El Ministerio de Salud de Brasil ha informado este jueves de 50.434 nuevos contagios de coronavirus, así como de 755 víctimas mortales adicionales, confirmando así un aumento en ambas variables que no se registraba desde el pasado mes de agosto.
Las autoridades sanitarias han detallado que 6.487.084 personas han contraído la enfermedad desde el pasado mes de marzo, 5.725.010 de las cuales han logrado ya recuperarse. Las víctimas mortales ascienden a 175.270.
Según ha señalado la propia cartera brasileña, entre la semana del 22 al 28 de noviembre se registraron 237.400 casos, lo que supone un crecimiento del 17 por ciento respecto a la anterior.
La curva de contagios, explica, venía presentando una tendencia estable desde finales de julio, con algunos repuntes en agosto y octubre, pero ha sido a principios de noviembre, cuando la escalada de positivos ha crecido en mayor medida.
El secretario de Vigilancia de la Salud, Arnaldo de Medeiros, ha reconocido este jueves que se ha producido un “recrudecimiento de casos” y si bien ha explicado que se puede haber debido a la “inestabilidad del sistema” de conteo, la subida ha sido del 21 por ciento en las últimas dos semanas.
En cuanto al número de fallecidos, la situación es similar, ha explicado De Madeiros. A principios de noviembre se contabilizaron 2.300 fallecidos, mientras que en la última semana del mismo mes fueron 3.500, lo que supone un aumento del 50 por ciento.
A nivel territorial, todas las regiones han experimentado mejorías con respecto a los nuevos contagios, excepto las del sudeste, en las que estados como Sao Paulo, Río de Janeiro, o Minas Gerais, han experimentado un gran aumento. No así, en este último, en relación a los fallecidos, donde las cifras se han mantenido estables.
Con información de Europa Press
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