“Nada ni nadie puede silenciar a un periodismo que está dispuesto a investigar, a indagar los abusos del poder, y a prestar un servicio a la ciudadanía que demanda la verdad”. Con esas palabras Carlos Jornet, presidente de la Comisión de la Libertad de Prensa e Información de la SIP, destacó y valoró el esfuerzo de los periodistas nicaragüense para ejercer la profesión en momentos en que el régimen de Daniel Ortega arrecia la censura y persecución contra el periodismo independiente.
Esa especial mención se dio este lunes en el marco de la XV Edición del Premio Pedro J. Chamorro Cardenal a la Excelencia al Periodismo de Investigación, que entrega la Fundación Violeta Chamorro, en el día del periodista en Nicaragua. La ceremonia virtual se realizó con la colaboración de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), luego de que el pasado 6 de febrero la ONG nicaragüense, que promueve la libertad de expresión en el país, anunciara el cese de operaciones porque “no se someterá” a una ley del régimen sandinista que les exige registrarse como “agente extranjero” para recibir fondos.
Previo al anuncio de los ganadores, tomó la palabra Cristiana Chamorro, ex directora ejecutiva de la Fundación Violeta Chamorro, quien además de agradecer el respaldo de la SIP, advirtió que “mientras haya un micrófono, una máquina de escribir, una plaza pública, vamos a seguir ejerciendo nuestra libertad, denunciando la corrupción y la represión a los derechos humanos”.
La periodista nicaragüense denunció las leyes “monstruosas y aberrantes” impulsadas en los últimos tiempos por el régimen de Ortega, y alertó que “la libertad de expresión está siendo severamente amenazada como nunca antes” en el país. “Aprovechando los pocos espacios de libertad que quedan en Nicaragua, como es el uso de la tecnología de la comunicación, amenazada también por la Ley de Ciberdelitos, que pretende quitarnos todos los derechos, toda nuestra libertad… No sólo a los periodistas, sino el derecho de expresarnos en redes sociales, y no sólo a la gente de la oposición, sino también a los trabajadores del Estado que ahora van a ser objeto de ser espiados”.
La hija de la ex presidenta Violeta Chamorro (1990-1997), quien fundó la organización hace 34 años, manifestó que en 2021 “la estrategia represiva ha continuado con asedios, forzando a periodistas a irse al exilio, judicializando a periodistas independientes” y condenando a otros “por calumnias e injurias sin pruebas”.
Reafirmó, además, el compromiso de la Fundación “con la prensa libre e independiente, que con valentía se ha mantenido activa en su vocación informativa”.
Chamorro adelantó que la Fundación, pese a la persecución del régimen, continuará “trabajando por el periodismo libre” y por una Nicaragua “sin presos políticos, exiliados, y con plena libertad de expresión”. “No estamos dispuestos a someternos a caprichos dictatoriales (...) Aunque nos hayan cerrado, no nos cansaremos de exigir el cese de la represión y el abuso de poder contra el periodismo, de la libertad de expresión, y de todas las libertades públicas”, fustigó.
La Ley de Agentes Extranjeros, duramente cuestionada por la oposición y por la comunidad internacional, obliga a las personas naturales y jurídicas que reciben fondos del exterior a inscribirse como “agentes extranjeros” ante el Ministerio de Gobernación y a reportar minuciosamente sus ingresos y gastos al gobierno bajo pena de multas, cárcel y confiscación de bienes.
La nómina de ganadores fue decidida por un jurado internacional, conformado por los siguientes periodistas: Patricia Campos Mello (Brasil, reportera y columnista de Folha do São Paulo); Víctor Amaya (Venezuela, jefe del portal Tal Cual); y Glenda Girón (El Salvador, editora de investigaciones de La Prensa Gráfica).
Girón, encargada de anunciar a los ganadores, instó a todos los periodistas independientes nicaragüenses a “no detenerse”: “El periodismo sigue siendo indispensable, aún más en los momentos más oscuros de las sociedades”. “A pesar de los cambios y la crisis, se ha hecho un esfuerzo extraordinario por hacer coberturas, en medio de un ambiente de opacidad cada vez más extendido”.
“A pesar de la represión, recibimos 72 trabajos de investigación para las siete categorías del premio, de las cuales 21 de ellos compitieron por la categoría de derechos humanos. Esto nos muestra cómo está la situación de Nicaragua, en materia de represión de derechos humanos”, explicó Chamorro, quien indicó que todas las coberturas elegidas se desarrollaron entre el 20 de diciembre de 2019 y el 8 de enero de 2021.
Y agregó: “Mientras tengamos comunicación virtual y solidaridad internacional continuaremos trabajando por ese periodismo comprometido con la verdad, la justicia y el respeto de los derechos humanos, las leyes y la Constitución (...) Sólo la lucha cívica, por nuestras libertades públicas, y entre estas un proceso electoral creíble, transparente, sin presos políticos, sin exiliados, con libre movilización y plena libertad de expresión nos conducirá a esa anhelada democracia que tanta falta hace en Nicaragua”.
Ricardo Trotti, director ejecutivo de la SIP, por su parte, saludó a todos los periodistas de Nicaragua en su día, y en especial “por su trabajo por iluminar todos los problemas” del país “pese a las represalias cotidianas”. Calificó de “titánica” la labor de los comunicadores nicaragüenses ante el constante asedio del régimen.
A continuación, la lista de ganadores:
-Gobernanza y Transparencia Pública: Maynor Eliezer Salazar, Néstor Arce, Carlos Herrera, Ricardo Arce y Tony Centeno, del portal “Divergentes”, por el trabajo titulado: “Fidel Moreno, el hombre de confianza del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, y su red de millonarios empresarios que construyeron cientos de obras en la Alcaldía de Managua durante 2016 y 2018”.
Mención especial: Maynor Eliezer Salazar, de “Artículo 66”, por el trabajo “Los millones abandonados por el narco que caen en manos de la policía de Daniel Ortega”.
-Gestión Municipal: Ramón Villarreal y Lésber Quintero, de “Despacho 505”, por el trabajo “Cárdenas, un municipio sediento desde hace 20 años”.
-Derechos Humanos: Leslie Paola Ramos, de “Divergentes”, por el trabajo “A mí me violaron en una cárcel”.
-Sistema educativo: Keyling T. Romero, Franklin Villavicencio y Juan García, de “Revista Ñiú”. “Los universitarios expulsados por la dictadura de Daniel Ortega”.
-Sistema de salud: José Denis Cruz, María Haydée Brenes y Adriana Gutiérrez, de “Despacho 505”. “El drama de morir esperando diálisis en un hospital público / Cuando los riñones fallan”.
Mención especial: Mabel Calero, Wendy Álvarez y Cinthya Torrez, de “La Prensa”. “El Minsa y las medias verdades de Ortega”.
-Género: Edith Pineda, José Daniel Cruz, Uriel Velásquez y María Haydée Brenes, de “Despacho 505”. “Las niñas cuentan”.
Mención especial: Claudia Lorena Tijerino, de “Divergentes”. “Femicidio, la otra pandemia que sufren las mujeres en Nicaragua”.
-Medio ambiente: Wilfredo Miranda, de “Divergentes”. “La montaña iba adelante… Nada sobrevivió”.
SEGUIR LEYENDO: