La OEA pidió a Cuba que permita la visita de una misión internacional para constatar la situación de los presos políticos

La Organización de Estados Americanos manifestó su “especial preocupación” por la salud del opositor cubano José Daniel Ferrer, encarcelado desde el 11 de julio

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Foto de archivo del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), el uruguayo Luis Almagro (EFE/ Lenin Nolly)
Foto de archivo del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), el uruguayo Luis Almagro (EFE/ Lenin Nolly)

La Organización de Estados Americanos (OEA) urgió este jueves a Cuba a que permita “de inmediato” la visita a ese país de una misión internacional que pueda constatar la situación de las “personas presas políticas”, tras expresar su preocupación por la situación del opositor José Daniel Ferrer.

En un comunicado difundido en Washington, sede del organismo, la Secretaría General de la OEA reiteró su llamado para la “inmediata puesta en libertad de todos los presos políticos que se encuentran encarcelados de manera arbitraria” en la isla.

Además, consideró “fundamental” seguir atentos a la evolución de las “condiciones de salud y de integridad física” de estas personas.

En concreto, manifestó su “especial preocupación” por la integridad de José Daniel Ferrer, líder de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu), encarcelado desde el pasado 11 de julio, cuando se produjeron en Cuba las mayores protestas antigubernamentales en décadas.

La OEA advirtió que la salud de Ferrer —a quien describió como “un prisionero político del régimen”— “parece haberse deteriorado de manera acelerada durante las últimas semanas”.

Ferrer, agregó el organismo interamericano, “se encuentra confinado en una pequeña celda tapiada, sin ningún contacto con personas distintas a los guardias que lo custodian y sin acceso a luz natural”.

“Sus reportados problemas de respiración, pérdida de visión y otros más han sido atribuidos a las inhumanas condiciones donde se encuentra detenido por ejercer sus legítimos derecho civiles y políticos”, alertó la nota.

El opositor cubano José Daniel Ferrer (Foto: EFE/Alejandro Ernesto)
El opositor cubano José Daniel Ferrer (Foto: EFE/Alejandro Ernesto)

En ese contexto, la Secretaría General de la OEA, que encabeza Luis Almagro, urgió a ese país a que permita “de inmediato la visita al país de una Misión Humanitaria del sistema universal y/o interamericano de protección de Derechos Humanos que pueda constatar el estado y la situación de las personas presas políticas en el país”.

El pasado 7 de diciembre, Ana Belkis Ferrer, hermana de José Daniel Ferrer y exiliada en EEUU, denunció las condiciones en las que dice que se encuentra este opositor cubano.

Belkis Ferrer divulgó en sus redes sociales que en todo este tiempo su hermano “solo ha recibido dos visitas familiares” y que está “muy delgado, demacrado y físicamente deteriorado”.

También ese día el presidente del comité de Exteriores del Senado de EEUU, el demócrata Bob Menéndez, y el republicano Marco Rubio, quien también está en ese comité, urgieron al alto representante de la Unión Europea (UE) para Política Exterior, Josep Borrell, a incrementar la presión sobre el régimen cubano para que libere a los opositores encarcelados.

Brutal agresión a una periodista

Por otro lado, el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) pidió este jueves al régimen cubano que investigue “exhaustivamente” el reciente ataque contra la periodista Mabel Páez.

El grupo de medios comunitarios ICLEP difundió imágenes de las heridas de la periodista Mabel Páez tras el ataque
El grupo de medios comunitarios ICLEP difundió imágenes de las heridas de la periodista Mabel Páez tras el ataque

La organización llamó a las autoridades de la isla a “enjuiciar con celeridad a los responsables” de la golpiza, que le dejó moretones, inflamaciones y diversas heridas en la cara, el costado y los brazos a la periodista.

Estamos sumamente preocupados por esta brutal agresión contra la periodista Mabel Páez y las sospechosas circunstancias que la rodean”, declaró Ana Cristina Núñez, investigadora sénior del Programa de Latinoamérica y el Caribe del CPJ.

Agregó que considera “imperativo que las autoridades cubanas investiguen esta agresión exhaustiva y transparentemente, y enjuicien a los responsables”.

Los hechos se produjeron el 7 de diciembre por la noche, explicó el CPJ con base en testimonios, cuando dos encapuchados irrumpieron en la vivienda de Páez, directora del periódico comunitario El Majadero de Artemisa, y la agredieron. Aparentemente no se llevaron nada de la vivienda.

Antes de irse uno de ellos le dijo a Páez que esa era “la primera advertencia”, según una nota que cita el CPJ del grupo de medios comunitarios ICLEP, que tiene seis periódicos gratuitos además de El Majadero de Artemisa.

Después de los hechos, la periodista fue a un hospital local y durante el examen médico un agente policial entró a la consulta y le quitó el certificado médico de lesiones.

La periodista reclamó entonces el documento, pero el agente policial se lo entregó a otra persona, vestida de civil, quien le dijo a Páez: “Vete para la casa y descansa que va a ser mejor para todos”, indicó el ICLEP.

Un oficial de policía se para frente a una calle en cuarentena en La Habana (Foto: REUTERS)
Un oficial de policía se para frente a una calle en cuarentena en La Habana (Foto: REUTERS)

Un semana antes, El Majadero de Artemisa había publicado un artículo sobre un adolescente que había muerto cuando cumplía el servicio militar obligatorio tras ser reclutado contra su voluntad.

El 5 de diciembre dos agentes policiales y dos de la Seguridad del Estado entraron en el domicilio de Páez, que es la sede de El Majadero de Artemisa, supuestamente en busca del director ejecutivo del ICLEP, Alberto Corzo, a quien las autoridades investigan por el presunto delito de desorden público.

El CPJ aseguró que las autoridades cubanas han sometido en repetidas ocasiones a los periodistas y medios del ICLEP a represalias por su labor periodística independiente, de allanamientos a detenciones, pasando por amenazas y presiones. El CPJ afirmó que envió un correo electrónico a la Policía Nacional Revolucionaria y al Ministerio del Interior para obtener una declaración, pero no recibió respuesta.

(Con información de EFE)

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