El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, llegó alrededor de las 11h30 (hora local) al Congreso de Ecuador para pronunciar su discurso de rendición de cuentas sobre su primer año de gestión ante el Congreso ecuatoriano. La ceremonia que coincide con el Bicentenario de la Batalla de Pichincha, una gesta que marcó el inicio de las revoluciones independentistas en la región. Después de un año en la Presidencia, el mandatario aseguró que la principal obra de su administración fue salvar las vidas de los ecuatorianos con la vacunación anticovid y poner en orden las finanzas públicas: “después de un año que ha servido para estabilizarnos sanitaria y económicamente, lo peor de la tormenta ya ha pasado”, aseguró.
Lasso llegó a la Asamblea Nacional acompañado por su esposa, María de Lourdes Alcívar, y fue recibido por la presidenta del congreso, la legisladora Guadalupe Llori, además de recibir los honores protocolarios. A su ingreso al pleno, Lasso fue recibido con aplausos y sus allegados gritaron “Bravo, presidente”. Luego del ingreso y honores al Estandarte Nacional, en el congreso se escuchó el Himno Nacional y se realizó un Toque de silencio en honor a los héroes de la gesta libertaria del 24 de Mayo de 1822.
La primera en intervenir fue Guadalupe Llori. La presidenta de la Asamblea, que es investigada por una comisión del Legislativo que busca su destitución, dijo que “la crisis política en la Asamblea Nacional es responsabilidad de los 137 asambleístas, varios de ellos incidentan sesiones, no dan quórum y retrasan el trabajo de la Asamblea Nacional. A ellos debemos evaluar e investigar”. Además, insistió en que se deben tender diálogos entre los partidos políticos e invitó a Lasso a “conciliar, a entablar mesas de diálogo y entablar un trabajo conjunto. Lo invito a trabajar de la mano de esta Asamblea Nacional”.
En el pleno de la Asamblea Nacional hay alrededor de 500 invitados, entre los que constan los legisladores que escucharán la rendición de cuentas de Lasso. Sin embargo, los integrantes de la bancada correista no se presentaron en la ceremonia. Se prevé que el discurso del presidente tome alrededor de dos horas y media.
Fue en ese mismo lugar donde hace un año, Guillermo Lasso asumía el mandato. Doce meses después de aquel evento, el presidente del Ecuador se enfrenta a la inseguridad en las calles y a la escalada de violencia en las prisiones, al mismo tiempo que carece de una mayoría en el legisladores necesarios en el Congreso para impulsar su plan de gobierno.
Al iniciar su discurso, Guillermo Lasso hizo referencia a la Batalla de Pichincha y dijo que, cuando asumió la Presidencia, “se renovaba la idea de que en libertad y democracia se puede construir un país más próspero, pero también más equitativo, solidario y justo con todos. Esa fue la idea que se cristalizó hace 200 años en el Pichincha”.
El presidente de Ecuador resaltó hubo decisiones que “tal vez no se explicaron con suficiencia”. Reconoció que esa falta de comunicación “ha sido uno de mis mayores aprendizajes en este primer año, y un desafío para el que viene”.
De acuerdo con Lasso, su administración, en un año, ha “construido el puente hacia un nuevo Ecuador de libertad, oportunidades, y progreso”. Los primeros minutos del informe a la Nación, Lasso los dedicó a recordar el exitoso plan de vacunación. Lo cual calificó como “una verdadera hazaña que los libros recordarán precisamente por el heroico esfuerzo ciudadano – patriótico – que hoy nos congrega”.
Lasso volvió a referirse a los conflictos entre políticos y en su discurso dijo: “Las disputas entre políticos no merecen ninguna importancia”. Sin embargo, Guillermo Lasso ha agitado el avispero de la política nacional en varias ocasiones, sobre todo cuando mencionó que el ex presidente Rafael Correa, el ex alcalde Jaime Nebot y el líder indígena Leonidas Iza, conspiran en su contra. También, Lasso ha calificado a Correa y a Nebot como los causantes de los altos índices de inseguridad del país.
