A un año de perder la visión por un ataque de los carabineros chilenos, Fabiola Campillay sigue pidiendo justicia

La mujer recibió el impacto de una bomba.mientras ella se dirigía al trabajo. Informes posteriores revelaron que las fuerzas de seguridad no mostraron voluntad de prestarle ayuda luego del ataque

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Fabiola Campillay el pasado 26 de noviembre de 2019, momento en el cual fue golpeada en pleno rostro por una bomba lanzada por un efectivo policial
Fabiola Campillay el pasado 26 de noviembre de 2019, momento en el cual fue golpeada en pleno rostro por una bomba lanzada por un efectivo policial

La historia de Fabiola Campillay estremeció a todo Chile. Tuvo lugar el 26 de Noviembre de 2019, en el marco del estallido social del país andino. Fabiola se preparó como todos los días para dirigirse a su trabajo, desde su casa en la comuna de San Bernardo, al sur de la Región Metropolitana. Cuando salió de su casa, un piquete de la policía militar chilena se acercó hasta donde ella esperaba un bus, momento en el cual uno de los uniformados, sin mediar provocación alguna como consta en la investigación, le disparó desde una distancia próxima una bomba lacrimógena que impactó de lleno en el rostro.

Fabiola Campillay y su esposo, Marco, días antes de recibir el impacto de una bomba en su rostro que la dejó con ceguera total
Fabiola Campillay y su esposo, Marco, días antes de recibir el impacto de una bomba en su rostro que la dejó con ceguera total

El ataque le produjo a fabiola una ceguera total y, desde entonces, diversos problemas asociados a la pérdida de sus ojos. De hecho, hace poco más de dos meses, tuvo que ser intervenida de urgencia nuevamente por complicaciones derivadas del golpe en su rostro.

Radiografía del daño que sufrió Fabiola Campillay en su rostro
Radiografía del daño que sufrió Fabiola Campillay en su rostro

Desde entonces ha transcurrido un año. Durante estos meses, Fabiola ha tenido que acostumbrarse a vivir una nueva vida que, dice ha sido sostenida únicamente por marido y familia. Es decir, no recibió compensación alguna por parte de las autoridades de gobierno ni de Carabineros.

“Para mi no ha habido justicia. Tampoco un llamado, al menos, de alguno de los miembros del alto mando de Carabineros que se haya dispuesto a acercarse. Por mi parte, estoy tratando de salir adelante sola, con mi familia. Pero aquí no ha habido interés de nadie, ni del gobierno”, señala.

Meses atrás fue revelado un video en el que se observa la acción policial y se escucha como un efectivo pregunta a al capitán Patricio Maturana Ojeda “¿se la piteó verdad?”. La frase coloquial, de tono despectivo, se interpreta como “¿la mató, verdad?”.

Mujer chilena sigue pidiendo justicia a un año de perder sus ojos tras ataque de un Carabinero

La investigación de la fiscalía decretó prisión preventiva para el policía acusado de haber disparado el bote de gas contra Fabiola. Claudio Ortega, el juez de garantía a cargo de las indagaciones, consideró que Patricio Maturana, debía ser considerado un “peligro para la sociedad”.

La investigación que hizo la propia institución de Carabineros, por su parte, estableció que dos funcionarios de sus filas fueran dados de baja. Al que no es Maturana se le atribuye se acreditó que, pese a que tomó conocimiento de que existía una lesionada, “no desplegó iniciativa alguna, además de declarar hechos contradictorios sobre lo ocurrido”.

Tras permanecer 90 días en prisión, la defensa del capitán Ojeda logró que se le indicara arresto domiciliario, algo que a juicio de la afectada, representa la escasa voluntad de la justicia, el Gobierno y las autoridades policiales por hacer justicia por la agresión.

Capitán Patricio Ojeda, dado de baja de Carabineros, por su responsabilidad en el ataque que provocó graves consecuencias físicas a Fabiola Campillay
Capitán Patricio Ojeda, dado de baja de Carabineros, por su responsabilidad en el ataque que provocó graves consecuencias físicas a Fabiola Campillay

Al respecto, Campillary dijo que “es necesario que se haga justicia contra este Carabinero que me atacó”. “No dejándolo en su casa, con arresto domiciliario, no. Él debe cumplir una condena, para que nunca más vuelva a pasar que alguien, desde el poder que tiene, se tome la atribución de cometer algo tan terrible como lo que hizo conmigo”, advierte Fabiola.

Fabiola Campillay, que fue cegada en ambos ojos por un bote de gas lacrimógeno de la policía en una protesta el año pasado, vota durante un referéndum sobre una nueva constitución en Santiago de Chile. 25 de octubre de 2020. REUTERS/Carlos Vera
Fabiola Campillay, que fue cegada en ambos ojos por un bote de gas lacrimógeno de la policía en una protesta el año pasado, vota durante un referéndum sobre una nueva constitución en Santiago de Chile. 25 de octubre de 2020. REUTERS/Carlos Vera

Se proyecta volver a trabajar, para eso está tomando un curso de computación. Fabiola ha vuelto a sonreír gracias al incondicional apoyo de su marido, Marco, y a sus tres hijos e hijas. Su familia, ha sido la razón para poder volver a ponerse de pie. “Quiero volver a trabajar y volver a hacer las cosas que hacía”.

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