Un informe elaborado por la Policía Federal de Brasil enviado al Tribunal Supremo ha concluido este miércoles que la conducta del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, no presenta “elementos delictivos” en el marco del caso que investiga su posible injerencia en la institución policial.
El ex ministro de Justicia y Seguridad Pública de Brasil y ex juez Sergio Moro presentó su dimisión en abril de 2020 tras recriminar al presidente una posible “injerencia política” en la Policía Federal (PF), donde el mandatario tenía previsto nombrar a una persona afín.
“El presidente me dijo que quería colocar una persona afín que le pudiese pasar informaciones, informes de Inteligencia. El papel de la PF no es facilitar ese tipo de información”, advirtió Moro por aquel entonces.
Horas después de que se publicase el cese del director de la PF, Maurício Valeixo, Moro confirmó en una comparecencia pública su disconformidad con esta decisión, que habría trasladado personalmente a Bolsonaro durante una reunión privada.
Moro también aclaró, en contra de lo que aparecía en el boletín oficial, que él no firmó el cese del jefe de la Policía, al igual que tampoco fue Valeixo quien puso su cargo a disposición de Bolsonaro, como sugirió el presidente en un mensaje de Twitter en el que resaltó precisamente esta supuesta petición.
El informe elaborado este miércoles por la Policía Federal forma parte de la investigación abierta en 2020 por el Tribunal Supremo, que respondió a un pedido de la Procuraduría General de la República (PGR) tras estas acusaciones de injerencias vertidas por Moro, tal y como recoge el diario ‘O Globo’.
“Concluimos que, dentro de los límites de la investigación esbozada por los ministros relatores en el ámbito de la esfera penal, no existen elementos probatorios mínimos en los autos de la existencia de materialidad delictiva imputada al presidente de la República, Jair Messias Bolsonaro. así como a Sergio Fernando Moro”, según recoge el documento, tal y como han informado varios medios brasileños.
Según remarcó el entonces juez del Supremo Celso de Mello, Bolsonaro intentó interferir políticamente en los casos de la Policía Federal que implicaban a algunos de sus familiares. Tras negar las acusaciones ante el Tribunal, en enero, cuando la causa estaba cerca de expirar, el magistrado Alexandre de Moraes prorrogó otros tres meses más la investigación.
(Con información de Europa Press)
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