Según Lasso, la primer obra en el gobierno ha sido “salvar la vida de 18 millones de ecuatorianos” con la vacunación anticovid. Para ello, el Ecuador invirtió cerca de USD 1.000 millones para adquirir vacunas y los implementos necesarios para la vacunación masiva. Destacó que Ecuador es uno de los primeros países que retiró la obligatoriedad del uso de cubrebocas en espacios abiertos y cerrados.
Al referirse a la salud, Lasso reconoció el descontento de los ciudadanos por la falta de insumos médicos y medicinas en los hospitales públicos, pero anunció que “tan solo en infraestructura y equipamiento este año invertiremos USD 113 millones para inaugurar 4 hospitales, y mejorar, adecentar o repotenciar 37 hospitales más y 23 centros de salud”. En Guayaquil, por ejemplo, un hospital infantil tuvo que suspender las cirugías para los menores porque no había los implementos para las operaciones, como hilo para suturar.
Aunque al inicio de su mandato, al impulsar el exitoso plan de vacunación anticovid, Lasso ganó cierto capital político, este se ha esfumado. Según tres encuestadoras, el mandatario cumple su primer año con una aceptación que bordea el 30 %, lo que significa que 7 de cada 10 ecuatorianos rechaza su gestión como presidente. Además de la poca aceptación ciudadana, Lasso se enfrenta a sus opositores que impulsan una revocatoria del mandato.
Lasso también se refirió al sanamiento de las cuentas fiscales. El presidente describió que, paralelamente a la vacunación, el frente económico llevaba a cabo “una operación igualmente delicada para salvarnos del inminente colapso al que nos conducían las cifras económicas heredadas de regímenes anteriores”. El presidente aseguró que “la economía ecuatoriana ya inspira confianza en el mundo y en actores económicos generadores de inversión y empleo”. El mandatario mencionó que Ecuador es el segundo país con la inflación más baja en América Latina.
Sobre la creación de empleos, una de las principales promesas del ahora presidente, Lasso mencionó que “la tasa de desempleo juvenil se ha reducido de 13,6% en mayo de 2021 a 8,8% al primer trimestre del 2022, es decir cerca de 110 mil jóvenes encontraron un empleo”.
Durante el informe, el presidente ecuatoriano habló sobre la educación en el país. Lasso destacó que un logro de su gobierno fue regresar a clases presenciales con el 100% de aforo en todo el país, luego de dos años de pandemia, siguiendo las recomendaciones de organismos internacionales sobre la Unicef. Lasso dijo que, mientras él pronuncia su discurso hay “4 millones y medio de niños y adolescentes están en sus aulas en este preciso instante, estudiando y forjando su futuro”. Además, dijo que en un año el gobierno reabrió más de 100 escuelas rurales y prometió que, al finalizar su gestión alcanzaremos se reabrirán 1.000 escuelas más.
Lasso aseguró que “este ha sido el primer Gobierno en la historia del Ecuador que se ha tomado en serio la gravísima amenaza de la desnutrición crónica infantil”. De acuerdo con las cifras entregadas por Lasso, más de 300.000 niños se han beneficiado con atención médica, vacunas, y las vitaminas que necesitan para prevenir la desnutrición.
El presidente prometió que pronto entregarán un bono a las 25.000 mujeres gestantes para que durante los mil primeros días del bebé puedan atenderlo con lo necesario. Este bono cubrirá la vida del niño desde el embarazo hasta los dos años de edad.
Sobre los indicadores de pobreza. Lasso aseguró que, en su administración, se redujo la tasa de pobreza extrema por ingresos, de 15,4% al 10,5% a diciembre del año pasado. Otra de las promesas que anunció el mandatario es que al finalizar su gestión, en el 2025, habrá intervenido directamente en la construcción o mejoramiento de más de 450.000 viviendas, “que por fin contarán con servicios básicos, espacios de recreación, y títulos de propiedad”.
