El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, que finalizó este martes una visita de cuatro días a EEUU, aseguró que su homólogo Donald Trump quiere iniciar negociaciones de libre comercio con su país, al tiempo que restó importancia al coronavirus, al señalar que hay un elemento de “ficción o fantasía” sobre el brote, que ya causó más de 4 mil muertes e infectó a más de 110 mil personas en todo el mundo.
Tras cuatro días en Florida, donde se reunió con el presidente Trump, Bolsonaro habló en Miami, durante una conferencia organizada por el centro brasileño de estudios Foro de las Américas, sobre el estado de la relaciones de ambos países, tema que centró la visita del mandatario.
Bolsonaro aseguró que en su reunión del sábado pasado con Trump, en el club Mar-a-Lago, en Palm Beach, a unos 100 kilómetros de Miami, el republicano se mostró partidario de avanzar en el tema del libre comercio entre ambas naciones.
“Él (Trump) indicó que hay interés” en el punto de que “comencemos las conversaciones sobre una política de libre comercio”, precisó.
La prensa hace ver más “grave” el brote
Bolsonaro por otro lado le restó importancia al brote de coronavirus y a la baja que ha provocado en los mercados financieros, entre ellos de la bolsa de Sao Paulo, que este lunes se hundió un 12,17 %.
“Creo que hay un elemento por decir de fantasía o ficción a su alrededor. No está tan mal”, señaló Bolsonaro, quien aseguró que los medios de comunicación hacen ver más grave el brote y sus impactos.
“Algunos de la prensa lograron convertir una caída en el precio del petróleo en crisis. Entiendo que ... es mejor (los titulares) caer un 30 % que subir un 30 %. Pero esto no es una crisis”, dijo Bolsonaro.
Durante un discurso en el que enfatizó de nuevo en la “confianza” que su Gobierno le ha devuelto a su país, las buenas relaciones que mantiene con Trump y las amenazas de la izquierda, Bolsonaro reiteró que Venezuela es punto de preocupación en la región.
Manifestó que junto con Trump saben de las “dificultades” de Venezuela y están buscando una solución, al lamentar que el país fue “tomado por los socialistas”.
Bolsonaro recibió las llaves de la ciudad de Miami (Florida) de su alcalde Francis Suárez antes de partir a Jacksonville, en el norte del estado, para visitar la planta de la brasileña Embraer y regresar de ahí a su país.
Suárez señaló que la relación de la ciudad con el país sudamericano supera lo económico y lo lleva al plano de los lazos “personales” con la gran comunidad brasileña, y el arte, cultura y tradiciones que le imprime a Miami.
Agregó además que cada año el sur de Florida recibe a un millón de turistas brasileños.
(Con información de EFE)
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