“Se está evaluando toda la situación antes de tomar una decisión”, informó el Ministerio del Interior en Uruguay al diario La Diaria. El 23 de setiembre, el ministro Luis Alberto Heber había dicho que se suspendió al oficial principal y se retuvo su salario mientras lo investigue la Justicia. Se trata del caso de un policía que fue acusado de violencia de género.
La denunciante tenía ocho años su tío la abusó sexualmente. Lo hizo reiteradas veces, en la casa de su abuela. Dejó de hacerlo cuando él ingresó a la Escuela Nacional de Policía y se fue. Recién cuando tuvo 23 años, la mujer pudo hacer la denuncia. El 27 de julio de 2020, se presentó ante Fiscalía y denunció a su tío, Leandro Giménez de 33 años, por abuso sexual.
Giménez es oficial, grado seis dentro de un rango de diez, en la Policía, según el Informativo Sarandí. Trabaja en la Brigada Departamental de Seguridad Rural Zona Operacional II. Una vez presentada la denuncia, la Justicia definió medidas cautelares de restricción de acercamiento y de comunicación por 180 días.
Según la ley en Uruguay, cuando un policía es denunciado por cualquier tipo de violencia de género, hay que tomar medidas inmediatas. Estas son de índole administrativas, sancionatorias y reparatorias. Incluye, además, el retiro obligatorio y preventivo del arma de reglamento.
En el caso de Giménez, las medidas sancionatorias nunca aparecieron. El comisario general de ese momento, Martín Botto, no dio la orden de sanción. Botto es, actualmente, el jefe de Policía de Río Negro, un departamento al oeste del país. Lo que sí hizo fue una solicitud formal que envió a la Dirección de Políticas de Género del Ministerio del Interior pidiendo información.
En el informe se indica que el policía tenía denuncias anteriores por violencia doméstica, por parte de otra mujer, y hostigamiento denunciado por otro policía. Según la Dirección, se le indicó a Botto que debía tomar las medidas faltantes, pero ese momento nunca llegó, según Radio Sarandí.
Sucedió lo contrario: Botto le ordenó a Gustavo Dutra, encargado departamental de Violencia de Género de Río Negro, que las medidas no se tomaran para con Giménez. Dutra envió, entonces, un correo electrónico para dejar registro de lo sucedido: “En referencia al oficial principal Giménez solicito a usted directivas en cuanto a su tenor, a los efectos y teniendo en cuenta lo conversado con usted en la reunión de trabajo del día 31 de julio”, escribió, según Sarandí. La reunión a la que hace referencia es en la que Botto le solicitó no tomar medidas.
El 18 de diciembre de 2020, Giménez fue premiado. El Ministerio del Interior le entregó un reconocimiento a quienes “sobresalieron en su dedicación al cumplimiento de la misión”. Hacía solo cinco meses había sido denunciado por su sobrina.
Hasta que sucedió: Giménez fue formalizado el 3 de setiembre de 2021 por “reiterados delitos de atentado violento al pudor agravado”, delitos ocurridos hacía más de diez años. Se le adjudicaron medidas cautelares de arresto domiciliario nocturno y de presentación en la seccional policial. El caso se encuentra a cargo de la Fiscalía de 1º turno de Paysandú, a cargo de la fiscal Carolina Martínez.
Se ocupa de la denuncia otro departamento, y no Río Negro, porque la denuncia fue presentado en este. Se inició, además, un sumario administrativo.
Para definir la sanción judicial se tendrá en cuenta la reincidencia de Giménez en situaciones de violencia doméstica, el grado jerárquico del cargo que ocupa y el incumplimiento de las medidas cautelares.
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