Humo blanco en Maldonado: las estaciones de servicio resolvieron aceptar tarjetas internacionales

Luego de las amenazas, los estacioneros llegaron a un acuerdo

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Los estacioneros de Maldonado, departamento
Los estacioneros de Maldonado, departamento de la costa uruguaya, decidieron aceptar tarjetas de crédito y débito internacionales (Foto: Reuters)

Los dueños de las estaciones de combustible de Maldonado, el departamento uruguayo que contiene ciudades turísticas como Punta del Este, resolvieron aceptar el uso de tarjetas de crédito internacionales a días del comienzo de la temporada de verano.

A comienzos de diciembre, los 23 dueños de las estaciones, nucleados en el gremio Vendedores de Combustible de Maldonado (VECOMA) habían definido que si no obtenían una respuesta a su propuesta de bajar los aranceles, que ellos consideraran satisfactoria, por parte del Ministerio de Economía y Finanzas no aceptarían tarjetas de crédito ni débito internacionales.

Tras una reunión el lunes 20 de diciembre, fecha que había puesto como límite VECOMA para comenzar a aceptar solo dinero al contado, se resolvió no implementar la medida, informó FM Gente.

El gremio llegó a la resolución después del análisis de la reunión vicepresidente de Ancap (Administración Nacional de Combustibles, Alcohol y Portland), Diego Durán. Gracias a la la “buena mediación que ha tenido junto al BROU (Banco de la República Oriental del Uruguay), en aras de lograr la rebaja de los aranceles” se ha comenzado un camino de conversación.

Nicolás Pascaretta, el vocero de los estacioneros de Maldonado y dueño de una estación de combustible, confirmó que se optó por “suspender la medida de no aceptar tarjetas para esta temporada” debido a los avances conseguidos.

Actualmente, se podrá abonar en a través de “TuApp”, la billetera electrónica del Banco República. De allí, Pascaretta destacó la buena voluntad del Banco República e indicó que se buscará promocionar entre los clientes de ambos rubros el uso de este mecanismo de pago.

Después de la temporada, agregó Pascaretta, se volverá a la negociación para lograr que todas las tarjetas de pago bajen sus aranceles. Recordó que cada 1.000 pesos de nafta súper cargados (23 dólares americanos), quedan 97 (2,3 dólares) pesos de ganancia bruta para la estación de nafta. De esos 97, 30 (0,03 dólares) quedan en manos de las tarjetas, otros 30 (0,03 dólares) en manos de las compañías por derecho de marca.

Según el vocero, el promedio de aranceles en las tarjetas de débito se encuentra en un 1,10% de la compra, y en las tarjetas de crédito, el porcentaje es de 1,25%. TuApp, por ejemplo, cobra un arancel del 0,80%.

Pascaretta recordó que el problema de los aranceles existe desde hace tiempo y que cada vez que el precio del combustible sube, las estaciones sufren una reducción en su rentabilidad, según Aspen FM.

Lo sucedido

El 20 de diciembre anterior, un comunicado señaló la demora de la respuesta que los estacioneros recibieron por parte del Ministerio de Economía y Finanzas. Según declararon, la Unión de Vendedores de Nafta del Uruguay le había planteado la problemática hacía más de 40 días.

El pedido específico del gremio de vendedores de combustible al Ministerio fue que se intercediera ante las empresas financieras y que lograran rebajar los aranceles de las tarjetas de crédito y débito internacionales. Daniel Añon, presidente de la Unión, dijo que las ganancias de las emisores de las tarjetas es mayor que la de los propios estacioneros.

“Los estacioneros estamos cansados de este abuso. Nosotros desde Maldonado lo advertimos hace al menos cuatro años, inclusive tomado la medida una temporada, de no aceptar el pago de combustible con las tarjetas OCA y VISA”, agregó Nicolás Pascaretta, según Surtidores.

También explicó que cuando los aranceles y el POS se contemplaban en la paramétrica la situación no era tan grave, pero que actualmente todo ha pasado al margen del estacionero y eso genera que sea “absolutamente insostenible y nocivo para nuestro negocio, con una bancarización que ha logrado llevar a varios colegas a la ruina”.

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