Este año, luego de más de 14 meses fuera de las aulas de clase, los niños y adolescentes pudieron regresar, de forma libre y voluntaria, a sus establecimientos educativos. Según los datos oficiales, más de 60.000 estudiantes y alrededor de 72 000 docentes han retornado a sus escuelas y colegios. De estos, solo se han registrado 30 contagios por coronavirus, solo uno de estos aún está activo y los demás ya han sido dados de alta.
Las cifras con relación a los contagios de covid-19 han provocado que las autoridades evalúen el retorno obligatorio a las aulas. Esta ha sido una iniciativa del Ministerio de Educación.
En una rueda de prensa, la ministra de Educación, María Brown dijo que “La presencialidad en la educación es lo único que nos puede garantizar que se reduzcan los índices de deserción escolar y exclusión educativa, que afectan, sobre todo, a los niños y jóvenes más vulnerables”
En marzo de este año, Unicef ya advertía sobre la necesidad de reabrir las escuelas. Según los datos publicados por el organismo, las escuelas de más de 168 millones de niños del mundo llevan casi un año cerradas por completo. Uno de cada siete niños –señala la Unicef– han perdido más de tres cuartas partes de la educación presencial. El 60 % de esos niños son de América Latina y del Caribe.
Además, tras un estudio realizado por Unicef en 191 países se explica que “reabrir las escuelas no representa un riesgo para la salud” cuando ya no se está en un confinamiento total. Los datos en Ecuador probarían lo anterior.
El presidente del Comité de Operaciones de Emergencia del Ecuador –organismo encargado de dictar las medidas para contener la pandemia–, Juan Zapata, dijo que “las evaluaciones de lo de educación son muy buenas, pero obviamente siempre estará ligado a la situación epidemiológica”.
En el Ecuador hay más de 4 millones de estudiantes que volverían a los planteles educativos en modalidad presencial, en su totalidad, hasta el 17 de enero del 2022, según las estimaciones de las autoridades. Además, los encargados de la educación en el país han propuesto que el retorno obligatorio sea progresivo e inicie por los adolescentes, porque ellos recibieron antes la vacuna contra el coronavirus. Luego se prevé el retorno de los niños. Desde octubre de este año, el país empezó la vacunación de niños a partir de los 5 años.
Para el regreso a las escuelas no solo se considerará la situación epidemiológica de los menores, sino que las instituciones deberán tener su infraestructura en buen estado. Yadira Blakman, subsecretaria de Educación de la Zona 8, conformada por los cantones Guayaquil, Durán y Samborondón, de la provincia del Guayas, dijo a El Universo que “para el regreso a las aulas no son exigencias ni la compra de uniformes ni que el estudiante haya sido vacunado contra el COVID-19″, sin embargo explicó que la infraestructura y sus componentes son importantes, de ahí que “realizan un mapeo de los establecimientos y a fines de este mes tendrán un informe de cuáles serán las instituciones que no podrán acogerse a esta disposición”.
A pesar de lo anterior, la ministra Brown dijo que los padres cuyos hijos tengan enfermedades agravantes u otro tipo de condiciones de salud podrán decidir si los niños regresan a la escuela u optar por la modalidad a distancia.
Hasta el 15 de noviembre, el Comité de Operaciones de Emergencia decidirá si se acepta el retorno obligatorio a las escuelas y colegios.
De acuerdo con las cifras oficiales, al momento hay más de 10.3 millones de ecuatorianos vacunados en contra del coronavirus con el esquema completo, lo que representa el 64 % de la población total del país. Más de 1.9 millones esperan la segunda dosis de la vacuna. Sobre los grupos etarios, el 32% de niños entre 5 y 11 años han sido inmunizados. En cambio, el 74 % de los adolescentes entre 12 a 17 años han recibido la primera dosis de la vacuna y tan solo el 35 % tiene el esquema completo. El gobierno nacional prevé alcanzar la inmunidad de rebaño, con al menos el 85% de la población vacunada hasta finales de 2021. Mientras tanto, el país aún suma más de 500.000 contagios.
SEGUIR LEYENDO: