Un atropello múltiple dejó este martes a la noche dos muertos y 17 heridos durante una manifestación en pleno toque de queda en San Pedro de la Paz, en el sur de Chile.
Un video difundido en las redes sociales captó el momento en el que el vehículo aceleró en dirección del grupo de personas, que estaban realizando un cacerolazo en el marco de las protestas que asolaron el país andino en los últimos días. Según medios locales, fueron embestidas unas 20 personas.
Uno de los fallecidos hay un niño de 4 años, informó el gobernador de la provincia Concepción Robert Contreras. La otra víctima mortal es un joven cuya edad no trascendió.
Tras el atropello, el conductor fue rodeado y golpeado por los manifestantes, quienes luego apedraron y volcaron su auto hasta destrozarlo.
El conductor, un hombre de 34 años que fue detenido, se encontraba en estado de ebriedad: los controles de alcoholemia a los que fue sometido marcaron 1,49 gramos de alcohol en la sangre, informó el medio local Cooperativa.
11 de las 17 víctimas en el marco de las protestas que se desataron hace cinco días murieron en medio de los saqueos e incendios a supermercados que se reprodujeron desde Santiago al resto del país, aunque solo se ha podido identificar tres cadáveres porque los demás cuerpos estaban calcinados.
Otras cuatro muertes fueron a manos de los militares que han sido desplegados en varias zonas del país en las que se decretó el estado de emergencia, confirmó la Fiscalía Nacional de Chile este martes.
El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) contabilizó que 1.333 personas fueron detenidas a lo largo de las protestas, 181 niños o adolescentes, desde el sábado, y constató que 88 personas se encuentran hospitalizadas por heridas de arma de fuego, cinco de ellas en estado grave y una con riesgo vital.
Asimismo, el INDH informó de que ha interpuesto 12 querellas por denuncias de torturas y apremios ilegítimos.
El aumento del precio del pasaje del metro de la capital chilena marcó el inicio de una oleada de protestas que con el paso de los días, despertó el hartazgo de parte de la ciudadanía por las altas tarifas que pagan por servicios de luz o gas, el nulo reparto del sistema de pensiones o los deficientes servicios de salud pública, generando un estallido social desconocido en la historia reciente de Chile.
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