De acuerdo con Lasso: “Sólo en este año hemos logrado reducir el déficit habitacional de vivienda del 58% a poco más del 54%, y estamos en camino a cumplir con una reducción de diez puntos en la totalidad de nuestro periodo”.
Uno de los cuestionamientos en contra del presidente Lasso ha sido su falta de enfoque de género. Sin embargo, en su discurso el jefe de Estado dijo que su administración creó la Subsecretaría de Diversidades, para garantizar los derechos de la comunidad LGBTIQ+. A pesar de que esa fue una de las primeras acciones que tomó la Secretaría de Derechos Humanos, hasta ahora no se conoce cuál será el presupuesto que esa subsecretaría tendrá para ejecutar las políticas públicas necesarias para favorecer a esa comunidad.
Lasso destacó que su administración logró reducir la tasa de femicidios por cada 100.000 mujeres, de 0,87 a 0,75. No obstante, los grupos feministas que monitorean estas muertas violentas han sostenido en varias ocasiones que existe un subregistro, distinto al oficial.
En materia de la prevención de la violencia en contra de la mujer, Lasso aseguró que aumentó el presupuesto a USD 24 millones para los cuatro años de Gobierno y resaltó la creación de los Centros Violeta, un proyecto que realizó su ex secretaria de Derechos Humanos, Bernarda Ordóñez, que renunció a su cargo por diferencias con la visión de Derechos Humanos del gobierno de Lasso.
En cuanto a producción e inversiones. Lasso indicó que su administración eliminó 200 impuestos “que asfixiaban la creación de empleo” y resaltó que este año de gobierno “se han concretado USD 5.000 millones en contratos de inversión privada”.
Además, Lasso indicó que el gran objetivo de su gobierno es duplicar la producción de petróleo hasta alcanzar un millón de barriles por día. Esta política petrolera es la que preocupa a los activistas medioambientales y líderes indígenas amazónicos, pues implicaría que zonas protegidas de la amazonía se conviertan en bloques petroleros. El presidente resaltó que “luego de 14 años estamos vendiendo petróleo directamente a las refinerías internacionales, quitando de en medio a los intermediarios que se quedaban con buena parte de los ingresos”.
El gobierno de Guillermo Lasso ha enfrentado altos índices de violencia en la calles y una crisis carcelaria sin precedentes. En su discurso, el presidente dijo que “en el 2021 se desarticularon más de 1.350 bandas. Se incautaron más de 7.500 armas y 231 toneladas de droga en un año de Gobierno, un récord histórico para el Ecuador. En lo que va del 2022 ya son 85 toneladas, el triple de lo incautado el año anterior en el mismo período”. La versión oficial del gobierno es que la escalada de violencia es la respuesta de las mafias del narcotráfico a la lucha que ha emprendido su administración en contra del crimen organizado.
Lasso anunció que hasta el 2025, su gobierno invertirá USD 1.200 millones para fortalecer a la Policía Nacional: “Durante ese lapso llegarán a las calles 30 mil nuevos policías, con lo cual finalmente cubriremos el déficit de efectivos que este Gobierno heredó del anterior”.
Al referirse a las cárceles, Lasso dijo que su administración tuvo que crear “por primera vez en la historia del país– una verdadera política pública de rehabilitación social, con enfoque en derechos humanos”. El último informe de la CIDH sobre la situación de las prisiones en Ecuador demandó que el Estado tome control de las cárceles y que trabaje en políticas menos punitivas y se enfoque en la prevención del delito y la rehabilitación social.
