Ecuador: cuatro variantes de “preocupación” y una de “interés” circulan por el país

El gobierno insiste en la vacunación como la principal medida para contener los contagios

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Varias personas caminan con mascarilla en las calles de Quito (Foto: EFE)
Varias personas caminan con mascarilla en las calles de Quito (Foto: EFE)

Más de 3.000 contagios de coronavirus en Ecuador corresponden a una de las variantes del COVID-19 que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha calificado como de “preocupación”. El Ministerio de Salud Pública, con información del Instituto Nacional de Investigación y Salud Pública, ha detectado que el 55% de esos contagios responden a mutaciones de “preocupación” o que tienen una mayor transmisibilidad. La variante Delta es la que acumula más contagios.

Los virus como el COVID-19 tienden a evolucionar constantemente porque se producen cambios en el código genético del virus cada vez que se replica. Para que se considere que hay una variante de coronavirus, el código genético del virus debe incluir una o más mutaciones. Incluso pueden generarse grupos de linaje cuando existen variantes con cambios genéticos similares.

La OMS, al igual que instituciones como el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) de los Estados Unidos, estableció parámetros para clasificar a las variantes del COVID-19. Estas pueden ser calificadas como de “preocupación”, de “interés” o de “observación”.

Las variantes de preocupación deben cumplir con al menos uno de estos tres requisitos, según la OMS: debe probarse que aumentan la transmisibilidad o cambian perjudicial en la epidemiología del COVID-19; debe existir aumento de la virulencia o cambio en la presentación clínica de la enfermedad; o debe provocar la disminución de la eficacia de las medidas sociales y de salud pública o de los medios de diagnóstico, las vacunas y los tratamientos disponibles.

En cambio, las variantes de interés presentan cambios en el genoma que afectan a características del virus como su transmisibilidad, la gravedad de la enfermedad que causa y su capacidad para escapar a la acción del sistema inmunitario, ser detectado por medios diagnósticos o ser atacado por medicamentos, de acuerdo con la explicación de la OMS. Este tipo de variantes dan lugar a una transmisión significativa en un medio extrahospitalario o causan varios conglomerados de COVID-19 en distintos países, con una prevalencia relativa creciente y ocasionando números cada vez mayores de casos con el tiempo. Son de interés porque pueden tener otras características que las puedan convertir en un nuevo riesgo para la salud pública mundial.

Una joven al ser vacunada contra la covid-19, en la Universidad de La Américas, en Quito (Foto: EFE/José Jácome)
Una joven al ser vacunada contra la covid-19, en la Universidad de La Américas, en Quito (Foto: EFE/José Jácome)

Hay cinco variantes que han sido calificadas como “preocupantes” por la Organización Mundial de la Salud. Estas son la Alfa, identificada en Reino Unido en septiembre de 2020; la Beta identificada en Sudáfrica en diciembre del año pasado; la variante Gamma encontrada en Brasil, en noviembre de 2020; la Delta detectada en India en octubre de 2020; y la más recientemente, la Ómicron, notificada por Sudáfrica. También la variante Mu, detectada en Colombia, ha sido calificada como de “interés”. De estas, solo la variante Beta no presenta contagios en el Ecuador, de acuerdo con la información del ente sanitario.

De 3.163 casos, la variante Delta encabeza el listado con 1.134. Le sigue la variante Gamma, con 345, y Alpha, con 266. La Ómicron también ya está en el Ecuador y se han detectado tres casos hasta este 20 de diciembre. La Mu presenta 541 casos en el país y otras mutaciones de menor contagiosidad registran 873 casos.

Según el Ministerio de Salud Pública, las provincias con mayor número de reportes son Pichincha, en la sierra ecuatorial, con 577 casos y luego las provincias costeras de Guayas, con 601, Manabí con 389 y El Oro con 307. Las localidades con menos casos son Loja, Santa Elena y Galápagos.

Para contener un rebrote del virus y evitar que el sistema sanitario colapse, las autoridades gubernamentales han insistido en la necesidad de la vacunación anticovid y en el respeto a las medidas de bioseguridad, como el lavado constante de manos, el uso correcto de mascarilla y el distanciamiento físico.

En el Ecuador, según los datos oficiales, el 76% de la población que puede acceder a la vacuna (mayores de 5 años) ya cuenta con el esquema completo anticovid, lo que representa que más de 12,3 millones de ciudadanos se han vacunado por completo. Más de 1,3 millones esperan por la segunda dosis y más de 817.000 ya han recibido la dosis de refuerzo.

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