El ex ministro de Justicia de Brasil y ex juez de la operación anticorrupción “Lava Jato”, Sergio Moro, negó este viernes haber intentado negociar con el presidente Jair Bolsonaro su ingreso al Supremo Tribunal Federal (STF) a cambio del retiro del director de la Policía Federal, como lo indicó el mandatario en una conferencia.
Moro renunció al ministerio esta mañana, argumentando que Bolsonaro “no lo quería en el cargo”, luego de que el presidente removiera al jefe de esa fuerza de seguridad, Maurício Leite Valeixo. “Le comuniqué que sería una clara interferencia política cambiar al director de la Policía”, expresó Moro en una conferencia de prensa en la que anunció su decisión.
Pero Bolsonaro le respondió con duras críticas apenas horas después y durante un mensaje en televisión. “Más de una vez, el señor Sergio Moro me ha dicho: usted puede sacar a Valeixo, pero en noviembre, después de que me haya postulado para el STF”, dijo el mandatario brasileño. “Es desmoralizante que un presidente escuche eso. Lamento que el que más tuvo que actuar dentro de la ley no lo haga”, agregó.
Minutos después de terminado el discurso de Bolsonaro, Moro se refirió en su cuenta de Twitter a estas palabras.
“La permanencia en el cargo del Director General de la Policía Federal, Maurício Valeixo, nunca fue utilizada como moneda de cambio para mi nominación al STF”, respondió el ex ministro. “De hecho, si ese fuera mi objetivo, habría acordado ayer con el reemplazo del Director General de Policía Federal”, agregó.
En un segundo tuit, el ex juez del “Lava Jato" expandió sobre la salida de Valeixo.
“De hecho, el director e la Policía Federal Maurício Valeixo estaba cansado de ser acosado dese agosto del año pasado por el presidente para ser reemplazado. Pero ayer no hubo solicitud de renuncia o decreto de exoneración que haya pasado por mí o que se me haya informado”, explicó.
“Interferencia política”
Moro dio un paso al costado tras mostrar su malestar por la decisión del mandatario de despedir a Valeixo, que le fue comunicada durante una reunión que ambos mantuvieron el jueves. El jefe de Estado ya había señalado en 2019 que cambiaría a la cúpula de la Policía Federal en un intento por tener un mayor control sobre el cuerpo del Estado. La cúpula policial se resistió a un cambio en la jefatura de Río de Janeiro que Bolsonaro proclamó públicamente.
“Fui juez federal durante 23 años. Desde 2014 estuve a cargo de la Operación Lava Jato, que cambió el nivel de lucha contra la corrupción en el país. Antes, en general, estaba impune, este escenario estaba impune”, recordó antes de comunicar este viernes su renuncia.
“A fines de 2018, recibí una invitación de Bolsonaro para formar parte de su gobierno. Teníamos el compromiso de luchar contra la corrupción, el crimen organizado y el crimen violento. Me prometieron una carta blanca para nombrar a todos estos cuerpos, como la Policía Federal”, expresó.
“Cuando comienzas a ocupar puestos debido a la presión de los partidos políticos, esto no es bueno para las instituciones. Bolsonaro insistió en cambiar al director general. Le dije: ‘No tengo ningún problema pero debe haber una causa’", dijo el ex ministro en relación a la salida de Valeixo.
Y agregó: “Le comuniqué que sería una clara interferencia política cambiar al director de la Policía”.
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