A esta altura, ya son más de 9.800 niños y adolescentes. En 2019, había un 44% menos de ellos.
Las cifras alarmaron. La pobreza infantil creció un 44% en el 2020 en el norte de Uruguay, específicamente en el departamento de Salto. Hubo “un crecimiento exponencial de la pobreza infantil”, aseguró la directora del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), Natalia Argenzio.
El intendente de este departamento, Andrés Lima, confesó que si bien desconocía la cifra exacta de niños y adolescentes que viven en pobreza infantil, estaba enterado sobre la situación. ¿Por qué? Porque la Intendencia colabora con la entrega de 44.000 platos de comida al mes en todo el departamento. “Tanto en los comedores municipales que son atendidos en conjunto con el Ejército y el Mides (Ministerio de Desarrollo Social), como en las diferentes ollas y merenderos que están activos en la ciudad”, dijo Lima según El País.
La ayuda por parte de la comuna es de 250.000 pesos uruguayos (casi 6.000 dólares americanos) que se entrega a colectivos de ollas comunitarias y merenderos para repartir 11.000 platos de comida todas las semanas. Ese convenio fue firmado en agosto de 2021.
De hecho, la semana pasada dos de estos colectivos se manifestaron durante la visita del Presidente Luis Lacalle Pou al departamento. Reclamaban mayor asistencia por parte del Ministerio de Desarrollo Social.
El Mides, por su parte, emitió un comunicado donde informó sobre la cantidad de donaciones que hicieron: 20.000 hogares en el norte del país son beneficiarios directos de los programas que planifica el Ministerio y casi un 40% de ellos es del departamento de Salto.
Para Natalia Agrenzio, el INAU “apoya todo el desarrollo de la primera infancia”. Sin embargo, agregó que “cuando vemos cuáles son los proyectos que tenemos en Salto para aumentar la cobertura son realmente muy pocos”.
La directora de INAU hizo el pidió que se trabaje en “propuestas que potencien los convenios, que vayan más allá de experiencias puntuales”. Habló sobre la importancia de apoyar “el egreso adolescente” de liceos públicos e instituciones educativas secundarias, lo cual es parte de la incorporación de jóvenes al mercado de trabajo. También mencionó que hay que “proteger a las familias para que no pierdan la capacidad de protección y de cuidado”.
Qué más pasa en Salto
La cifra de pobreza infantil es preocupante, pero no es la única. En 2019, los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) dejaron ver que el 49,4% de las personas de este departamento tenían, por lo menos, una necesidad básica insatisfecha. Eso lo posicionó como el segundo departamento con mayor proporción en ese indicador.
Al mismo tiempo, el el 5,9% de los hogares en Salto se encontraba por debajo de la línea de pobreza.
El mercado laboral, ahora con datos del 2020, no está en una situación diferente. Al parecer, las cifras de actividad y empleo se encuentran por debajo del promedio del país. Y la tasa de desempleo es la más alta de todas: un 12,2%.
En julio de 2020, en Salto funcionaban a diario 39 ollas populares a lo largo de todo el departamento. Con una población de 125.000 habitantes, 6.000 se alimentaban solamente a través de las organizaciones que repartían comida. Pero el total de platos repartidos por semana eran más: 10.000. Eso, sin contar los 5.000 que repartía el Ejército en aquel entonces.
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