Tres venezolanos murieron y otros cinco resultaron heridos después de ser atropelladas por un camión cisterna en Perú, informaron el sábado medios locales.
Las víctimas formaban parte de un grupo de emigrantes que caminaba hacia la frontera, en la provincia peruana de Barranca, para regresar a Venezuela.
De acuerdo a información de los medios locales de Perú, el accidente ocurrió la madrugada de este viernes, específicamente en la carretera Panamericana Norte, a la altura de La Fortaleza, Paramonga, cuando las personas se sentaron al costado del camino a descansar.
Casi de inmediato, la ambulancia del SAMU del Centro de Salud en Paramonga llegó al lugar del accidente junto a la Compañía de Bomberos de Barranca para el traslado de los heridos al nosocomio de esta provincia.
Las autoridades peruanas informaron que identificaron el vehículo, pero aún no han podido detener al conductor del camión cisterna.
Asimismo, la prensa detalló que según los migrantes venezolanos heridos, el conductor del camión cisterna circulaba en alta velocidad por la vía y se dio a la fuga luego atropellar a sus connacionales.
Entre los heridos, que están siendo tratados, hay hombres y mujeres desde los 23 hasta los 44 años. Imágenes del lugar de los hechos muestran el grave daño causado por el conductor. Los heridos yacen al costado, algunos de ellos con sus pies destrozados por el impacto.
El embajador en Perú del gobierno provisional de Venezuela, encabezado Juan Guaidó, Carlos Scull, también confirmó la situación en su cuenta Twitter y aseguró que la misión diplomática estaría en el hospital, para ayudar a los venezolanos.
El fatal accidente ocurre en medio de la pandemia por el coronavirus, que ha empujado a miles de venezolanos que se encontraban en Perú a emprender el regreso a Venezuela, tras no poder sobrevivir en ese país, y ser desalojados por los arrendadores.
No es el único caso de personas que han intentado caminar para llegar a sus lugares de origen, ya que miles de ciudadanos de diferentes lugares desean volver a sus hogares porque no cuentan con dinero suficiente para seguir en la capital.
Hasta la fecha, el premier Vicente Zeballos informó que 10.524 personas han podido retornar a sus regiones; sin embargo, aún hay un extenso porcentaje que sigue a la espera. Incluso, algunos grupos intentan volver por su cuenta por la demora en la atención.
La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) alertó el viernes sobre la situación desesperada en la que viven los refugiados y solicitantes de asilo de regiones como Latinoamérica debido a la pandemia de la COVID-19.
Muchos de los refugiados en América Latina viven en zonas fronterizas o urbanas “y han perdido sus empleos en el sector informal, a menudo sin redes de seguridad social“, por lo que las medidas de confinamiento les han dejado sin ingresos, destacó el portavoz de la ACNUR Andrej Mahecic en rueda de prensa.
El vocero expresó una especial preocupación por los más de cinco millones de refugiados y migrantes venezolanos, la mayoría de ellos asentados en países vecinos de Suramérica, ya que un 80 % de los que trabajan lo hacen sin contrato, en la economía informal, según encuestas realizadas en la región en 2019.
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