su intención de ser mediadores en caso de que el diálogo sucediera. Lasso sentenció que la Policía utilizará el uso progresivo de la fuerza para evitar actos vandálicos.
El presidente de la Conaie, Leonidas Iza, respondió al mensaje de Guillermo Lasso y aseguró que la “lucha se mantiene de manera indefinida hasta que el Gobierno Nacional atienda las demandas del movimiento indígena”. Además, Iza sostuvo que no asistirán a ningún diálogo que no tenga resultados.
Iza dijo que en 48 horas las comunidades indígenas organizarán la logística necesaria para llegar a Quito y participar en las movilizaciones en esa ciudad. Además, la Conaie convocará a una asamblea ampliada para todas las organizaciones que se han unido a la medida de hecho de la Conaie. “Si usted no está dispuesto a sacar este país, entonces que sean los colectivos y las organizaciones quienes lo saquen”, dijo el líder indígena.
Vandalismo y represión
También durante los días de protestas se han registrado intentos de saqueo, quema de patrulleros y destrucción de espacios públicos en el Centro Histórico de Quito. La noche y madrugada del último viernes, se registró el cierre de la vía que conduce al aeropuerto de Quito.
En su mensaje a la nación, Lasso aseguró que no hay denuncias por excesos de la fuerza pública, pero sí vandalismo. Sin embargo, sí se ha registrado represión policial. Por ejemplo, al menos cinco policías golpearon a un periodista que cubría la detención del presidente de la Conaie, Leonidas Iza, en Latacunga. Iza fue arrestado la noche del martes, pero fue puesto en libertad con medidas cautelares. Es acusado por paralización de servicios públicos.
Sobre el vandalismo, Iza dijo que no se puede convertir la lucha en un acto delictivo o de violencia y llamó a que las estructuras organizativas controlen esos actos violentos.
El sector florícola del Ecuador, Expoflores, denunció que las manifestaciones les han ocasionado pérdidas millonarias, además de que han existido actos de violencia y extorsión en su contra.
En una comunicación con Infobae, desde Expoflores señalaron que han perdido USD 2.5 millones diarios porque las cargas no pueden ser transportadas al aeropuerto. También han evidenciado intentos de extorsión por parte de los manifestantes a los trabajadores de las fincas, que les exigían salir a las marchas. Expoflores asegura que “circularon salvoconductos en los que obligaban a pagar entre USD 100 a USD 150 por un salvoconducto. Esta es una práctica que no podemos tolerar y que hasta ahora se sigue dando, pese a que lo ya hemos denunciado en reiteradas ocasiones”, aseguraron.
Las intervenciones de los manifestantes que provocaron la paralización de 10 pozos petroleros en la Amazonía han dejado pérdidas significativas para el Estado. Según el Ministerio de Energía y Minas, durante las protestas se dejaron de producir más de 12.100 barriles. La pérdida económica asciende a los USD 1′084.564.
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