Para conmemorar el Día Mundial por la Libertad de Prensa, el Consejo de Comunicación de Ecuador realizará el podcast más largo del mundo. El ente gubernamental busca batir un récord al transmitir durante 30 horas ininterrumpidas, desde las 10 de este miércoles 3 de mayo hasta las 20 del jueves 4 de mayo. El objetivo, según han anunciado las autoridades, es visibilizar la práctica periodística desde todas sus aristas.
Actualmente, el récord del podcast más largo del mundo lo ostenta España, porque en noviembre de 2021, en Madrid se realizó una transmisión ininterrumpida de 24 horas. Ahora en Ecuador, el podcast tendrá 15 segmentos de dos horas cada uno. En estos se abordarán temas como periodismo, comunicación, libertad de expresión y protección a periodistas, entre otros.
Para la transmisión, el Consejo de Comunicación contará con la participación de comunicadores y periodistas de medios nacionales, internacionales y otras personalidades del país. Según ha informado la presidenta de la entidad, Jeannine Cruz, la transmisión pretende mostrar el ejercicio periodístico en su dimensión total “con sus encantos, sus obstáculos y desde las voces de quienes, día a día, están relacionados con este oficio y lo enaltecen”.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) declaró al 3 de mayo como una fecha para celebrar los principios fundamentales de la libertad de prensa. En este día se busca analizar la situación de “la libertad de prensa a nivel mundial, de defender los medios de comunicación de los ataques sobre su independencia, así como de rendir homenaje a los periodistas que han perdido sus vidas en el desempeño de su profesión”, según consta en la web oficial de la organización.
El mensaje de Audrey Azoulay, directora general de la Unesco, con motivo del Día Mundial de la Libertad de Prensa, señala que “todos debemos poner más de nuestra parte para afrontar los riesgos y aprovechar las oportunidades que surgen en la era digital”. La autoridad exhortó a los Estados Miembros y a otros actores de la sociedad, incluyendo a los medios de comunicación y empresas de tecnología, “a unirse para crear una nueva configuración digital que proteja tanto al periodismo como a los periodistas”.
En Ecuador, la imagen de los medios de comunicación y de los periodistas fue menoscabada principalmente durante el gobierno de Rafael Correa, donde el régimen acuñó el término de “prensa corrupta” para definir a los comunicadores que se oponían a la versión oficial del correísmo. Incluso hoy, cinco años después de que Correa dejara el poder, todavía sus militantes utilizan ese término para menoscabar la labor de los periodistas.
De acuerdo con la Fundación Andina para la Observación y Estudio de Medios (Fundamedios), una organización sin fines de lucro que busca promover la libertad de expresión y de prensa en el Ecuador y la región, ha registrado más de 3.000 alertas de agresiones en contra de periodistas y medios de comunicación desde el 2008 hasta la fecha. Según ha mencionado el director ejecutivo de Fundamedios, César Ricaurte, quien vivió la persecución correísta, ha declarado en ocasiones anteriores que, durante el mandato de Correa, “el guión comenzó con el acoso, insultos, mermar credibilidad de la prensa, el uso de publicidad oficial, presionar a los anunciantes privados, limitar el acceso a la información pública, entre otras cosas”.
En el Ecuador, uno de los eventos más trágicos en contra de la libertad de prensa fue el secuestro y asesinato del equipo periodístico de El Comercio, que fue capturado en la frontera compartida de Ecuador y Colombia por individuos del grupo disidente Oliver Sinisterra, comandado en aquel momento por “Guacho”. El periodista Javier Ortega, el fotoperiodista Paúl Rivas y el conductor Efraín Segarra fueron asesinados mientras realizaban una cobertura. Sucedió en el 2018 y cuatro años después, a pesar de las promesas de los gobiernos de desclasificar la información sobre cómo el Estado manejó el secuestro y poder dar justicia a sus familiares, el proceso aún se mantiene en la impunidad.
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