Para el control de las cárceles, Lasso ofreció que este 2022, 1.400 agentes de seguridad que se sumarán a los 1.600 actuales y que se creará la primera Escuela de Formación Penitenciaria, que capacitará al nuevo Cuerpo de Seguridad y Vigilancia. Actualmente, un solo guía penitenciarios puede tener bajo su cargo a más de 100 presos. Los guías no tienen armamento.
En el sistema carcelario de Ecuador hay un excedente de más de 10.000 presos. Sobre el hacinamiento, Lasso dijo que este era producto de la corrupción.
“Enfrentaremos a los narcotraficantes, al crimen organizado, a la minería ilegal, a los traficantes de armas y personas”, dijo el Presidente, al mismo tiempo que felicitó a la Policía Nacional y a las Fuerzas Armadas por su trabajo para preservar la seguridad.
Durante el primer año de gobierno de Lasso, hubo cinco masacres carcelarias donde alrededor de 380 reos fueron asesinados brutalmente.
Con pocos legisladores en el Congreso y sin operadores políticos capaces de tender puentes entre el Ejecutivo y el Legislativo, Lasso no ha podido impulsar su plan de gobierno.
En su rendición de cuentas, el presidente se refirió a la unidad democrática y dijo que hay partidos que pretenden gobernar por su cuenta: “Probablemente algunas organizaciones quieran tener todo el poder para gobernar solas. Probablemente quisieran llegar y deshacer todo el trabajo de gobiernos anteriores, y así refundar una vez más el país”. Esa última frase se refiere al correismo, pues “refundar la patria” es uno de los eslóganes utilizados por el expresidente Rafael Correa.
Sobre la posibilidad de aplicar la muerte cruzada –como se conoce a la disolución anticipada de poderes–, Lasso dijo que esa opción siempre estará sobre la mesa, pero que “el Ecuador no necesita más elecciones. Lo que el Ecuador necesita es ser gobernado”.
El mandatario llamó a los asambleístas a crear consensos porque “un pueblo sólo construye su futuro a través de grandes consensos mayoritarios que hacen estable nuestra convivencia, y que amplían oportunidades”.
Como logros de su gestión, el presidente Lasso habló sobre el turismo y el medioambiente. El jefe de Estado se refirió a la creación de la reserva marina Hermandad, en Galápagos. La nueva reserva marina de 60.000 kilómetros cuadrados, provocó que la protección del archipiélago supere los 190.000 kilómetros cuadrados. Sin embargo, Lasso ha sido criticado por sus políticas extractivas que afectan a la Amazonía. Estos cuestionamientos lo han mostrado incoherente con sus anuncios sobre la protección medioambiental.
A pesar de lo anterior, Lasso prometió que para el 2025, “el 22% de todo nuestro territorio corresponderá a áreas de conservación” y que “el 20% de todos los residuos y desechos sean recuperables”. Además, Lasso anunció que su administración creará “el Biocorredor más grande de toda América Latina” en la Amazonía, para esto se invertirán entre USD 500 y 1000 millones.
Al hablar del turismo, Lasso resaltó que los tres primeros feriados del 2022 dejaron más de USD 170 millones de gasto turístico. Sobre los arribos internacionales, el presidente dijo que “Ecuador ha recuperado al 100% los arribos de nuestro principal mercado emisor de viajeros: Estados Unidos”.
En cuanto al deporte, el mandatario destacó que su gobierno ha invertido en beneficio de más de 500 deportistas de alto rendimiento y que ha entregado “la cifra récord de USD 70 millones para este ciclo olímpico y paralímpico que culminará en los juegos de París 2024″.
El informe a la Nación es la segunda actividad oficial de la agenda de Lasso. La mañana de este 24 de mayo, el presidente acudió a la Cima de la Libertad, en Quito, para participar en una ceremonia castrense en honor a los 200 años de la Batalla de Pichincha. Luego del discurso en el Congreso, a las 17h45, el mandatario colocará una ofrenda floral en el mausoleo del Mariscal Antonio José de Sucre, prócer de la emancipación hispanoamericana.
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