Uruguay comienza este lunes la campaña de vacunación contra el COVID-19, con el foco puesto en el personal esencial como docentes y fuerzas de seguridad. Es el último país de Sudamérica en iniciar el proceso.
Si bien algunos vacunadores fueron inoculados durante el fin de semana, el comienzo oficial del programa de inmunización es este 1 de marzo, con las dosis recibidas de la fórmula de Sinovac (China). Las autoridades confirmaron que se han inscrito 20 mil personas para esta jornada, y casi 50 mil hasta el miércoles, cuando ya se superaría al 1% de la población de casi 3,5 millones de habitantes. Este lunes, además, se abren los cupos para vacunarse a partir del jueves.
En esta primera instancia se inoculará a los docentes, policías, bomberos y militares en servicio, y a trabajadores del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU) menores de 60 años, que desde el viernes podían inscribirse en una agenda habilitada por el MSP.
Por otra parte, a partir del 8 de marzo, fecha estipulada para la llegada del primer lote de vacunas del laboratorio estadounidense Pfizer, se vacunará al personal de la salud. En caso de que por algún contratiempo se demore la llegada de estas dosis, el sector sanitario igual comenzaría a ser inoculado en esta fecha con los viales chinos.
Según anunció el pasado 22 de febrero el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, a partir del 15 de marzo llegarán otras 1.558.000 dosis de Sinovac y entre el 8 de marzo y el 26 de abril unas 460.000 de Pfizer. Días atrás, sobre la fecha de su propia inoculación, adelantó: “Cuando me toque, me vacuno con la que me toque”.
El mandatario avisó que habrá “un proceso fluido y continuo” de vacunación, ya que “no va a haber tiempo muerto” entre las llegadas de las ya anunciadas y las que completen la compra hecha por Uruguay de 3,8 millones de dosis -entre Pfizer y Sinovac- y la reserva de 1,5 millones de la plataforma Covax, creada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para una distribución entre los países menos favorecidos.
Uruguay registra 56.542 contagios (6.929 activos, 67 de ellos en cuidados intensivos) y 601 fallecidos.
Durante el fin de semana ya se inocularon a cerca de 900 trabajadores de los vacunatorios, entre enfermeros y asistentes. Una de las primeras en recibir la inyección fue Erika Correa, vacunadora de la mutualista Médica Uruguaya, quien luego de finalizado el proceso correspondiente dialogó con la prensa. Allí, resaltó que la experiencia fue “bárbara” y destacó las fortalezas de la fórmula de Sinovac. “Es una vacuna normal como la que estamos acostumbrados a recibir en el esquema uruguayo”, destacó Correa. Además, invitó a la población a recibir dicha vacuna “con confianza” y apuntó que en el país “se compran vacunas de calidad” que generan “total confianza”.
Por su parte, Jaqueline Zorrilla, directora técnica en el área de Inmunización de la mutualista Casmu, apuntó que durante la jornada se ajustaron “todos los procesos vacunatorios” para que la inoculación sea “segura, eficiente y eficaz”.
Por ahora, rigen en Uruguay el cierre de fronteras al turismo (solo pueden entrar uruguayos y residentes, además de excepciones por cuestiones económicas, diplomáticas o personales, previa autorización del Poder Ejecutivo) y la apertura de bares y restaurantes hasta las 02:00 horas (si bien en Montevideo es la medianoche por disposición del Gobierno local).
Además, el pasado viernes se conoció la prórroga por 30 días de la ley aprobada por el Parlamento uruguayo y promulgada el 21 de diciembre pasado, que permite restringir el derecho de reunión “por razones de salud pública”.
(Con información de EFE)
MÁS SOBRE ESTE TEMA: