Miles de turistas argentinos llegaron el domingo por la mañana al cruce fronterizo entre Fray Bentos (Uruguay) y Gualeguaychú (Argentina) para viajar al país vecino. Varios de estos turistas pensaron que la frontera uruguaya tenía horario restringido para ingresar al país, como sucede en Argentina, lo que hizo que muchos llegaran al puente en horarios similares.
Por eso, se generaron filas de autos de hasta cinco kilómetros y esperas de hasta cinco horas para poder cruzar. Actualmente, Migraciones uruguayas atiende en el puente doce puestos que habilitan las 24 horas el pase de los turistas que deseen ingresar al país.
Tras la cantidad de personas acumuladas, queriendo cruzar, el trámite de ingreso a Uruguay llegó a demorar un promedio de 60 minutos por vehículo, informó Telemundo. Muchísimos tuvieron que esperar con sus autos bajo el sol con más te 35 grados de temperatura afuera. La fila, que comenzó a formarse a las nueve de la mañana del domingo, causó repercusiones en redes sociales, donde varios usuarios subieron fotos y videos quejándose de la situación.
Se informó, además, que lo que más consultaban los argentinos una vez que pasaban su frontera era por los baños, ya que del otro lado no tenían acceso ninguno. La situación se volvió peor, y aún más lenta, cuando pasadas las 14 horas se cortó la luz en el edificio de Migraciones.
Después de 21 meses con los pasos fronterizos terrestres cerrados, a excepción del puente que une Salto (Uruguay) y Concordia (Argentina), el 10 de diciembre se abrieron los puentes de Gualeguaychú con Fray Bentos y de Colón (Argentina) con Paysandú (Uruguay).
Remo Monzeglio, subsecretario del Ministerio de Turismo, dijo que la llegada de los argentinos se está viendo desde Uruguay con un “optimismo moderado”, según El País. “Vemos que hay mucha avidez por entrar, esta funcionando fluidamente, hay en estos momentos 40 barcos que están viajando hacia Uruguay desde Argentina y tenemos las amarras todas reservadas en Punta del Este y las que no quepan podrán ingresar en Piriápolis”, agregó.
Según su relevamiento con operadores turísticos, en muchos hoteles de la costa y Montevideo la ocupación estará completa para el 31 de enero. “En Enjoy están con ocupación completa y en la primera quincena con un 90%; Fasano con 100% de ocupación y enero con alta ocupación; también el complejo Solanas relevamos y tiene un fin de año al 100% de ocupación, una alta ocupación en enero y siguen ingresando reservas desde Argentina”, comentó. A todo esto, se agregan las consultas del litoral uruguayo, cercano a la frontera con Argentina. En el departamento de Soriano, al oeste del país, se espera una buena presencia de barcos argentinos, agregó Monzeglio.
A pesar de la presencia de miles de turistas en la mañana y la tarde del domingo en el paso fronterizo de Fray Bentos, Monzeglio no quiso dar números concretos de cuántas personas ingresaron durante el día. Sin embargo, dijo que la entrada de argentinos tuvo un carácter “fluido, masivo y constante”, informó Montevideo Portal.
En noviembre, tras la apertura de fronteras totales a extranjeros, Uruguay recibió un total de 12.081 turistas en los cinco días posteriores. Entre las personas que ingresaron, se contaron más de cincuenta nacionalidades diferentes en todos los puntos de acceso que existen en el país.
Monzeglio aseguró que, actualmente, los turistas que están ingresando son aquellos con poder adquisitivo alto y medio alto, “que piensan el dólares”. Uno de los indicios para pensar en esto es que todas las amarras del puerto de Punta del Este están reservadas y prepagadas para la temporada. El viceministro dijo que está convencido de que será una buena temporada para el sector turístico después del golpe que vivió gracias a la pandemia.
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