Este martes, en Uruguay las temperaturas superaron los 31° en promedio en todo el país y, en el litoral, alcanzaron los 34°. Aunque se habló del calor denso, también hubo un hecho inusual.
Hace cuatro días se dio en la región patagónica de Argentina un temporal con vientos muy fuertes, que superaron los 150km/h. Volaron los techos de un supermercado y de una escuela en Comodoro Rivadavia, en la provincia de Chubut, donde hubo también cortes de luz y de agua.
“Estos vientos provocaron grandes destrozos, pero sobre todo la elevación de una cantidad de material particulado, partículas de polvo”, explicó el meteorólogo José Serra a Montevideo Portal.
El material particulado, también llamado contaminación por partículas, es el término utilizado para referirse a una mezcla de partículas sólidas y líquidas que se encuentran en determinado momento en el aire. Los ejemplos más conocidos son el polvo, el hollín, el humo o las cenizas, que son lo suficientemente grandes para que puedan ser percibidas por el ojo humano a simple vista. Existen algunas tan pequeñas que solo pueden verse con un microscopio electrónico.
Suele suceder que los sólidos microscópicos y las gotas de líquido son tan pequeñas que, al inhalarse, pueden provocar problemas de salud. Las partículas pueden alcanzar los pulmones e, incluso, pueden llegar a la sangre. Esto sucede con aquellas que son menores 10 micrómetros de diámetro.
Según Serra, sin embargo, este tipo de partículas no representan un riesgo para la población ya que “no es nociva” y “está en gran altitud” por encima del suelo.
Los orígenes más comunes de estas partículas son obras en construcción, caminos sin asfaltar (de pedregullo o de tierra), chimeneas, incendios y, obviamente, fenómenos climáticos.
Las partículas se generan en la atmósfera como resultado de reacciones químicas. El ejemplo más claro es cuando se mezclan el dióxido de azufre y los óxidos de nitrógeno, que son químicos contaminantes que provienen de centrales eléctricas, industrias y automóviles.
“Una gran masa de aire con una extensión de 620.000 km2 se fue desplazando sobre aguas del Océano Atlántico pero levemente rozó la parte sur de nuestro territorio”, dijo Serra sobre el fenómeno climático. Por esta razón, fue que en Uruguay se vio el cielo con un velo grisáceo, sobre todo en las áreas sur y sureste del país.
Como ejemplo del fenómeno, Serra recordó el año 2011 cuando un volcán en Chile eruptó y las cenizas, el material particulado de ese caso, llegaron hasta Uruguay.
En este caso, el material particulado continuará su camino hacia Océano Atlántico.
El temporal
El domingo pasado, el Servicio Meteorológico Nacional argentino emitió una alerta naranja por vientos fuertes en la provincia de Chubut. Como estaba previsto, a partir del medio día el viento se presentó en Comodoro Rivadavia y superaron los 150 kilómetros por hora. Arrancaron techos, tiraron postes y árboles, generaron destrozos en la vía pública y varios barrios tuvieron cortes de luz y de agua.
En el barrio Pueyrredón, en Comodoro, tuvieron que evacuar a varios clientes que se encontraban en el supermercado Walmart, donde el viento provocó que se volara parcialmente el techo. Aunque no hubo heridos, la tienda permaneció cerrada.
Por otro lado, en el barrio Astra, se identificó otra situación de peligro. El viento derribó la torre petrolera histórica y, en su caída, se llevó consigo el tendido eléctrico generando cortes de luz en la ciudad.