Faltaban pocas horas para que se iniciara el horario de toque de queda que rige para todo el territorio nacional cuando vecinos hicieron un llamado de emergencia a las autoridades policiales de la zona. Se trataba de un elefante marino, como se conoce al Mirounga, especie que habita comúnmente en el sur de Chile.
El hecho fue advertido por transeúntes, quienes rápidamente llamaron a Carabineros, los que a su vez, debieron notificar además, a personal de la Armada de Chile. El elefante marino se desplazó por 10 cuadras en un sector que se caracteriza por ser el mayor centro urbano de la ciudad de Puerto Cisnes, ubicada al norte de la región de Aysén.
“Se desplazó muy rápidamente. Mi hijo se dio cuenta primero y al principio me asusté, pero como se mueven lento, me quedé tranquila y le dije que lo grabara”, relata Antonia, una de las transeúntes que se sorprendió con la presencia del mamífero en plena calle. “Nunca había visto uno tan cerca, y mucho menos en plena ciudad. Siempre estos animalitos los vemos en el mar y bien adentro, la verdad uno no se familiariza con ellos, los ve no más, de lejos y no se sabe mucho si son peligrosos, si pueden atacar a alguien, pero al menos aquí, lo que hemos visto, es que está asustado”, declara.
Se trata de un ejemplar que, por sus condiciones físicas, se adapta y desarrolla con mayor frecuencia en las zonas frías, en el mar. Puede alcanzar hasta 3 toneladas de peso, lo que los transforma en uno de los animales marinos más grandes que se deja ver en la zona. Se calcula que la población mundial alcanza los 650 mil individuos, concentrándose la mayoría, en el borde costero de países cercanos al continente antártico.
Si bien hasta el momento, no existe una explicación técnica formal que justifique las posibles causas que trajeron al “elefante marino” hasta esta zona residencial de Puerto Cisnes, lo cierto es que durante los últimos días, en los que se ha forzado a la población a disminuir la circulación y quedarse en casa por disposición sanitaria, se han registrado casos de visitas inusuales de algunas especies que generalmente viven en lugares silvestres.
La madrugada del pasado jueves, las cámaras de seguridad de la comuna de Las Condes registraron a un puma, que deambulaba libremente por las calles de la ciudad. Por la hora, no se encontró con ningún transeúnte y sólo fue advertido por personal de seguridad de la comuna, que a través de las cámaras registraron al felino. Tras dar aviso al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), ente encargado de gestionar este tipo de emergencias, el puma huyó sin poder ser hallado. Las autoridades debieron conformar una mesa de trabajo conjunta con vecinos, Carabineros y el SAG, para evitar eventuales ataques de animales silvestres.
No es la primera vez, con este avistamiento, sólo durante el 2020 ya se registran cinco visitas denunciadas de pumas en el sector oriente de la capital. En muchas de ellas, se ha debido proceder a inyectar, vía disparo, calmantes que duermen a los animales y posteriormente son llevados a su hábitat natural, ubicado en los cerros aledaños de las comunas de Vitacura y Lo Barnechea.
La sorpresa de los habitantes de Puerto Cisnes, sin embargo, fue toda una novedad, ya que nunca un “elefante marino” se había avistado tan lejos de la costa. Gracias a los registros en redes sociales se puede evidenciar el estado del animal que se encontraba muy confundido y nervioso por la situación. Fueron los mismos testigos, en acción con Carabineros y personal de la Armada de Chile, quienes ayudaron a resguardarlo y guiarlo a su hábitat.
MÁS SOBRE ESTE TEMA: